Olof Palme y Hugo Chávez: dos asesinatos indescifrados

Olof Palme, Primer ministro Socialista de Suecia fue acribillado a balazos por la espalda cuando caminaba junto a su esposa por una calle de Estocolmo, el 28 de febrero de 1986.

Chávez presidente socialista de Venezuela, murió el 5 de marzo de 2013, después de varias intervenciones quimioterapéuticas por un cáncer inoculado.

Dos crímenes que aún no se han podido esclarecer porque siguen ocultos entre revelaciones parciales, conjeturas conspirativas e investigaciones policiales manipuladas. Todo fue así porque detrás de los crímenes siempre hubo fuerzas oscuras; unas aspiraban al poder, otras, habían decidido ya, su eliminación y las fuerzas indiferentes.

Estas últimas fuerzas son las más profundas, las que más daño hacen porque, con las cuales los hombres buenos, no pueden contar. Y son la mayoría.

Ahora quien, prácticamente ha considerado continuar la lucha por el socialismo; la reconstrucción de las misiones, la reforma agraria, la reorganización obrera de Pdvsa y la conciencia y práctica revolucionaria.

Chávez jamás habría encarcelado a Aryenis Torrealba y Alfredo Chirinos, exiliado a Rafael Ramírez. Chávez jamás habría permitido la tragedia del General Baduel y de muchos sindicalistas y campesinos.

Con su eterna sonrisa no pensaría dos veces en apoyar a Putin. "Chavez era un extraordinario líder y un gran amigo de Rusia" escribió Putin en su carta de condolencia.

Abnegado loor a Chávez.



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Memo Fernández


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