Revolucionarios trasnochados

El grupo estaba de lo más tranquilo, aunque hablaba del comportamiento de ciertas personas que se han beneficiado con los logros del proceso revolucionario y no lo agradecen, y de repente llegó Pedro Cachamay, preguntó sobre el tema de conversación, estuvo de acuerdo y se soltó con el motivo que lo inquietaba:

“Sucede, estimados amigos, que aquí hay gente supuestamente apoyando el proceso, hasta arribistas, diría yo, y pretenden ser más chavistas que Chávez, cuando en realidad nosotros sabemos quién es quién. Y digo a esto porque conozco personas que ahorita se dan golpes de pecho diciendo que son revolucionarios, creyendo que los demás somos tontos y no conocemos la historia. ¡Qué equivocados están! Si yo, este mismo, que viene echándole pichón, desde niño y que enfrentó los gobiernos de la IV República, sabe bienmente que durante ese tiempo los susodichos se dedicaron a trabajar en los organismos y empresas públicas y durante ese tiempo no dijeron ni pío, mientras tanto ustedes, otros compañeros y yo, nos reuníamos para combatir aquellos que de una u otra forma estaban arruinando la Patria.

Ahora vienen con sus caras bien lavadas a decir que hay que enfrentar el imperialismo y a la amenaza que representan los partidos de la oposición para el proceso de cambio que vive el país. ¡Qué desgracia! Cuando todos sabemos que vienen de la fila de la derecha y si fueron algún día de izquierda, nunca hicieron un gesto para demostrarlo; al contrario, se dedicaron de una u otra forma a comprar propiedades, como carros y apartamentos; mientras otros compatriotas se sacrificaron, sobrevivieron y hasta renunciaron a sus trabajos de las empresas publicas (evitando que los botaran por su actitud antigobierno), para ver, al fin, lo que estamos observando hoy con el proceso de transformación que lidera el Comandante Hugo Chávez.

Por eso, egregios amigos, con esos “revolucionarios trasnochados” hay que tener mucho cuidado, porque uno sabe si en realidad son capaces de salir a defender esta revolución a la hora de las chiquiticas, pues la historia nos puede dar muchos ejemplos al respecto”, finalizó diciendo Cachamay, aunque el grupo no admitió totalmente su opinión.

emalaverg@gmail.com / @Malavermillo


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Emigdio Malaver G.

Margariteño. Economista y Comunicación Social. Ha colaborado con diferentes publicaciones venezolanas.

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