¡Carajo! camarada presidente ahora resulta que nuestro Henri Falcón Fuentes, el mismo que lo acompañó a usted en sus estudios del postgrado en ciencias políticas. El único que como reafirmación de su liderazgo en las elecciones regionales del 2004 salió reelecto con un aplastante 84,33% de los votos y el que por no dejar en las últimas elecciones de gobernadores sacó la bicoca del 73,15% de los sufragios, logrando ser el gobernador que obtuvo el mayor porcentaje de apoyo en Venezuela. Ahora resulta que usted nos viene como el personaje del sombrero loco, con el increíble cuento de que nuestro prototipo de gerente gubernamental a exhibir; es salta talanquera, desertor y casi traidor, de su “exitoso” modelo de gestión Central.
Este cambio repentino acerca de la imagen y visión del futuro “pulverizado” guaro y camarada, al más lerdo de los siete millones de inscritos en el Psuv, de seguro que algo del polvo cósmico que quedará esparcido por los cielos venezolanos, les caerá en la cabeza como un meteorito y se preguntaran rascándose en el chichote producido: ¿ Y porque nuestro comandante no amenaza con desaparecer del mapa político continental a Santos y a su presidente Uribe, quienes lo han jodido tanto y en cambio por una simple contradicción con uno de sus mejores gobernadores le declara la guerra a muerte, incluso a quienes se les ocurra tan sólo pronunciar su nombre.
Tenga cuidado camarada Chávez, porque septiembre nunca será igual al noviembre que hizo gobernador a su “archienemigo” de ahora; ni ya el rio Caroní amenaza a nadie con sus procelosas aguas; de manera que vaya pensando como hacer con esta batalla que por ahora libra, precisamente no con su enemigo principal y recuerde que la historia cuando se repite, unas veces lo hace como tragedia y otras como comedia; por esto es menester recordarle que ya en una oportunidad por las tierras de Lara, allá en el año 1857 fue nombrado por el Congreso de la República, general de división y jefe de armas de la provincia de Barquisimeto el cuñado de Ezequiel Zamora: Juan Crisóstomo Falcón, quien asediado por los paecista y el gobierno centralista de Julián Castro, tuvo que salir de Lara para regresar seis años después de nuevo victorioso; no sólo a su Barquisimeto querido, sino a la mismísima presidencia de la república de Venezuela.
Tenga cuidado comandante, que con este otro Falcón hemos topado y ni a mi ni a los millones de venezolanos que hemos sido chavistas de uña en el rabo, nos está gustando mucho ese dilema tragicómico de que si “estoy con Chávez es con Chávez”, aunque no haya patria para todos.
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