El acuerdo de alto al fuego entre Hamás con Esrados Unidos e Israel marca el resultado del alto nivel de subversión que provoca en los gobiernos, no solo occidentales, el tema y los actos de apoyo de los ciudadanos conscientes de todo el planeta, que han exigido a sus gobiernos una posición firme y activa para detener el genocidio y enjuiciamiento de Trump y Netanyahu como principales criminales mantenedores de la matanza.
Petro, rompió el temor y la hipocresía diplomática en el seno de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Llamó a los criminales por su nombre y convocó a la conformación de un ejército mundial para detener y derrotar a los genocidas.Pedro Sánchez y el rey de España expresaron su denuncia del genocidio y exterminio palestino provocado por Israel.
Como parte de este momento, vinieron las flotillas de ayuda humanitaria y las manifestaciones mundiales de apoyo a Gaza y en solidaridad con los ciudadanos de las flotillas retenidos y vejados en Israel. El planeta todo, había empezado a superar el miedo y las represiones gubernamental por apoyar a Palestina. Palestina conmocionaba al mundo y el mundo respondía.
A los criminales no les quedaban alternativas ni mentiras para encubrir los asesinatos. El mundo estaba entrando en insurrección y tembló el imperialismo.
Trump y Tony Blair presentaron planes de pacificación y protectorado colonialista sin participación de Palestina, como mecanismos de emergencia para detener la insurrección mundial. Los logros podrían ser detener el bombardeo, dar apertura al ingreso de la ayuda humanitaria e iniciar la retirada del ejército israelí, en la primera fase.
Lo demás está por verse y depende grandemente, del apoyo mundial de los ciudadanos conscientes. Venezuela tiene un largo y dificultoso camino en este enfrentamiento contra Estados Unidos..
