Es de vital importancia para la Revolución Bolivariana la recuperación de la Gobernación del Zulia, no solo por el peso económico y demográfico que nuestro estado tiene para el País, sino por su importancia geopolítica necesaria para blindar la revolución de los planes desestabilizadores que vienen del norte y quieren utilizar al Zulia como cabeza de playa de la contrarrevolución.

La primera tarea que hay que cumplir para lograr que la Revolución entre definitivamente en el Palacio de Los Cóndores, es lograr la unidad en todos los revolucionarios del Zulia y para ello hay que cumplir, a mi juicio, cuatro tareas urgentes e inaplazables: La primera de ellas, fue tomada acertadamente por nuestro Comandante Presidente al colocar al Comandante Francisco Arias Cárdenas al frente de esta titánica tarea, reconozco en el Comandante Arias la capacidad de trabajo, la perseverancia, la inteligencia y el liderazgo suficiente para cumplir con éxito el trabajo encomendado, pero cuidado, no se trata de reagrupar viejas camarillas que puedan asociar su imagen a un pasado ya superado que impida su reencuentro con las nuevas realidades políticas del movimiento revolucionario y del poder popular que se ha venido formando en nuestro estado en los últimos años, ahora la cosa no es como en el 94 este es un pueblo y un partido crítico y diferente en donde el debate y la voluntad de cambio no se puede encerrar en las oficinas.

La segunda tarea tiene que ver con la unidad del gobierno. Por ley y por la praxis que tradicionalmente se venía ejecutando en el Zulia desde el 2.003, a través de CORPOZULIA se hacia la coordinación de todo el sector público descentralizado para actuar con eficiencia y sentido unitario enfrente de los problemas. Fue así, como se lograron notables avances de gestión, como por ejemplo, construir toda la infraestructura de la Misión Barrio Adentro en nuestro estado. Lamentablemente esta eficiente coordinación se perdió con la partida del Gral. Martínez de CORPOZULIA. En todo lo que va del año el Gobierno Bolivariano del Zulia no se reúne, no coordina, no planifica, las grandes misiones han sido secuestradas por cenáculos que se pelean entre si por el poder, no le rinden cuentas al pueblo organizado, no le transfieren al pueblo ningún poder, solo lo usan como asalariados y compran los insumos de construcción sin cumplir los procedimientos legales.

Creo que fue un gran error del gobierno Central poner al frente de CORPOZULIA, considerada como la Gobernación de los Bolivarianos, a un tecnócrata de derecha, sin ningún tipo de liderazgo en la región, que ha estado fuera del país como diplomático por mucho tiempo, que no escucha y no se reúne con el poder popular y con el partido. Por primera vez en su historia, esta corporación no inaugurará ninguna obra este año. El pueblo humilde del Zulia ya no va a CORPOZULIA, su inversión social con recursos propios se redujo a cero.

La tercera tarea es fortalecer y unificar al poder popular. En este sentido hay que mejorar la comunicación y la gestión entre Min. Comunas y el F.C.I., los cuales actúan cada uno por su lado como si se tratara de gobiernos distintos, sin apoyo

mutuo, sin planes conjuntos. Cuando la Ministra Isis visita al Zulia, los voceros del poder popular regionales, municipales y sectoriales del Consejo Federal de Gobierno no se enteran y si van a la reunión no los dejan entrar. Ninguna autoridad del Zulia le pone freno a esta anarquía y por supuesto el Presidente de CORPOZULIA y Coordinador Regional del C.F.G. no se da por aludido y ni siquiera se reúne con sus propios voceros del poder popular y mucho menos apoya a la Oficina Técnica Regional, como es su deber legal, para que cumpla sus funciones.

La cuarta y última tarea es fortalecer al PSUV del Zulia, todavía el sectarismo sigue vivito en sus estructuras, sigue la dedocracia, no se escucha, ni se atiende a la base del partido. Muchos dirigentes importantes del partido se alejaron cuando fueron desplazados autocráticamente por dirigentes profesionales que tienen mas historias que Roñoquero y Mamblea. Hay que rescatar y ejercer la democracia interna, si no tendríamos muy poco que ofrecerle al País, porque socialismo es unidad y democracia. Hoy mas que nunca cobran vigencia las palabras de Alí, cuando era un sencillo cantor que conocí hace 40 años en los palafitos Añú de Nazareth del Municipio Mara, y nos decía cantando: “SI LA LUCHA SE DISPERSA NO HABRA VICTORIA POPULAR EN EL COMBATE”. Hoy por hoy, su legado ideológico inmortal es como el “Padre Nuestro” de todos los pueblos de Venezuela.



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