Gente de Clase Media: Abran sus ojos

Middle-Class People: Open your eyes

Me gusta referir una anécdota que me contara una amiga que decora casas, apartamentos, oficinas y tiendas. Hace dos años, finalizando el 2004, me decía que le había ido muy bien ese año, puesto que había decorado 42 espacios entre casas y apartamentos, lo que la llevó -entre otros sitios- a viajar hasta Madrid y a Miami también. Como podrán imaginar, a ella la contratan venezolanos con buenos ingresos, clases media y alta-acomodada. Pues bien, me decía esta amiga que de todos esos proyectos de vivienda en los que trabajó, en sólo tres (3), tenían Biblioteca (!). Y hasta ahí...

¿Hasta ahí? En aquel momento pensé lo que siempre he estimado de nuestro país: Que somos una manga de ignorantes, que creemos saber mucho porque nos dejamos cuentear por las televisoras, pero no leemos nada... o casi nada. A estas alturas del juego, podemos percibir que con las misiones (que ojalá funcionaran como muchos queremos), pero sobre todo con la “Misión Róbinson”, hoy en día -en nuestro país- leen más los pobres que los ricos. De ahí, este llamado para que esa gente de la clase-media, abra los ojos ante lo que está aconteciendo y frente a lo que le están diciendo. Que abra los ojos y oídos ante las bondades que precisamente y concretamente para ellos (para esa Clase Media y media-alta), ha creado y facilitado este gobierno. Como no leen ni los periódicos, pues no se han enterado de las nuevas leyes, de las restricciones que le han impuesto a los bancos, y de las “metidas en cintura” que han hecho con otras “alcabalas” y trampas-montadas, que tradicionalmente han esquilmado principalmente a los componentes de esa clase social.

Algunos “botones”

Para ilustrarlos con algunos ejemplos, vamos a tratar de enumerar bondades que justamente benefician a sectores de altos ingresos, antes que a los pobres. Y vayan anotándolos para que consulten qué es lo que ha pasado y cómo funcionan las cosas ahora. Por ejemplo, el gobierno prohibió los alquileres tasados en dólares. Y está prohibido colocar precios en dólares a lo que se negocia en el país. Por tanto, algunos personajes de esta clase privilegiada, que habían asumido compromisos que los tenían contra la pared, porque los habían tasado en dólares americanos, deben saber que eso ahora está prohibido. Las deudas en dólares a deudores hipotecarios, por ejemplo, se han re-estructurado en bolívares, obligatoriamente. A otros deudores, de casas, apartamentos y automóviles, que no alcanzaron a perder los bienes que negociaron a plazos, a través de créditos indexados, llamados mexicanos, con cuotas “balón” y demás bribonerías y pagos interminables que triplicaban y cuadruplicaban el precio de esos bienes, los llamaron desde los bancos (porque el gobierno así lo dispuso) para anunciarles que sus deudas serían re-estructuradas, e incluso en muchos casos, iban a devolverles dinero de lo que habían pagado de más, a través de la obscena praxis y aplicación del anatocismo bancario.

Interesados en intereses bajos

El gobierno también ha venido fuertemente presionando los intereses a la baja, y ha fijado -por los momentos- un tope máximo de 28 por ciento de interés para los préstamos bancarios, incluyendo los intereses que pesan en los compromisos contraídos a través de compras efectuadas con tarjetas de crédito. Y desde los bancos y entidades financieras del Estado prestan dinero a pequeños y medianos industriales y comerciantes con tasa de interés que van desde el 4 % hasta el 14%. Deberían recordar nuestros inefables miembros de la clase-media lo que antes les llegó a cobrar la banca, cuando hacían compras con ese dinero plástico, que en muchas oportunidades y específicamente en el gobierno de Caldera II (con Petkoff de ministro) llegó hasta el 120 % y a un máximo histórico promedio de 71,84 % en el primer año de ese gobierno. Gobiernito del cual la gente ya no recuerda que sumió al país en la inmovilidad económica más catastrófica de la que se tenga memoria en los últimos 25 años. En esa misma época, con ese mismo gobierno -y con ese mismo ministro que ahora aspira a ser Presidente- fue cuando se le suministraron 8.000 millones de dólares a una banca ladrona que ya había provocado el famoso crack bancario un mes antes, durante el gobierno del muy “respetado” alcahuete político mayor de toda la Cuarta República, Ramón Velásquez, quien jamás criticó o se quejara de alguno de los desmanes que se produjeron durante ese negro y mendaz período puntofijista.

