Con placer y emocionado he visitado el estado Táchira, pude ver a mi
familia, a mis amigos de la vida, ir a varios lugares cerca de San
Cristóbal, apreciar la situación que se vive en el pueblo y conocer
sobre la realidad que confrontamos.
Con profundo dolor percibí, en varios sitios, el rechazo al presidente
Maduro, lo hacen personas envenenadas por la propaganda imperial, sin
ningún tipo de visión política, gente sin preparación y con odio por
lo que acontece, donde el Inmundo y su par Maricory son sus ídolos, es
lamentable tanta ceguera.
Lo que más me hizo reflexionar es que mucha gente, de la poca que pude
contactar, no conocen la moneda nuestra, es decir no le prestan
atención, ni les interesa el Bolívar Digital. Allí en mi Estado, se
maneja o se labora con pesos colombianos y dólares. Al extremo que las
busetas, con tipos agresivos, exigen pesos por el pago del pasaje.
Claro yo pagué con bolívares y vi su cara de asombro.
Ahora bien, quiero separarme de este caso, para hablar sobre otro
problema que nos aqueja, desde hace años, me refiero al caso Guayana
Esequiba, tema que venimos estudiando en diferentes partes, con
seminarios y conferencias que tocan la situación que confrontamos con
ese país.
Como vemos el este de Venezuela empieza en el Esequibo, es decir que
159.500 Km2, en manos de la República Cooperativa de Guyana, son de
Venezuela. Sin embargo, existe el laudo arbitral de 1899, lo que se
conoce como el Laudo de París, donde Estados Unidos y el Reino Unido,
bajo la directriz de un juez ruso, determinaron los límites, de la
colonia británica y, estafaron a Venezuela. Tal como lo señaló Severo
Mallet Prevost en 1949, en su carta testimonio, el laudo de París es
irrito, nulo de toda nulidad.
Con esta visión pudimos concurrir en 1966 y plantear el Acuerdo de
Ginebra, que implica ley de la República, arma que tenemos a nuestro
favor y nos ha permitido mantener ante instancias internacionales,
nuestra querella y nuestro pedimento para demostrar que el Esequibo,
en el este de Venezuela, tal como lo señalan los mapas, la historia y
el Derecho es parte de Venezuela.
Es evidente demostrar con razón, con la moral, y es especial con el
Derecho que la lucha que viene ejerciendo Venezuela, desde hace años,
sobre el territorio del esequibo es verdadera, es legal ya que ese
territorio es propiedad de Venezuela. Esto no tiene discusión y todos
los habitantes de Venezuela tienen que estar claros en este pedimento.
He estudiado el caso Guyana, ya que mi padre fue Embajador de
Venezuela en ese país, durante los años de 1974 a 1979, también fui
diplomático en Suriname y conocí del problema. Además, estoy claro que
es necesario que mucha gente, en estos años de lucha, conozca de un
caso como este, donde se evidencia la estafa que han cometido contra
nuestro país.
Ahora bien, es vital entender que estamos luchando por un territorio
que tiene más de 126 años en discusión, hay gente preocupada, espero
que la solución sea para favorecer a Guyana y a Venezuela, para
impedir que Estados Unidos e Inglaterra sean los grandes beneficiados.
Si alguien se pregunta que tiene que ver esto con el Táchira, la
respuesta es sencilla, el este nace en el Esequibo y el oeste se
inicia en Táchira, aquí está el problema. Son dos extremos que nos
pertenecen.
Ahora bien, nos preocupamos por un territorio que tiene años en
discusión, pero no hay seminarios, no hay conferencias, sobre la
situación crítica que confronta el estado Táchira. Este estado, al
ritmo que vamos, parece una extensión del poder colombiano.
Si un ministro, o el Consejo de ministros en pleno, vienen a nuestro
Estado, podrían darse cuenta del atropello que viene presentándose en
el Táchira. Por eso es vital que nos hagamos varias preguntas. ¿Cuál
es la razón por la que el gobernador, electo nuevamente, no ha
estudiado lo que acontece con el pueblo? ¿Ha pensado el gobernador
Bernal en abrir casas de cambios para impedir que el peso sea la
moneda oficial en nuestro Estado? ¿Conoce el gobernador Bernal que
nuestro equipo de foot ball es patrocinado por un banco colombiano?
Hay otras preguntas, pero desde Caracas debe salir una línea que
exprese que Venezuela es única e indivisible. El gobernador Bernal
está muy ocupado, solventando el problema de la seguridad, pero este
problema debe tener solución. Es posible un acuerdo entre el Banco
Central de Venezuela, con otros bancos internacionales donde se
determine el valor de nuestra moneda.?
La solución es directa, en el Táchira todos los negocios deben
comercializar con nuestra moneda, el Bolívar Digital, permitiendo el
pago con otras monedas, pero no se puede permitir que sea el peso
colombiano el que imponga el ritmo comercial de la zona.
Destacamos que, si no es posible darle una repuesta adecuada a un
problema como el señalado, no sé qué armas tenemos para construir una
nueva sociedad. El gobierno nacional debe estudiar como prioritario el
desgaste y el daño que se viene ocasionado en este estado fronterizo.
Los gobernadores de todo el país, en unión con el presidente Maduro,
deben estudiar esta realidad, deben analizar la problemática ya, de no
hacerlo podemos señalar con tristeza, es claro que el estado Táchira,
cultural y económicamente se este convirtiendo en parte del territorio
colombiano. Podemos señalar no tenemos solución y dejemos eso así por
un tiempo, mientras solucionamos el problema con Guayana Esequiba.
Es esta nuestra manera de reflexionar, con dolor y aturdido, ante esta
realidad llamamos a mucha gente a estudiar este caso y tratar entre
todos de darle o buscar una solución ya. El pueblo del Táchira, en
unidad nacional así lo clama. Hasta la victoria siempre, debemos
estudiar y reflexionar ya.
El Táchira es parte de nuestro territorio y debemos prestar la mayor
atención ante lo que allí acontece. Si seguimos permitiendo tanto
atropello, si asumimos que en el Táchira, la música, el peso y la
cultura nos invada, mañana será difícil demostrar que ese Estado es
parte del territorio venezolano. La hora de actuar es ya. El gobierno
de Venezuela debe demostrar que esta gobernando, el pueblo así lo
exige, Es urgente declarar que el camino que tenemos es uno solo,
difícil de transitar, pero es el único camino y a el nos debemos. La
patria nos exige compromisos, recordando siempre que el socialismo es
la única vía para salvar la humanidad.