Estimados camaradas socialistas, con motivo a los recientes hallazgos de contenedores con comida en estado de descomposición y que han sido importados por PDVAL, hemos visto y entre ellos me incluyo, una gran cantidad de artículos llamando la atención a nuestro querido gobierno, para que se tomasen cartas en este nefasto asunto y se castigase, no solo a los culpables, sino también a los responsables, llevando este asunto hasta sus últimas consecuencias.
Hay que reconocer que el número de artículos criticando, en muchos casos muy fuertemente a nuestro gobierno, de que este tipo de incapacidad gerencial, este tipo de ineptitud gubernamental, no pude ser permitida y debe ser claramente castigada y es más, la ineptitud debe ser execrada de raíz de nuestro gobierno, han sido poco menos que una avalancha, pero no es menos cierto que la gravedad del caso llama a la toma de conciencia y al llamado de advertencia, muy necesario en estos tiempos, en los que debemos reforzar y proteger a nuestra sociedad.
Ahora bien, lo que me importa tocar en este artículo es el gravísimo asunto que ha comenzado a tomar cuerpo y lo que es peor, auspiciado por grandes personeros ideológicos que apoyan claramente a esta revolución, y es que les ha dado por decir que la crítica al gobierno, por lo menos en el caso de los contenedores de comida, es un grave error y que en muchos casos lo que se logra con esta crítica, es dañar seriamente a la revolución y a nuestro proceso de cambio y transformación de la sociedad venezolana, cuando estemos claros, es todo lo contrario, es el silencio, la falta de crítica, la inacción en la búsqueda de responsabilidades, las que realmente deterioran y muy fuertemente, las bases más fundamentales de cualquier proceso revolucionario.
Realmente me causa estupor cuando leo artículos, de grandes revolucionarios, a los que no se les puede poner en duda ni un pelo de que no son revolucionarios de verdad y claramente identificados con nuestro gobierno, amen de tener una claridad ideológica poco menos que envidiable y entonces vemos que estos señores toman la cruzada de criticar a todos aquellos que critican al gobierno, en el asunto de los contenedores de comida dañada, y aun peor, usan como justificativo para esta posición, que si se critica y se inicia una investigación, la gran mayoría de personeros que trabajan en el gobierno no harán su trabajo y mucho menos tomaran riesgos para mejorar sus puestos de trabajo, ya que esto les podría traer como consecuencia la señalización publica y el castigo punitivo a su labor.
Señores, la ineptitud no solo es cometer errores, sino es el no realizar la labor que se le ha asignado con la premura y la intensidad del caso, de ahí, que el castigo a la ineptitud no solo abarca al que comete el error, sino a aquel, bien por miedo a perder el puesto, bien por falta de valor, bien por falta de conocimiento, no realiza a plenitud su trabajo dejando lagunas y muchas cosas sin hacer.
Camaradas, lo peor que le podemos hacer, no solo a la revolución, sino a Venezuela, es convalidar, proteger, aupar a la ineptitud, ese es el peor error que pueda cometer cualquier proceso revolucionario y podría estarme todo el día dando miles y miles de ejemplos en nuestro pasado cercano, en donde los caso de ineptitud que no fueron eliminados, en muchos casos por falta de crítica, se fueron enquistando en el gobierno, llevando a la caída de los procesos revolucionarios o la mala transformación de estos procesos, en procesos totalitarios o autocráticos, en fin, la historia está llena de ejemplos.
Es grave que iniciemos una campaña con el slogan de proteger a nuestra revolución y ataquemos a todos aquellos que critican los desaguisados del gobierno y lo que es peor aún, que se proteja la ineptitud y la ineficacia y se permita que estos pululen, sin castigo ni control, dentro de nuestro gobierno, es triste, que los grandes pensadores de la revolución se presten para esto, es muy cierto, que mucha critica es mal intencionada y que a la hora de criticar un suceso, este debe ser puesto en el contexto que corresponde, para realmente, analizarlo en toda su extensión y en su más clara versión, pero de ahí, a pasar a la defensa intrínseca de estos ineptos, con el justificativo de proteger a la revolución, es el colmo y lo que es peor muy peligroso.
Señores, estemos claros, si algo permite que un proceso revolucionario se desmorone y desaparezca, es que se permita que la ineptitud pulule y que aquellos llamados a atacar a estos ineptos y dar las pautas necesarias para que estos señores sean eliminados de la revolución y que a la vez, sean estos mismos señores los garantes de la calidad, de la eficacia, del buen andar del gobierno, entonces, entenderán mi gran preocupación cuando estos señores se dedican, justamente a todo lo contrario, no atacan, no buscan, no denuncian, sino que callan y por ende protegen y peor aún, critican a la crítica justa.
Camaradas socialistas, la única manera de que la revolución avance y llega a buen puerto es con la autocrítica, seria, clara, concisa, leal, pero critica al fin y como buena crítica, esta debe causar escozor, causar ponzoña, sobre todo en aquellos que son los claros responsables de la crítica y es aquí donde los grandes personeros deben ser los paladines de la lucha por la excelencia dentro de la revolución, pero ojo, no una excelencia tecnócrata, meritócrata, cuarto republicano, no, sino que por el contrario, deben buscar y aupar una excelencia socialista y revolucionaria, así que camaradas no desviemos el norte y manos a la obra.
pito0726@hotmail.com.