La baja de los intereses, propiciada por el gobierno actual, nos ha traído nuevamente la oportunidad de comprar a plazos (y sin las trampas que hacían impagables los préstamos anteriores), automóviles, casas, apartamentos, viajes al exterior, y bienes diversos, cosa que desde hacía bastantes años no se observaba con las ganas que se está produciendo en estos tiempos. Y esto, por supuesto, también le sirve a venezolanos de menores ingresos.
Según “Datanálisis” (empresa demostradamente anti-chavista), las compras con tarjetas de crédito en apenas dos años, se duplicaron y más. Pasaron de 1,3 millardos finalizando el 2003, a 3,4 millardos finalizando el 2005. En ese mismo lapso, las compras a crédito para comprar vehículos pasaron de 324 millones a 2,3 millardos. El año pasado cerró con un nuevo récord en cuanto a venta de automóviles (238.000 vehículos vendidos), y este año, en apenas cuatro meses, va por el mismo camino. En el cuarto mes del año, con respecto al tercero, las ventas aumentaron en más de 34 %. Pero cuando se comparan los meses de abril, de los años 2005 y 2006, el aumento es de más del 70 % !!! Eso, por supuesto, le da más trabajo e ingresos a los que venden combustibles y lubricantes, cauchos, baterías, periquitos, accesorios diversos, repuestos y a los talleres mecánicos. Igualmente se venden muchos más seguros de responsabilidad civil, de protección total (casco), y de accidentes. En la Gran Caracas existe un promedio de un automóvil por cada cinco personas. Pero cuando usted va a los estratos de altos ingresos (ABC) el promedio es de 2,6 personas por carro.

Centros Comerciales, Banca y Dólares

Otros medidores nos dicen que el número de visitantes a centros comerciales en los tres primeros meses de este año 2006, ha aumentado en 20 %. Esto ha traído un crecimiento de las ventas en estos grandes centros de compra-venta, del 25 %, comparado con el año pasado. Los restaurantes en estos centros (los que no están en las Ferias de comida rápida) han aumentado sus ventas en 40 %, y los de las Ferias las han aumentado en 39 % entre 2005 y 2006. Las farmacias, que ahora son minicentros comerciales por departamentos, aumentaron sus ventas en 70 %. Y los cines registran un crecimiento de la asistencia de un 20 %, a pesar de la remontada de los precios.
La asignación de dólares para comprar en el exterior, bien sea cuando se viaja, como cuando se efectúan compras a través de la red Internet, se democratizó y cuando se sistematizó el mecanismo, los viajeros y los compradores a distancia, pudieron contar con las divisas necesarias para ello.
El gobierno también le ha metido la mano a los bancos, obligándolos a cumplir con carteras de préstamos, dirigidos a proyectos agrícolas, agro-industriales, industriales, turísticos, etc. lo que ha desarrollado la pequeña y mediana industria organizadas, a las que además se invitan a ruedas de negocios, en las cuales está presente la filosofía de comprar primero lo que se hace en el país. Y no como antes, que todo o casi todo se importaba, sin tomar en cuenta lo que el país era capaz de producir.

Sorprendidos por tantas y tan pocas viviendas

El gobierno creó un plan de subsidios dirigidos a fomentar la adquisición de viviendas. Eso disparó -por fin- la llamada “industria de la construcción” que tanto dinamiza las economías de los países, lo que provocó que se construyeran las pocas viviendas que pudieron hacerse, antes de que desaparecieran los insumos para la construcción de viviendas. Como esa industria tan importante estuvo virtualmente paralizada durante tantos años, y en el quinquenio anterior a la administración Chávez, el país fue sumido en un letargo económico, en una especie de estado cataléptico (del cual -por cierto- el candidato Petkoff fue uno de los principales responsables), pues aquellos que producían o importaban insumos para la construcción dejaron de hacerlo, y cuando de nuevo se impulsaron los planes de construcción de viviendas, pues no se anduvo mucho trecho, porque todo fue utilizado en miles y miles de viviendas que se han hecho a lo largo y ancho del país. El Presidente y el gobierno en general, se quedaron con las ganas de más, y por ello se están importando insumos que van a comenzar a llegar, para arrancar otra vez con la construcción de casas y edificios, que contribuyan a reducir el inmenso déficit de vivienda que acusa el país. Por su parte, los alquileres se han mantenido congelados, sin aumentos, lo que beneficia a las mayorías, pero sobre todo a la clase-media. Vendrán nuevas medidas que faciliten aún más a los venezolanos, a obtener vivienda. Y, en general, la economía se dirigirá y propenderá a que la riqueza esté basada en el trabajo y no en la renta.

