Mucha, pero mucha gente, entre ellos buenos amigos nuestros, pese formaron y hasta unos cuantos siguen formando parte de eso que llaman el G-4, contubernio en el que los agentes de los gobiernos de EEUU agrupó a la "dirigencia" de la extrema derecha, la de las guarimbas, los motorizados degollados y los seres humanos quemados vivos, vio en las declaraciones de Marquina, como una rebelión grupal, insignificante, divisionista para debilitar a su universo.
Leí trabajos de amigos a quienes por el largo tiempo que tengo de conocerles, leerles y hasta conversar con ellos, en los cuales se manifestaron furiosamente contra Marquina y sus acompañantes y hasta llegaron a llamarles "nuevos alacranes". Término éste que se le da a quienes se califican como traidores y particularmente divisionistas.
En la jerga o lenguaje coloquial venezolano, un alacrán por lo ponzoñoso, suele hacer daño por puro instinto. Estos alacranes, tienen la ponzoña en el cerebro, en la cultura que este acumulan y lo son hasta instintivamente. Para ganarse los espacios que creen de ellos o simplemente ambicionan, se valen de sus ponzoñas. En este caso inventan historias maliciosas, mienten, difaman y hasta se vuelven "espías" del enemigo. Son, moralmente hablando, más dañinos que los caballos de Troya. Pues el caballo troyano era una simple escultura de madera y quienes dentro de él se ocultaron eran soldados enemigos. Los "alacranes", son otra cosa, están dentro del grupo, a la vista de todos, sin ocultarse, pero metiendo la ponzoña a diestra y siniestra hasta que logran sus metas.
En estos últimos años de la política venezolana, quien habló primero de los "alacranes" y como con mucho énfasis, fue el general Müller Rojas, advirtiéndole al presidente Chávez que estaba rodeado de ellos. Para el viejo militar retirado, esos "alacranes" no sólo llevaban chismes y mentiras, que es una de las formas o modos de operar quienes así son llamados, sino también de aconsejar al presidente para hacerle tomar decisiones inadecuadas. Esos alacranes de los cuales habló el exmilitar, tenían como meta, dividir y descalificar, ante el presidente, a determinadas personas, como él mismo, para que no fuesen tomados en cuenta y en consecuencia marginados.
Cuando Marquina habló del fin del interinato, lo que es lo mismo que haber hablado de algo inexistente, dijo además que la AN del 2015, la tampoco tiene fundamento legal, se mantendría vigente y, que un organismo de 4 personas, por ellos escogidas, seguiría manejando los recursos secuestrados en el exterior. Y dijo aquello consciente, porque bien sabe que se mantienen sobre el enorme soporte que les han venido dando EEUU y sus aliados, como un invento de los "Súper héroes", que pese su inexistencia, abunda quienes en ellos creen, esperan milagros y hasta se los atribuyen, lo que no es nada nuevo sino que nació con la humanidad misma. Los griegos tenían dioses por montones, para cada cosa, que eran héroes y hasta se materializaban en la tierra con sus hijos, como Aquiles, Eneas, Tetis, etc. En esto que los españoles decidieron llamar América, los Incas y los Aztecas, pese ser "indios y salvajes", según la muy alta cultura europea, fueron más racionales e inteligentes y tomaron como Dios al sol. ¡Hay que ver no sólo lo que ese enorme y alto astro tiene y significa para nosotros y lo que la gente más sencilla lo sabe!
Marquina estaba dando una versión programada y determinada no por él y menos por el inefable Guanipa, más si tomamos en cuenta que le apoyó una aplastante mayoría de diputados y de todos los partidos que forman o formaban el G-4, sino desde el propio EEUU o si se quiere desde la Casa Blanca, ¿Cómo pensar, pretendiendo ser sensato, que Marquina y Guanipa, unos segundones en ese universo, iban a arrastrar, convencer, sin poder político, suficiente talento, apoyo de masas y menos recursos financieros, para dividir a los partidos todos de la oposición más radical y además desafiar lo dispuesto desde EEUU, donde en verdad se decide el destino de los recursos secuestrados? ¿Hay que ser por demás inocente para sólo pensar eso. Y más cuando, pese Guaidó suspendió la sesión prevista para el día 29, los "alzados" le desafiaron más aún, se reunieron el 29 y le aniquilaron.
Esos amigos de los cuales hablé arriba, quienes pecaron de inocentes creyendo en el monigote de la presidencia interina para tumbar al gobierno y hasta ganar unas elecciones, volvieron a lo mismo, al optar por reconciliarse con Guaidó, a quien ya habían rechazado por lo tanto que ellos y todo el mundo sabe, dando por un hecho que Marquina y los suyos, habían optado por operar por su cuenta, sin respaldo del gobierno de Estados Unidos, sus aliados y obviando la disponibilidad de estos a seguir en lo mismo, pero de otra manera, dado que ya casi llegan al llegadero, como ponerse de acuerdo con el gobierno de Maduro en lo que en verdad les interesa, lo que se demuestra, en lo inmediato, con lo relacionado con Chevrón que, hasta siendo una empresa mixta han puesto a presidirla a un gerente americano, contraviniendo lo antes hecho y demandado por Chávez y otras tantas cosas más, hasta unas "elecciones libres", como suelen decir en ese mundo opositor, que podría ser que, cualquiera de esos sancionados y exiliados, por motivos distintos a la política, participen libremente como candidatos.
