Opinión, Política e Historia

Otras consideraciones en torno al escrito de Milagros Socorro

“Bástete (*) con saber que todo es un misterio

  la creación y el destino del Universo y tuyos.

  Sonríe, pues, ante ellos. No sabrás  nada más

  cuando hayas franqueado las puertas de la Nada.

 Omar Kheyyam

                                Rubaiyat

      Las estrofas del cuarteto 141, del poeta del siglo XI Omar Kheyyant, me han parecido buenas para el inicio de estas otras consideraciones, sumada a las expuestas en anterior artículo, puesto que la periodista que no conozco, me dicen no sé si es nacida en Machiques o vive allá i publica en El Nazional; pero que sí fue graduada en la profesión de comunicación social, i alumna de Sergio Antillano, pues como buena cristiana, termina su escrito con estas frases: “no se puede fomentar la vida y la paz, cuando se elogia la muerte, la guerra y a los violentos”, todos pecados capitales o mortales, según el cristianismo inspirado en las tablas de Moisés con los Mandamientos de la Ley de Dios; pero  parece que bajando la pedregosa montaña mui árida i empinada (cerquita del cielo), tuvo el santo varón un pequeño resbalón, se le cayó i rompió una de las tablas, i esos mandamientos que parece eran quince, quedaron reducidos a diez. Quizá allí se condenaba el socialismo, el comunismo i la guerra, sin saber que esta última iba constituirse en el gran negocio del capitalismo que, posiblemente en esos 15 mandamientos destruidos, era alabado por el  Señor.

    I al lado de este humor sagrado, quiero excusarme ante el Dr. Puche, por haberme confundido i hacer una cita que corresponde a Felipe Mujica, en tiempos cuando era presidente del MAS. A veces la memoria parece darnos una mala jugada, porque somos humanos i humano es errar.

     El problema que vengo tratando, radica en saber quiénes elogian la muerte, la guerra i la violencia, aclarando que la violencia como rebeldía justa, es admisible, i uno de los pocos ensayos filosóficos que me publicó la Universidad del Zulia (LUZ)  en su Revista de Filosofía de la Facultad de Humanidades, fue uno titulado Filosofía de la Violencia. Por lo pronto, todas las historias del mundo (cito las que poseo), desde la de Jacques Pirenne  (12 tomos) Jacques Bergeron (11 tomos), José Pijoan (11 tomos) Carl Grimberg  (12 tomos) obra mui popular de Daimon Edit., i una estupenda colección de 100 tomos del formato mediano, que tiene de historia antigua hasta nuestros días, que no puedo decir que los he leído todos, porque eso es imposible, pero si consultado o estudiado lo que me interesa (en la colección leí 12 tomos de la Historia de la Guerra II Mundial por Wiston Churchill, la Historia de la Guerra Civil Española (1 tomo grueso), i muchas cosas más, hasta de Suetonio o Plutarco i Claudio Josefo; i siempre he visto que las guerras, la violencia i el aplastamiento de la paz, lo hacen los países poderosos, especialmente Inglaterra i los Estados Unidos, i todos los que hicieron colonias.  Además irrespetan todos los tratados i se burlan de las instituciones como la ONU.

      Sería largo extenderme en eso, por lo que, concretémonos solamente a la historia patria, que si se debe leer i estudiar; en el bachillerato que hice en la décadas de los 40 más o menos, en primer años estudiamos La Colonia, en segundo año, la Independencia i, en tercer año la República. Si esta periodista que debe ser joven, se hubiese leído siquiera un libro de historia de Venezuela, por ejemplo la de Salcedo Bastardo que ponen en las escuelas i liceos, no podría a Venezuela en números de homicidios, de barbaries de inseguridad,  i horrores, dejan como otro paraíso terrenal el Imperio Mongol de los tiempos de Gengis Kan. Agregando que la mayoría de nuestros historiadores, son de la burguesía dominante i conservadora.  Por eso no analizaré sus números, sus espantosas cifras, sin saber la fuente i que corroboración tienen, a pesar de decir que los cálculos del OVV, son de manera conservadora. No tengo estadísticas a la mano, ni las creo aceptables cuando provienen de organizaciones como las que señala, donde Colombia con una guerra de medio siglo, i México, donde los asesinatos en masa del narcotráfico se suceden casi todos los días –para citar solamente dos ejemplos− comparados con su patria, señora o señorita Socorro, son de lo más pacífico países, al lado de Venezuela. Lo que sí puedo hacer es un análisis lógico i matemáticos de sus estadísticas que dice son oficiales, cosa que dudo. I vea lo que ha escrito: usted se suma sin percatarse de ello, a los que en la oposición venezolana no fomentan la vida i la paz, sino que elogian la muerte, la guerra i la violencia. ¿Le parece lógico que, un gobierno que le ha otorgado poder al pueblo, ha reivindicado a la clase trabajadora,  a las etnias, a las mujeres a los niños i a los ancianos, i quiera seguir en el poder para continuar haciendo el bien, va a desear la violencia, la muerte e impedir la paz i el cambio (no digo el progreso porque el candidato que tiene la oposición fascista, la hizo una mala palabra trivial i vacía) social positivo? ¿Querría el capitán del Titanic chocar con iceberg para hundir el barco? ¿Querría el Libertador que lo derrotaran en Carabobo para irse al exilio? ¿Quiénes están deseando que ese imperio asesino del norte, invada a Venezuela i haga la masacre de Irak i Libia? ¿Quiénes quieren entregar la riqueza patria a las trasnacionales, a costa de que los devuelvan al poder, olvidarse del pueblo i hacerse ricos? Sencillamente ustedes, triste i violenta  oposición. Le aconsejo que no lea mucho: simplemente estudie cómo fue la vida de su país en la IV república, i si tiene conciencia i principios éticos, deme su veredicto. Fue terrible, todo lo contrario de ahora, que hemos empezado a figurar entre los países más felices del mundo.

(*) Así en la traducción original.

robertojjm@hotmail.com



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Roberto Jiménez Maggiolo


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