En virtud de que es fácilmente demostrable que las necesidades del país cada año, incluyendo el pago de la deuda, pueden cubrirse perfectamente con el 60% de los ingresos petroleros anuales. Porque si así no fuera, los Ministerios del Poder Popular para la Planificación y para las Finanzas no calcularían el presupuesto cada año en base al 50% del valor del barril de petróleo.

Considerando que hasta ahora los ciudadanos le hemos otorgado un cheque en blanco tanto a los gobiernos de la IV República como a los de la V para que administren los ingresos petroleros con los objetivos: Primero, Sembrar el petróleo; Segundo: Erradicar la pobreza, elevando al mismo tiempo la calidad de vida de los venezolanos.

Considerando que, tras 40 años de gobiernos de la Cuarta República y 14 años de gobiernos de la Quinta los objetivos antes señalados están muy lejos de haber sido logrados.

Considerando que todas las devaluaciones de nuestra moneda efectuadas tanto por los gobiernos de la Cuarta como los de la Quinta República, han traído como consecuencia el empobrecimiento crónico de más del 99% de los venezolanos y propiciado el enriquecimiento obsceno de una grupúsculo de venezolanos constituido por los Amos del Valle, los grandes banqueros, los grandes capos del narcotráfico y sectores que se han beneficiado del disfrute del poder en todos los gobiernos. Ese grupúsculo de venezolanos privilegiados es el beneficiario directo de todas las devaluaciones del bolívar y constituye la verdadera clase dominante de nuestro país, la Clase Acaparadora de Divisas (CAD)

Es tiempo entonces de que ese cheque en blanco nos lo auto otorguemos los venezolanos. Es tiempo de auto empoderarnos y de que contribuyamos nosotros mismos a la eliminación de la pobreza. Y no esperar más que los políticos lo harán por nosotros. La solución está en nuestras manos. ¿Cómo?

Sencillamente haciendo uso del Artículo 71 de la CRBV que nos otorga el derecho de solicitar un referéndum consultivo, cuyos resultados son vinculantes. Para ello sólo necesitamos recoger las firmas de un millón novecientos mil ciudadanos, el diez por ciento del registro electoral.

El referendo consultivo consistiría en  dos preguntas a las cuales los ciudadanos podrán responder con un No o con un Sí. Estas serían las preguntas:

Pregunta Número 1. ¿Está usted de acuerdo en que a partir del 1° de Enero del 2014, el Gobierno Venezolano haga entrega del 40% de los ingresos petroleros directamente en dólares y sin intermediarios a cada uno de los aproximadamente  24 millones de venezolanos, constituidos por los desempleados, los pensionados del seguro social, los estudiantes y  trabajadores que devenguen salarios, becas o pensiones no mayores a 6 salarios mínimos?

Suponiendo que para un año los ingresos petroleros ascienden a 120.000 millones de dólares. Entonces, esos 24 millones de venezolanos pasarían a recibir, sin intervención de CADIVI, directamente en dólares, en sus cuentas creadas a tal efecto la cantidad promedio de 2000 dólares al año (48.000 millones de dólares /24 millones de habitantes). Suponiendo una familia venezolana promedio de 5 miembros, esto significa que cada familia tendría a su disposición la cantidad de 10.000 dólares al año. Y cada año estarían circulando en la calle 48.000 millones de dólares, lo cual automáticamente elevaría el valor del bolívar que entonces sí pasaría a ser una moneda fuerte y apetecida. Al mismo tiempo, al escasear los bolívares la inflación automáticamente se reduciría. Se trata de una compensación parcial y de una aplicación de la justicia social para más del 80% de la población venezolana que ha sufrido desde el Viernes Negro el ataque despiadado contra sus sueldos y salarios, contra sus ahorros y sus pensiones causadas por todas las devaluaciones de nuestra moneda durante los últimos 30 años.

La propuesta convertiría a Venezuela en el único país del mundo con Hambre Cero, un ingreso mínimo per cápita de 2000 dólares anuales y con 100% de la población con cuentas bancarias en dólares y acceso al crédito.

La cantidad efectiva que recibiría cada uno de esos 24 millones de venezolanos estaría en razón inversamente proporcional al monto de sus actuales ingresos. Una posible asignación de estos recursos podría hacerse como se muestra a manera de ejemplo en la siguiente tabla.

·         Niño, Menor sin ingresos o Trabajador devengando 5 o 6 salarios mínimos recibirían 50 dólares mensuales o 600 dólares anuales

·         Estudiante adulto sin ingresos o Trabajador devengando 3 0 4 salarios mínimos recibirían 100 dólares mensuales o 1200 dólares anuales

·         Trabajador devengando 2 salarios mínimos recibiría 150 dólares mensuales o 1800 dólares anuales

·         Trabajador devengando 1 salario mínimo y Pensionados del SSO recibirían 200 dólares mensuales o 2400 dólares anuales

·         Desempleados sin ingresos recibiría 250 dólares mensuales o 3000 dólares anuales

En la tabla anterior, será totalmente gratuita la cantidad asignada a los menores, a los estudiantes adultos sin ingresos (Sujeto al rendimiento académico), y a los desempleados sin ingreso. Al resto de los trabajadores y jubilados se les cobrarán los dólares asignados a la tasa actual de Bs. 6,30 por dólar. Los beneficiarios podrían entre otras cosas subastar sus dólares públicamente, lo cual sería mortal para el mercado negro y facilitaría el desmontaje del control de cambio.

Pregunta Número 2. ¿Está usted de acuerdo con que en lo sucesivo el gobierno de turno se comprometa a respetar el equivalente en dólares de los salarios actuales de los venezolanos que devengan un salario no superior a los 6 salarios mínimos?

A manera de ejemplo, el salario mínimo actualmente está fijado en Bs 2.457, que a la tasa oficial actual, equivale a 390 dólares. Si los venezolanos responden mayoritariamente Sí a esta pregunta, entonces el salario mínimo en Venezuela jamás podría descender por debajo de los 390 dólares.

Propongo que este referendo con las dos preguntas sea incluido en las próximas elecciones municipales del 8 de Diciembre, para lo cual todos los venezolanos debemos organizarnos y empezar a recoger las firmas requeridas a la brevedad posible. Los que estén de acuerdo con esta propuesta favor contactarme. Unidos podemos lograrlo. El camino más largo siempre comienza con el primer paso. (Filósofo chino).