Mis amigos opositores, cometiendo el error de analizar más que con la masa encefálica, sensatez e inteligencia, lo hicieron con las vísceras, estados emocionales y vieron en Marquina y el enorme número de diputados, hasta de distinta procedencia, que le apoyaron, salvo los pocos "íntimos" de Guaidó, en eso de "repartirse la cochina", unos alzados y desafiantes del poder gringo y sus aliados.
Olvidaron, como ya dije en otra entrega, que desde la UEE, en los meses finales del año, se anunció que Guaidó, llegaría hasta diciembre y no dieron valor alguno a la realidad que hablaba de los acuerdos periódicos de Fedecámaras con el gobierno y los anuncios o señales, quizás como de humo, para ellos, sobre todo a partir de la guerra ruso-ucraniana, dada la necesidad de petróleo que urge a Estados Unidos, sabiendo además que de petróleo o algo que a eso se parezca, lo único que el grupo de Guaidó maneja, en el que al parecer ni está Marquina y Guanipa, por lo menos con mucha injerencia, es Citgo y, esa empresa, está allá, bajo cuido y vigilancia del gobierno de Estados Unidos.
Y mis amigos, que llamaron a Marquina y quienes le acompañan, "alacranes" o agentes dedicados a dividir al G-4 por su libre iniciativa e intentar invalidar la "muy importante, descollante figura de Guaidó", no tomaron en cuenta que antes, el presidente de Francia, el señor Macrón lanzó un mensaje "amistoso" a Maduro y acerca de la necesidad de intensificar y ahondar las rondas de diálogo entre oposición y gobierno para lo que ofreció su país como sitio de reunión, como también descalificaron, con versiones distorsionadas, el encuentro entre ambos personajes.
Y nada les ha dicho todavía que, el gobierno español, acaba de designar embajador para Venezuela, el cual había retirado en el 2020 en solidaridad con Guaidó y su "presidencia interina". Pero "muerto el perro, se acabó la rabia".
Y cuando la Agencia del Tesoro de Estados Unidos, declaró que los recursos y propiedades venezolanos secuestrados en Estados Unidos, "no pasarían a ser manejados por el gobierno de Maduro", también cayeron en la inocencia de creer que aquel organismo gringo estaba apoyando a Guaidó, pasando por alto que de lo declarado por Marquina, acordado con el gobierno del norte, es que la figura de cuatro administradores harían el nuevo rol de administradores.
Es decir, esos amigos nuestros, que no sólo son ellos, hay como una multitud, que tomaron a Marquina y una larga lista de diputados, la mayoría, casi el 80 % de los partidarios antes del G-4, o sea de Guaidó, López, Borges, etc., como simples traidores y alacranes, actuando por su cuenta y en función de hacer las paces y entrar en negociaciones particulares con Maduro, volvieron a pecar de inocentes, al no darse cuenta que la jugada solo lleva en lo inmediato a desmontar lo que incomoda, molesta, moral y políticamente, para el avance de las negociaciones, que exigen urgencia, sobre todo por la materia petrolera de parte de EEUU y la falta de recursos de parte del gobierno venezolano. Y de todo lo que eso pudiera haber, es lo de la figura de la presidencia interina, la que hasta por distintas razones, incomoda para llegar a acuerdos acerca de eso que EEUU, su gobierno y la oposición misma llama "elecciones libres". Sin olvidar, los cuestionamientos que, desde distintos ángulos y espacios, se hace a la administración de Guaidó de los dineros que, los gobiernos de Estados Unidos y otros países han puesto a su disposición.
Pero también, dejándose llevar por estados de ánimo infundados, sentimientos que, en política, más son los daños que ocasionan, tanto que provocan malos cálculos y costosos errores, en lugar de percibir a Marquina y sus acompañantes, personajes que están rompiendo cierto diques, amarras, que secuestran el movimiento y al mismo tiempo convertidos en los verdaderos voceros de Estados Unidos en lo que concierne a la política interna de Venezuela, país determinante para los fines que ellos buscan, les vieron desde el inicio como otros alacranes.
Con los movimientos relacionados con Chevrón y más recientes declaraciones de Macrón, quien vuelve sobre el mismo asunto, diciendo, ""Francia apoya a las fuerzas democráticas de Venezuela que se organizan como desean. No nos corresponde a nosotros comentar sus decisiones en este área", uno espera que el mundo opositor se percate que, a Guaidó le dieron "matarile" como presidente interino y además que, no se sorprendan que en el futuro inmediato, no sea Venezuela, sino Estados Unidos, quien le cobre lo que debe, relacionado con las partes de los recursos secuestrados que le entregaron para ser administrados.
https://www.aporrea.org/venezuelaexterior/n379569.html
Y es pertinente hacer alusión a los inocentes, porque mucho de esto se desenvolvió y desenvuelve en los tiempos cercanos, anteriores y posteriores, a ese día, el 28 de diciembre.
