Las últimas elecciones ganadas por el presidente Hugo Chávez implican una serie de tendencias que la oposición obstinadamente niega. La gente no cree en el cuento de la dictadura, salvo una minoría de venezolanos que viven en una burbuja donde existe miedo a perder pertenencias. Es impresionante escuchar de los estudiantes de la oposición, argumentos sin fundamentos para oponerse a la enmienda. Un ejemplo de ello es cuando usan franelas con la frase “yo también quiero ser presidente”, y me pregunto ¿dónde carajo dice que le está prohibido a algún venezolano postularse a ser presidente?, pero no es una simple frase, sino un lenguaje limitado para quien conoce un mundo limitado. Otras personas me comentan que están cansadas de manifestaciones, de diatribas, de discusiones, como si cambiar el rumbo político y económico de un país, no implique todo eso. Incluso estando de acuerdo o no con los cambios, es obvio, que esas diferencias deben de manifestarse de algún modo en la sociedad. Sin embargo, con la globalización, la Internet, la rapidez de la información, nadie concibe vivir en una burbuja, no puede creerlo porque virtualmente se siente conectado con todo el mundo. Si hasta sabe que sucede con Obama en tiempo real. Pero no es así. De Obama no sabemos nada, salvo miles de interpretaciones a favor o en contra de millones de opinadotes de oficio, incluyendo grandes medios de comunicación. Ese mundo está más lejano a nosotros del que creemos, como están lejanos los barrios de Caracas de la clase media de la misma Caracas. Contemplando desde el último piso del edificio del MINCI las barriadas caraqueñas, se adivina un sub mundo, un universo desconocido para mí que soy venezolano, maracucho y vivo en Bolívar. Describir ese mundo y explicar como es su comportamiento electoral y por qué, me obligaría a vivir con ellos. Tan solo el hecho de su movilización es diferente a la mía. ¿Cómo entenderlos, cómo saber qué piensan y luego tener la osadía de interpretarlos políticamente hablando?. En cuanto trate de hacerlo, aún valiéndome de atajos filosóficos, estaría construyéndome una burbuja virtual. Cuantos políticos, intelectuales, académicos, estudiantes, hablando paja de lo que no conocen. Y por eso la impotencia de no entender absolutamente nada de lo que sucede en el país.
Por eso la política más cercana a esa realidad rinde sus frutos, por eso la gestión que llega a esa realidad es favorecida con el voto popular y parece irónico, pero la imagen de un gobierno que sabe simular tocar esa realidad también gana electores. La oposición es obstinada en afirmar que Chávez nos está llevando al desastre, a una dictadura sin libertades, pero los hechos demuestran lo contrario. La figura del referendo revocatorio pasa desapercibida para los ermitaños de esas burbujas. El único presidente en el mundo que concreta el referendo y se somete al mismo, porque ni siquiera en los documentos históricos de los griegos, se habla de ese poder popular.
De aprobarse la enmienda, los ciudadanos tendrán el poder de decidir si continúa un gobierno que interpreta y transforma para bien su realidad. Un derecho para todos los ciudadanos sin exclusión, eso quiere decir que si la oposición lo hace bien, puede continuar gobernando si es el caso. Entraremos a un nuevo escenario, y para mal de mis amistades, con más debates, más discusiones, más polémicas, porque los seres humanos somos así, y porqué necesario es romper las burbujas y vivir en sociedad, no aislados en hogares virtuales donde la televisión y la Internet te evitan la dura tarea de convivir con los demás. Te gusten o no. ¿Cuánta intolerancia tienes guardada en tu burbuja?
Davidjavier18@hotmail.com