No hay razón, sin embargo, para no analizar el paralelismo de nuestra revolución, antes bien, la definición de chavismo o socialismo hará bien al pueblo para enfrentarse a la crisis, puntualizar: o líder o presidente, PSUV así como está o un nuevo partido socialista que ayude al crecimiento revolucionario para el desarrollo científico del socialismo y de Venezuela.
El chavismo o socialismo en un crecimiento porcentual, en el sentido numérico y de tamaño sencillamente no puede continuar por tiempo indefinido porque no es una realidad. Si Venezuela no evoluciona hacia una identidad uniforme lo cual no debe ni puede suceder ya que el crecimiento es variable a lo largo de diferentes trayectorias, mientras que un crecimiento no diferenciado asume cualidades cancerosas en la mayoría de los estados por la ineptitud de alcaldes y gobernadores aplastados por el burocratismo y negligencia de Caracas.
Intervenir más fábricas, empresas, comercios, no es la solución si las agotamos más rápidamente y cuando hay una verdadera corrupción inmobiliaria, con los arriendos, con las constructoras, aseguradoras, con la especulación y la inflación alimentaria, es un drama que tiene que terminar porque la lealtad no es para un despacho sino para una ideología que busca construir un socialismo.
Basados en la información de otras revoluciones y en la información real de esto años de proceso, señala claramente que este curso chavismo-socialismo sin identificar nos esta llevando al fracaso, es urgente que revisemos nuestras costumbres revolucionarias representativas que atacan al imperialismo, al capitalismo, para adormecernos casa adentro y no identificar la solución a los problemas que diariamente nos aquejan y de los cuales somos cómplices.
Problemas diarios que son traumatizantes, experiencias entre el chavismo y el socialismo, dos brechas que constantemente se agrandan y que deberían reducirse para enfocar los problemas concretamente y no en términos abstractos ya que chavismo y socialismo no son lo mismo y, porque el siglo XXI con sus eternos problemas económicos sumados a los problemas ambientales globales requieren nuestra participación científica como colaboración regional.
Empecemos definiendo nuestro proceso, las revoluciones son ofensivas no defensivas. Hoy, que tenemos la oportunidad de vivir un proceso de cambio da la impresión que el desarrollo social se lo detiene o al menos se lo retarda deliberadamente sosteniendo la idea que la ideología socialista esta apartada de lo racional.
Necesitamos entender que es lo que se entiende por crecimiento revolucionario desde el gobierno, porque, crecimiento en ultima instancia es un proceso no un objeto. Pero, si lo que se busca es definir el crecimiento en apoyo de posiciones “a favor o en contra” eso explica la confusión del ejecutivo trasmitida al legislativo acerca de las misiones, del tren, del metro, de la salud, de la educación, de las obras públicas y su eficiencia funcional sin considerar el consumo social, porque, una vez satisfechas las condiciones básicas de vida la gente desea crecer mas sin llegar al desperdicio absurdo.
“Quienes están a favor o en contra” definidos por las elecciones, es un parámetro ingenuo para definir si revolucionariamente estamos creciendo o no. No es una cuestión de madurez política coger el micrófono y decir hemos ganado y la oposición esto, el capitalismo aquello, el imperialismo lo otro, eso ya lo sabemos, ya no es pertinente, mientras la ubicación, el sentido y el sujeto del crecimiento socialista y el proceso mismo no estén definidos entre chavismo y socialismo.
Una revolución chavista o socialista, dos tipos de revolución, si fueran de crecimiento sería de interés diferenciado por la multiplicación por división, se empieza con dos, luego son cuatro después ocho, hasta que luego hay cientos, miles y millones, eso es crecimiento, pero parecería que llevamos años conformándonos con el casi famoso “no es poco lo que se ha hecho” produciendo una comparación estupida con la IV República en vez de ponernos a competir con nosotros mismos resolviendo los problemas mas elementales que vienen del pasado.
Problemas que ya son crisis por la ineficiencia de las alcaldías, gobernaciones, ministerios, cada uno a su vez llenos de crisis por el burocratismo, la corrupción, la codicia, la ignorancia y por la falta de conocimiento socialista, porque, el conocimiento chavista lo da el Sr. Presidente.
Chavismo o socialismo, surgen nuevas crisis mientras las viejas permanecen y se siguen extendiendo hacia cada rincón del país hasta que se convierten en crisis aparentemente sin solución. Los intentos aislados de solución propuestos por las alcaldías, gobernaciones han probado ser transitorias y a expensas de otras, resolver una protesta o una necesidad social mediante medidas que empeoran otros problemas y sin medir el tiempo para un cambio, está matando a la revolución chavista o socialista.
Detengamos el crecimiento demográfico mientras no tengamos seguridad alimentaria o, ¿para que? Una planta nuclear de 500 MW si una hidroeléctrica nos puede proveer 1500 MW con 1800 millones de dólares; son ejemplos de la complejidad de analizar un crecimiento revolucionario destacando el peligro de asumir una posición a favor o en contra del chavismo o del socialismo como concepto de crecimiento aprovechándose del subdesarrollo cultural.
El presidente Chávez, ha hecho muchísimo por nuestro cambio; nosotros y la Historia lo recordaremos por siempre, pero Venezuela no es una isla ni esta sometida a bloqueo, y así como vamos se necesita un liderazgo “abajo” solo desde allí el Sr. Presidente podrá ver otro mundo miserable que el poder político sostiene.
Sr. Presidente, usted puede decir que todo lo sabe, que nadie le miente, pero desde Miraflores, se pierde la perspectiva. La mayoría de quienes le rodean están comprometidas con su salario no con un proceso, y desde la óptica del pueblo los verdaderos revolucionarios comprometidos con la causa de cambio son removidos sin dar ninguna explicación a la gente, será por celos por decir lo menos, porque, de corrupción no me consta, en todo caso son decisiones del chavismo no del socialismo.
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