IDB, IVA, Becas, Celulares y Volar

También, por el lado económico bancario, el gobierno eliminó el Impuesto al Débito Bancario (IDB) y está pensando seriamente en otra reducción del Impuesto al valor Agregado (IVA), luego de la que se hizo, de un punto porcentual. Por otra parte, ni se ha aumentado el precio de la gasolina, que mueve al inmenso y creciente parque automotor, ni las tarifas de electricidad, que no sólo ilumina nuestros hogares, sino que además mueve el parque industrial. Y, aparte, el gobierno también ha creado becas para estudios de postgrado a través de la Misión Ciencia.

El gobierno no sólo creó a Conviasa, que es la línea aérea bandera del país, con precios más que solidarios y creciendo en servicios y en rutas nacionales e internacionales, sino que también obligó a la FAA, autoridad aeronáutica de los EEUU a ubicar a Venezuela de nuevo en la Categoría 1. Esto traerá como consecuencia que desde nuestro país, y con aviones y tripulaciones venezolanas, se movilice al menos la mitad del mercado de pasajeros hacia y desde los Estados Unidos. Esto llevará a invertir nuevamente y fuertemente en este sector, que mueve anualmente alrededor de un millón cuatrocientos mil pasajeros. Y se reducirá el desempleo en este rubro ya que se ha establecido que por cada empleo directo que se crea para atender el transporte aéreo, se generan seis empleos indirectos en actividades afines y conexas. El 80 % de los que vuelan a los EEUU son venezolanos y no precisamente pobres. Ahora tendrán mejores y más variadas opciones para hacerlo, con mayor competitividad en las ofertas que presentarán las líneas aéreas. Además, desde el gobierno, desde el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC) se hacen estudios para reducir notoriamente los costos de los boletos, dentro de un proyecto de socialización del transporte aéreo. Por ejemplo ya han adelantado estudios para homologar y rebajar los costos de utilización de los aeropuertos y del mismo combustible que utilizan los aviones. Ahí está eso, también.

Y si hablamos de telefonía móvil o celular, en nuestro país, 47 de cada 100 venezolanos tiene teléfono celular y línea. Se ha registrado una cifra de nuevos clientes incorporados igual a 4 millones de usuarios a finales del 2005. Lo que nos lleva a una cantidad cercana a los 13 millones de personas con servicio de telefonía móvil, actualmente. La proyección indica que para finales del 2006 este sector contará con alrededor de 13 millones 400 mil suscriptores. Entre Movilnet y Movistar se reparten el 85% de estos usuarios, casi por mitad, y la nueva fusión de Digitel, Infonet, Digicel, el restante 15%.

Igualmente se han adelantado bacheos y repavimentaciones en autopistas, sobre todo en Caracas y Miranda, donde éstas tienen más kilómetros hacia el este que hacia el oeste de la capital. Y se continúa pavimentando.

Apretando más el cinturón a la banca

Se están estudiando y analizando nuevas restricciones a la banca en los cobros por servicios, ya que estos muestran precios un tanto exagerados, al igual que por el uso del llamado dinero plástico (tarjetas de débito y crédito). Con decirles que en los primeros cuatro meses del 2006, la banca venezolana se ganó, libres de pelo y paja, más de 900 millardos de bolívares, de los cuales sólo por concepto de comisiones se ganaron 708 millardos ! Ah!, pero ¿ Saben cuanto pagaron al fisco por concepto de Impuesto sobre la renta ?: ¡Apenas 45 millardos! Este “comunismo” los va a matar... pero será de la risa...

