“Sembrar la conciencia como las armas para ganar la batalla”, son estas mismas palabras del Comandante Fidel quien abriga con su guía y lumbre revolucionaria a otro gran hombre que esta escribiendo en hechos las transformaciones necesarias de un pueblo que ha decidido librarse de la ignominia del imperialismo y sus borregos en Venezuela, es el presidente Chávez movido por todos esos grandes sentimientos dignos de un revolucionario quien representa la dignidad del pueblo venezolano y de la efervescencia que levantan la prodiga libertaria hoy en los pueblos hermanos de nuestra Latinoamérica en el ideario del padre Libertador Simón Bolívar.
Cuando estas dos banderas de patrias heroicas, Cuba y Venezuela herederas de su propia historia cosechadas por el emprendimiento demostrado con el coraje y el ímpetu de Bolívar y el apóstol José Martí, y de sus pueblos que se mantienen firmes empujados por la fuerza del candil revolucionario que han legado nuestros pueblos en seguir batallando a través del espiral de la historia hacia la justa liberación definitiva de las patrias chicas y la patria grande.
Ahora hay un momento histórico que ha permitido durante estos últimos diez años el desarrollo de la revolución bolivariana, que es parte de ese ciclo y de la descomposición del capitalismo. Precisamente cuando el proceso revolucionario tiene la claridad suficiente para distinguir, quien es el enemigo antagónico de clase y sus actores, no debe desperdiciar esfuerzos en golpear a sus aliados que acompañan los primeros pasos que imprime el proceso revolucionario bolivariano hacia el modelo de una sociedad socialista, refiriéndome justamente en este caso al PCV a quien no hay que agregarle guirnaldas para hacerle relucir su indoblegable postura revolucionaria en todo su camino andado al lado del pueblo combatiendo al imperialismo y luchando por la construcción de una nueva sociedad en la que logre esencialmente la extinción de la explotación del hombre por el hombre.
De ello no cabe duda en una organización que toma como herramientas de análisis al marxismo-leninismo cual les ha servido siempre a los comunistas para el estudio sobre sus bases científicas y la acción revolucionaria confrontada con la práctica social como criterio de la verdad no absoluta. Pues, es por ello que el marxismo nos separa de otras orientaciones ideológicas que no toman como fuerza material transformadora al proletariado en general, arrasando con las falsedades y las mentiras de doctrinas que sus contrarios esgrimen desde sus variantes idealistas, conciliadoras, socialdemócratas y reformistas que no alcanzan la definición absoluta de una sociedad sin clases.
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De tal forma que si tenemos bien clara la composición de cada una de las fuerzas revolucionarias que apoyan y contribuyen al avance del proceso revolucionario en el reconocimiento del liderazgo del presidente Chávez, esté debería estar sujeto al conocimiento de la conformación de los bloques que constituyen las tendencias políticas quienes forman parte del PSUV, razón por la cual el PCV no entra a la constitución de esta necesaria unidad que busca agrupar a todos los sectores revolucionarios, debido a su carácter de clase, estando comprometido con los objetivos mas estratégicos de la revolución.
El PCV asume a la revolución bolivariana sin duda alguna como suya al igual que todos los movimientos y organizaciones políticas y sociales que forman parte del PSUV, respetando los canales abiertos de la discusión política y táctica de la unidad revolucionaria y las exigencias que acuden al proceso, aportando, y desarrollando los mecanismos mas adecuados entre la diversidad de ideas y puntos vista cuales surten el debate y la discusión de los revolucionarios en consideración a la perspectiva que abre la edificación del socialismo.
Jugando un papel importante la participación y contribución que esta realizando el PCV frente a la Reforma Constitucional, ante los ataques que han tratado de levantar los detractores de oficio de la información mediática contra el gran trabajo que hemos venido desempeñando en todos los organismos del partido y la juventud llevando el debate con las masas populares cuales han sumado su apoyo consciente y solidario expresados en la profundización que muestran los contenidos de las diferentes materias apreciadas en lo político, lo territorial, lo social, los derechos y reivindicaciones de la mujer y el genero humano, perfilando de sobremanera el carácter socialista hacia donde le permita transitar el alcance de la sociedad socialista.
Por lo tanto no cabe discusión sobre si cometimos o no errores y aciertos, de lo bueno o lo malo acerca de la actuación del PCV a los que se le señala en la historia por parte del presidente Chávez, si muy bien cualquiera esta omiso de cometer fallas y considerar corregirlas en la marcha siendo conscientes de que la realidad objetiva y las condiciones que se presentan en determinado contexto y particularidad son cambiantes según las correlaciones de fuerzas cuales se presenten a las circunstancias de la lucha antagónica de clases, de tal manera que se hace imposible ocupar totalmente la verdad absoluta y a su vez el fenómeno de la perfección.
Solo existe una garantía real para los y las revolucionarios para lograr en medida el socialismo y luchar por obtener la máxima escala de la sociedad, la desaparición de las clases, esta en la siembra de la conciencia del hombre, de las nuevas generaciones, de la humanidad, como muy bien constantemente lo ha recogido el Comandante Fidel Castro Ruz, cada vez que puede en sus intervenciones hace el llamado a la toma de la conciencia, así lo expreso en este ultimo encuentro de Fidel y Chávez, realizado en la Habana, diciéndole “pero esa humanidad hay que salvarla… la conciencia es el arma mas importante de esa batalla… sembrar conciencia, sembrador de conciencia”.
Toda la gloria del mundo cabe en un grano de maíz. José Martí
¡Patria Grande y Socialismo!
¡Venceremos!
