Este año 2023 el gremio de los educadores de educación primaria y media inicio su jornada laboral el 9 de enero convocando a un "paro" en demanda de incremento de sueldos y salarios así como exigiendo la firma del Contrato Colectivo.

Aunque fue una convocatoria promovida a través de las redes sociales, sin apoyo y anuencia de las organizaciones sindicales, el llamado fue atendido masivamente a nivel nacional y estuvo acompañado de la movilización de estos trabajadores en distintas ciudades y regiones del país, en demanda de sus derechos laborales.

A pesar del esfuerzo de los medios oficiales y de la burocracia ministerial por mostrar un "normal retorno a las aulas de clases", fue evidente para el país que el gremio de educadores y trabajadores educacionales volvió a demostrar al patrono que se mantiene firme en la defensa de sus derechos. Así como en julio/agosto de 2022 fueron capaces de revertir la decisión del patrono de no cancelar el bono vacacional, según lo previsto en la ley, en esta ocasión demostraron que más allá de las manipulaciones del patrono y de las organizaciones sindicales que los representan están dispuestos a defender sus conquistas laborales.

Hasta ahora apenas se ha pronunciado oficialmente el Gobernador del Táchira, quien siendo miembro de la Dirección Nacional del PSUV, a título personal, expreso en entrevista periodística que confiaba en que pronto el Presidente anunciaría un aumento de salarios que fuera sostenible en el tiempo.

Oficialmente ni el Presidente Maduro, ni el Ministro del Trabajo, ni la Ministra de Educación se manifestaron frente a la acción llevada a cabo por los educadores y ni siquiera los sindicatos del gremio educativo se han manifestado públicamente sobre la acción que la base de los trabajadores educacionales llevo a cabo este 9 de enero y del conflicto que mantiene el gremio con el patrono.

Mientras algunos políticos de la derecha no han desperdiciado ocasión de solidarizarse con la protesta de los docentes y trabajadores educacionales, no han faltado quienes, asumiéndose defensores del gobierno, cuestionan las movilizaciones de docentes y trabajadores. El gobierno ha sido excesivamente cauto en este sentido.

El gremio de los educadores y trabajadores educacionales, tal como el resto de los trabajadores de la administración pública, enfrenta una dura crisis dado que los salarios que reciben no les permite cubrir las necesidades más mínimas y si durante la pandemia por covid-19 fueron capaces de sobrevivir en condiciones más precarias aun, ya retornada la "normalidad" los pagos que reciben se han reducido al punto que en muchos casos ni si quiera llegan a cubrir los costos diarios de los pasajes para ir diariamente a sus centros laborales.

Las masivas manifestaciones que acompañaron las jornadas del gremio docente este 9 de enero han recibido un respaldo mayoritario de la sociedad y especialmente en redes sociales fue notable la solidaridad general hacia la lucha que están llevando a cabo los maestros por la defensa de reivindicaciones laborales.

Aunque no es nada improbable que el anuncio del gobierno de un incremento salarial por parte del Ejecutivo permita apaciguar momentáneamente la movilización de los docentes en defensa de sus derechos, es claro que la demanda principal de los trabajadores está asociada a la firma del Contrato Colectivo entre el patrono (Estado) y este importante sector de los trabajadores del sector público.

El desprestigio de las llamadas organizaciones sindicales que representan al gremio frente al patrono es tal que han sido dejadas de lado y aunque ciertamente serán quienes terminen sentándose a definir los términos de la firma del CC, por ahora han sido rebasados por las bases del magisterio, en las exigencias que se hacen al patrono por el cumplimiento de sus compromisos.

No puede obviarse tampoco, en el contexto de las demandas reivindicativas de los educadores, que también los trabajadores de las Empresas básicas en Guayana iniciaron este año 2023 haciendo demandas similares a las que hoy mantienen los docentes a lo largo y ancho del territorio nacional.

Indudablemente que lo que ocurra con el gremio docente en los próximos días condicionara la respuesta a las demandas laborales que llueven sobre el patrono que comienza a mostrar leves signos de recuperación económica, después de haberse mantenido durante más de 7 años condicionado por sanciones económicas impuesta por los Estados Unidos y países aliados.