#PareceCuentoPeroEsAnecdota
En una nueva muestra de su ofensiva contra la inmigración, Trump inaugura en un vasto humedal subtropical repleto de caimanes, cocodrilos y pitones la prisión de ‘Aligator Alcatraz’ o ‘Alcatraz de los caimanes’, mientras adelanta el proyecto para esculpir su rostro junto a cuatro presidentes estadounidenses: George Washington, Thomas Jefferson, Theodore Roosevelt y Abraham Lincoln en Monte Rushmore, ubicado en Dakota del Sur. ¡De verdad parece cuento, pero es anécdota!
Ya lo dijimos en crónicas anteriores: "De cuando en cuando un perfecto imbécil es elegido presidente", pues los atropellos del presidente de EE.UU Donald Trump son cada vez más insólitos y difíciles de resumir en los breves espacios que disponemos los periodistas y que gentilmente nos brindan los medios de comunicación comprometidos con la verdad.
Dieciocho (18) niñas y niños venezolanos se encuentran secuestrados por el actual gobierno estadounidense liderado por Trump y asesorado por secuaces de igual talante psicópata. Este demencial exabrupto y muchos mas son ignorados por quienes tienen el trabajo de velar por los derechos humanos a nivel internacional, pero sufren del síndrome Shakira, y no nos referimos al "síndrome del impostor".
En este sentido, nuestro gobierno ha declarado persona no grata al Alto comisionado de DD.HH de la ONU Volker Türk, a quien el presidente de la Asamblea Nacional Jorge Rodríguez llamó "sátrapa" y "basura", a la vez que lo acusó de hacerse "la vista gorda de crímenes atroces" y pidió a la Fiscalía venezolana abrir una causa penal en su contra.
Türk nunca se ha pronunciado con claridad sobre la situación de los más de 250 migrantes deportados por Estados Unidos a El Salvador, donde se encuentran secuestrados en una cárcel de máxima seguridad bajo el control del cancerbero Nayib Bukele, ni tampoco sobre los infantes venezolanos retenidos injustificadamente.
A pesar de que analistas económicos señalan que la política anti migrante de Trump reducirá el crecimiento de Estados Unidos en 2025 en más de 100.000 millones de dólares, la administración de Trump impulsa una política de deportaciones masivas que incluye revocar la ciudadanía a migrantes naturalizados.
Mientras tanto, el otro orate multibillonario Elon Musk anuncia la creación de un nuevo partido político empresarial que desafiará al tradicional bipartidismo de republicanos y demócratas y enfrentará las políticas de su antiguo mejor amigo. Musk, que al poco rato de aprobar atrocidades muestra su arrepentimiento, también se lamentó de empuñar una motosierra junto al desquiciado Milei.
A todas estas, Trump ha bajado el tono de voz en torno a su disparatada política arancelaria, ya que sus amenazas parecen no asustar a China ni a nadie más. Su obsesión sigue centrada en el envío de migrantes a prisión y posterior deportación, muchos de ellos son atrapados por agentes enmascarados luego de salir de las Cortes de Justicia, donde acuden a citaciones tendientes a "regularizar su status migratorio".