Y para no alargar más el asunto, con la llegada de las nuevas fechas-tope para la aplicación de la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión, deben comenzar a cumplirse los artículos que obligan a darle paso a la producción independiente, lo que democratizará y mejorará sustancialmente la oferta programática tanto de la Radio como de la Televisión.
Hasta las tarifas de los estacionamientos, que aumentaban en un “crescendo” permanente y que ya rayaban en el abuso, fueron ajustadas por decreto. Ahora se perciben como “razonables”.

¿Para quiénes, tantos beneficios?

Y todo esto que venimos enumerando y comentando, preguntamos: ¿A quien beneficia directamente? ¿A los pobres? ¿O a personas de mayores ingresos y mejor posición socio-económica? ¿Quiénes, tradicionalmente y mayoritariamente, manejan cuentas bancarias más menos importantes, dinero plástico, deudas a plazos en compras de autos, casas, apartamentos, viajes al exterior, etc? ¿Quiénes cuentan con tarjetas de crédito y por tanto con acceso a la “administración de divisas”? (Léase CADIVI y léase dólares y euros). ¿Quiénes pueden mayoritariamente y con mayor rapidez, asumir la realización y divulgación de programas de radio y televisión, independientemente? ¿Los pobres? ¿O los que tuvieron mayores oportunidades, estudiaron o aprendieron a trabajar en estas especialidades comunicacionales, para las que hay que contar con recursos económicos y equipos de mayor o menor grado, sofisticados? ¿Y quiénes pueden aprovechar las becas de los postgrados, mayoritariamente? Y, por último, ¿quienes fueron robados, asaltados en su buena fe, esquilmados, atropellados, quebrados por las importaciones, y hasta estafados por bancos y empresas de seguros? ¿Los pobres acaso? ¿O aquellos que pudieron reunir ahorros, derivados de ingresos mayores que los que recibe la mayoría de la población y los destinaron a adquirir autos, apartamentos y casas? Ustedes: señoras, señores, señoritas y señoritos de la clase-media. Los pobres no. Los pobres fueron excluidos y marginados de todo beneficio social y ahora también están recibiendo beneficios, sobre todo intangibles, culturales y educativos, frente a ustedes, que están recibiendo beneficios concretos, palpables, contabilizables...

Por eso les digo: ¡ Abran los ojos !... y dejen de oir cantos de sirenas. Porque hasta las inversiones y donaciones internacionales tienen su función económica, de lo cual saben los “expertos” de la oposición, pero no lo dicen. Les basta con vender la idea barata y falsa “del colmo del gobierno y de Chávez, de regalar dinero a otros países mientras el nuestro se está cayendo”. Pues si se está cayendo, lo disimula muy bien. Las colas que ahora tenemos que hacer, no solamente en calles y autopistas, sino también en los bancos y para entrar a los estacionamientos de centros comerciales, para comprar entradas al cine y hasta para adquirir las infaltables cotufas, así lo indican.

Lo que está a la vista


La inflación es muy posible que cierre a menos de 10 en el 2006, lo que se traduce, día a día, en mayor poder adquisitivo para todos. El precio del petróleo continúa en aumento y no se vislumbra que baje en el corto ni mediano plazos. Y el promedio de nuestras reservas internacionales, a pesar de no estar -por razones de seguridad- sólo en dólares, no bajan del equivalente a los 29 mil millones de dólares.

Dejen de mirar al país a través de la óptica mediática de Goebbels-Visión y del reduccionismo ideológico del “Chávez, vete ya”. Recuerden como funcionan algunos de los países que han conocido en otras latitudes, o pregunten, simplemente. Y no olviden cómo los trataba el capitalismo salvaje en el nuestro. Que explotaba a los trabajadores pobres, pero a ustedes, principales emprendedores, receptores intermedios de plusvalía, herederos de capitales, profesionales y técnicos de mayores ingresos, a USTEDES los robaba inmisericordemente. Recuérdenlo. Y ojalá se cumpla aquello de que NO VOLVERÁN. Que no vuelvan ni los que se acostumbraron a robarnos, ni tales prácticas. Amen.

Manuel Rugeles es periodista



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Manuel Rugeles A.


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