Chávez, el desodorante Mum bolita

En Venezuela, como seguramente en otros países de "la bolita del mundo", como suelen llamar los marabinos a nuestro planeta tierra, existen cosas que son por todos conocidas.

Desde "va a verme limpiecita como un sol", pasando "por el aroma yo lo sé", bien si dice "frescolízate papá" o si se habla del MUM bolita, ya sabemos a qué nos referimos, igual si su limpiador de pocetas es tapa amarilla, igual o si usa o no desodorante o bicarbonato con limón.

Pero sucede que ahora, en Venezuela, hablar de Chávez, o como Chávez, es hablar del desodorante MUM bolita.

Chávez se ha convertido en el desodorante que usan todos, "chavistas" y opositores: los primeros, para con su aroma oler a revolucionarios, y los segundos, pretendiendo deslindarse del tufo que a ratos emana una oposición que tampoco huele bien, para entonces no querer ni oler a oposición pero tampoco ser esa emanación volátil que los pueda identificar con Maduro.

Y es así como opositores comparan la gestión de Maduro con la de Chávez, y olorosos a MUM bolita, llegan a decirnos que si Chávez estuviera vivo otra cosa sería, queriendo ganarse alguna consideración de "opositor consciente" como que si no supiéramos que en sus sobacos siempre usaron desodorantes comprados en romerías blancas o verdes y más recientemente, en guarimbas amarillas o azules.

Por otro lado, están los que se dicen revolucionarios, chavistas de arrabal y abolengo, quienes rociados de MUM bolita en sus axilas, nos restriegan en la cara su pedigrí de ñángaras come candelas, guerreros de mil batallas en los baños públicos que son los portales de Facebook, "tuírer" e Instagram y quienes tienen miles de seguidores pero que solo dan "retuit" a sus compañeros de linaje, hermanos de su raza intelectual de la que se ufanan unos, de venir o fundar el MVR-500, antes cuando Chávez, y de la Liga Socialista, ahora con Nicolás; y otros, aquellos quienes desde sus cargos públicos se les ve entrar a sus oficinas (teléfono en mano, hecho que da caché) con sus bien planchadas camisas rojas las cuales le permiten mimetizarse de preclaros izquierdistas, pero que durarían años en encontrar diferencias entre Lenin y Gorbachov, o entre Maneiro y Petkoff.

Clase aparte estamos los que no usamos desodorantes (no por ser europeos, como dijera otro preclaro pero del sector opositor), sino porque creímos en Chávez por su nacionalismo y en el transcurrir del tiempo por su dignidad en pararse frente al rey de los patoteros y decirle "yanqui de mierda", hecho este del que dio muestras no de tener redondas las que te conté, sino cuadradas y rayadas lo que pudo haberle valido el envío de una carga explosiva a su cabeza para eliminarlo "humanitariamente".

Ahora, ya fallecido, Chávez es el MUM bolita que permite disipar cualquier vaho, pestilencia, fetidez, hediondez o hedor que pueda confundirte con algún opositor, solo basta levantar el brazo e impregnar sobre tu rasurada o velluda axila o sobaco, según corresponda, cualquiera de sus versiones aromáticas de lavanda, colonia o floral.

Claro que, hay quienes primero se airean con desodorante Boss en spray antes de colocar su capa de MUM bolita, no sea que el MUM termine convirtiéndose en un permanente olor del cual no puedan desprenderse cuando decidan, como han hecho tantos y tantos, usar perfume y no desodorante.

Dentro de todo, el MUM bolita ha servido para ocultar hedores y emerger aromas.

Lo malo será que cuando se acabe el MUM, muchos usarán bicarbonato con limón y no se podrá ocultar el pachulí natural que todos tenemos.

@OrlandoLezama

Olezmar@gmail.com



 



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Orlando Lezama

Ex miembro del Cabildo Metropolitano de Caracas

 olezmar@gmail.com      @OrlandoLezama

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