Nos hemos librado por ahora -y digo categóricamente por ahora- de una situación similar a la que se está desarrollando en estos momentos en Ucrania. La oposición venezolana apátrida ya había configurado los escenarios necesarios para el golpe de estado, generaron una cruenta guerra económica, violencia, asesinatos nunca antes vistos en nuestro país de la manera en que se perpetraron; con francotiradores, guayas para decapitar a compatriotas inocentes, quema de infraestructuras y bienes públicos y privados ocupados por seres humanos, sí seres humanos, en los cuales había niños de nuestra Patria. Por si fuera poco, trazaron un plan para asesinar a nuestro camarada Presidente, para así acabar con nuestra Revolución Bolivariana y chavista, sin importarles en lo absoluto las consecuencias de orden social que esto conllevaría, y por supuesto, en su lista estaba y estará acabar con las vidas, por medio de desapariciones y asesinatos de nuestros dirigentes políticos y líderes comunitarios del proceso, para evitar con ello la arremetida revolucionaria que no se hubiera hecho esperar.

Hasta ahora solo se han salido con la suya en el terreno de la guerra económica, pero un aspecto digno de resaltar es el hecho que estos carúnculas, es decir, restos aberrantes, de la IV República, no han comprendido el espíritu de lucha, de aguante, compromiso, constancia y determinación firme de los revolucionarios. Sabemos que los elementos fácticos seguirán haciendo su trabajo, dentro y fuera del país.

Es momento propicio por parte de nuestro gobierno de dar pasos firmes y certeros hacia la toma de decisiones, que redunden en una mayor confianza para la cohesión, hoy a mi modo de ver un poco disminuida, de las filas revolucionarias. No hay que temer cuando la brújula nos indica el camino correcto. Nuestro pueblo ha demostrado la madurez política, a pesar de las divisiones producto del sectarismo, clientelismo y las parcelas de poder que algunos han creado y convertido en pequeños feudos, que flaco servicio le han hecho a nuestro proceso y al partido.

Sin embargo, aquí seguimos incansables, consecuentes, rodilla en tierra en torno al legado de nuestro Comandante y de nuestro ahora Presidente Nicolás Maduro. Creo recoger el sentir de muchos camaradas que esperan, al igual que yo, que se profundice nuestro proceso revolucionario y que se haga la verdadera revolución dentro de la revolución. Apliquemos el árbol de las tres raíces, las tres R al cuadrado; inspirémonos en nuestro maestro Simón Rodríguez, demos pasos claros para desmontar el estado burgués, causante de los grandes males que aquejan a nuestra Revolución. Desmontemos esas estructuras, ya que son incompatibles desde todo punto de vista con nuestro proceso. Es imposible hacer una revolución bajo la égida del estado burgués, ya que ello es dialécticamente contradictorio.

Ejerzamos realmente la contraloría social. Para ello es imperativo que, más allá de la Ley Orgánica de Contraloría Social, se promulgue de una vez por todas su Reglamento, para que los contralores y contraloras sociales puedan registrarse legalmente y comenzar a ejercer sus funciones. Existe un vacío jurídico y una moratoria institucional para que la contraloría social pueda ejercerse. En el marco de la Ley Habilitante de la cual goza nuestro camarada Presidente Nicolás Maduro, y su ofensiva demoledora contra la corrupción, sería muy oportuno y coherente que se promulgue el Reglamento de la Ley Orgánica de Contraloría Social. Esta propuesta la estamos impulsando desde el Movimiento de Batalla Social Punta de Lanza, del cual me honro en ser su coordinadora general.

Otra propuesta que deseamos presentar ante la opinión pública, es la publicidad de la información pública; es decir, que toda la información de los organismos y empresas del Estado, particularmente los movimientos de cuentas bancarias, la contabilidad completa y detallada, así como todos los contratos y contratistas, día a día, minuto a minuto, y también el listado completo y exhaustivo de la nómina fija y a destajo, sea publicada en Internet donde cualquier ciudadano pueda acceder libremente a dicha información. Esto sí sería transparencia absoluta de la gestión pública.

De esta manera se podrá combatir y desmontar los vicios que llevan a la corrupción, que tanto daño hace al país y a la imagen del gobierno.

No olvidemos que un revolucionario es el escalón más alto de la especie humana. ¡Qué Viva Chávez! ¡Qué viva el camarada Maduro! ¡Qué viva nuestra Revolución Bolivariana! ¡Qué viva nuestro pueblo!

Zulika King.

Coordinadora del Movimiento de Batalla Social Punta de Lanza.

En Guatire, la Villa Heroica, a los 3 días del mes de julio de 2014.