A cinco años de la muerte del fotógrafo del diario 2001, Jorge Ibrahim Tortoza
Cruz, los asesinos ya identificados por el Cuerpo de Investigaciones Penales y Criminalísticas (CICPC), se encuentran prófugos de la justicia. Se trata de Carlos Aristimuño y los hermanos Nelson Márquez Mejías e Israel Márquez Mejías.

El caso inicialmente fue manipulado, gracias a los contactos y el poder económico del Bloque De Armas en el CICPC y en la Policía Metropolitana cuando la dirigía Henry Vivas y Lázaro Forero.

Como se recordará Jorge Tortoza fue asesinado el 11 de abril cuando los golpistas buscaban un muerto, preferiblemente periodista para que la muerte tuviera mayor repercusión internacional y alcance mediático. Y así sucedió: Los hermanos Márquez Mejías portaban dos pistolas. Nelson Márquez Mejías era funcionario del CICPC (Piloto III) y portaba una pistola Beretta 9 mm y fue quien recogió la cámara de Tortoza en el lugar del crímen. El otro es su hermano, (Piloto Civil) Israel Alfredo Márquez Mejías, a quien se le incautó una pistola Walter PPK. Estos asesinos se encuentran prófugos de la justicia y se presume que están en Estados Unidos (Miami) porque saben que los policías metropolitanos los acusaron de disparar al fotógrafo.

La fiscalía 78 nacional del Ministerio Público, acusó al funcionario de la Policía Metropolitana (PM) Miguel Landaeta, por el presunto delito de ocultamiento de informaciones relacionadas con la muerte del reportero gráfico Jorge Tortoza, ocurrida el 11 de abril de 2002.

A Landaeta se le acusa de ocultar en las actas procesales el testimonio de siete funcionarios de la PM y de otros testigos que observaron que Israel Alfredo y Nelson Enrique Márquez Mejías, así como Carlos Miguel Aristimuño, usaron armas de fuego durante los disturbios ocurridos en el centro de Caracas en la marcha de la oposición del 11 de abril de 2002. Landaeta asentó todo lo ocurrido en el libro de novedades de la PM, pero no lo hizo en las actas de investigación. Al funcionario también se le acusa de no haberle decomisado los celulares a los detenidos y haberlos puestos en libertad. Con dichos teléfonos se pudieron cruzar las llamadas telefónicas relacionadas con la muerte de Tortoza.

El Acta Procesal elaborada por la Policía Metropolitana omite información de la novedad 23 del parte número 101 del 11 de abril, primer documento que se realizó después de la muerte del reportero gráfico. El parte policial expone que el subinspector Miguel Landaeta, junto a otros metropolitanos hacía un recorrido motorizado
el día de los sucesos en la avenida Baralt- halló a las 5:00 pm en la
esquina La Gorda el cuerpo "sin vida" de Jorge Tortoza. El funcionario reportó que en el lugar fueron detenidos tres hombres señalados por la multitud como los autores de la muerte del fotógrafo. El primero de ellos es Carlos Aristimuño, a quien se le incautó una pistola Glock, modelo 40 mm (cargada y con 14 proyectiles en la cacerina o el
cargador de balas). El segundo detenido fue Nelson Márquez Mejías, quien presentó credencial de oficial del Cicpc. Portaba una pistola Beretta 9 mm, también cargada y a la que le quedaban 6 balas en el cargador. En la pretina del pantalón tenía otra carga de 15 cartuchos y también tenía en su poder la cámara de Tortoza. El tercer detenido en el procedimiento fue Israel Márquez Mejías, a quien se
le incautó una pistola Walter PKK y tenía carga de 8 proyectiles.
El acta en cuestión tampoco menciona que estas personas fueron señaladas por
la multitud como los posibles responsables de la muerte del fotógrafo. No
obstante cabría preguntar, ¿por qué no se detuvo a algunas personas como
testigos?
Los hijos del director del periódico 2001, Israel Márquez Guerra, a punta de realazo limpio y por órdenes de Andrés De Armas Silva, saboteó la investigación para exculpar a los hermanos Márquez Mejias. