Ante una Venezuela asediada, descolonización y soberanía tecnológica.
Uno de los objetivos de mayor importancia para el país, es fortalecer nuestra independencia tecnológica. En el entendido que el desarrollo tecnológico, es una condición necesaria para garantizar nuestra soberanía e independencia política, se requiere crear la organización de una infraestructura técnica, profesional y de talleres especializados, con suficiente capacidad para diseñar y construir maquinarias y equipos para la producción de bienes y servicios.
Resulta sumamente importante para los países subdesarrollados, construir una industria generadora de bienes de capital. En nuestro caso, se pudiera afirmar que el problema se limita a atender y conservar los talleres y empresas existentes y que solo tenemos que fortalecerlas. Para lograr esto se deberán hacer muchos esfuerzos para no perder, tanto las infraestructuras, como sus recursos humanos con larga trayectoria y acumulación de conocimientos.
La mayoría de las sanciones económicas infligidas al país están dirigidas a nuestra industria petrolera. Estas medidas sancionatorias, afectó por igual el sector de empresas metalmecánicas que históricamente han suministrado equipos, maquinarias y servicios a la industria petrolera. Es oportuno señalar, que en estas empresas se lograron alcanzar altísimas calidades de servicio y altos parámetros tecnológicos. Este nivel de desarrollo tecnológico alcanzado por nuestras empresas, logró en muchos casos convertirlas como proveedoras confiables de bienes y elaboración de ingeniería para la industria petrolera mundial. Hay muchísimos ejemplos, quienes nos hemos formamos en ella lo sabemos.
Creemos igualmente, que el sistema eléctrico nacional es otro de los objetivos de las sanciones económicas, que buscan afectar y efectivamente afectan tanto los procesos industriales, como a la calidad de vida de la población. Todas estas afectaciones tienen un solo causal y solo consecuencia de nuestra profunda dependencia tecnológica.
Conociendo esta historia y conociendo las potencialidades que tenemos y las que podemos desarrollar, resta solamente planificar nuestra independencia tecnológica que tenga como principal objetivo asistir a nuestra industria petrolera y eléctrica.
Hoy día es posible la fabricación de otros tipos de maquinarias, equipos y bienes materiales que tradicionalmente se han construido para la industria petrolera. La ampliación del abanico de equipamientos ofrecerá oportunidades para el desarrollo económico y fortalecerá nuestra independencia tecnológica. Puesto que no es confiable depender de tecnologías adquiridas a los países desarrollados, tenemos que ser capaces a través de la investigación y desarrollo, en un corto plazo dominar y mejorar tales tecnologías. No podemos esperar que estos objetivos lo hagan otros, debemos ser capaces de alcanzarlos con esfuerzo propio.
De acuerdo a todo esto, proponemos concretar la ampliación a partir de nuestras potencialidades de infraestructuras físicas y profesionales existentes, actualmente algo ociosas, iniciar caminos de desarrollos tecnológicos. El mismo, consiste un paso a paso, escalón tras escalón, etapa por etapa, de la ‘’FABRICACIÓN EN EL PAÍS DE TURBOMÁQUINAS-GENERADORAS DE POTENCIA’’. Estos equipos, conjuntamente con las tecnologías asociadas a ellas, estarán destinados a fortalecer nuestras capacidades de producción. Estando seguros que impactarán drásticamente en nuestras capacidades de producción de la industria petrolera, petroquímica, gasífera, termoeléctrica, siderúrgica y en general la gran industria nacional.
Para lograr esto, es imprescindible aglutinar, especialistas, académicos, investigadores, innovadores y empresarios, y que el estado asuma la defensa de la producción nacional y el compromiso para promover y consumir estos desarrollos tecnológicos, que tendrán sello nacional. De lograrse este objetivo, representará un significativo fortalecimiento de independencia tecnológica en todo el aparato productivo nacional.
En favor de este planteamiento, vale decir que, coincidenciamente el pasado 9 de diciembre en el marco del Consejo Presidencial de Economía, el presidente Maduro aceptó la propuesta de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras) de incorporar a la empresa privada en el fortalecimiento del Sistema Eléctrico Nacional (SEN)
Ante la mencionada propuesta el presidente Maduro ordenó la instalación inmediata de una mesa de trabajo con el sector privado y el Ministerio del Poder Popular para la Energía Eléctrica (MPPEE) para discutir y concretar estas fórmulas empresariales. Manifestando: "Estoy de acuerdo, bienvenida la inversión nacional, las fórmulas empresariales nacionales, para nosotros despegar como un cohete en la producción de megavatio en la... del servicio de la electricidad". Lo que podría ser una oportunidad para que de forma organizada la experiencia de los profesionales y técnicos del sector eléctrico y metalmecánico que atiendan este llamado, constituidos en una red de profesionales y técnicos, nos propongamos entre otras acciones, la incorporación a esa mesa.
Red de descolonización tecnológica, Ali Rodríguez Araque.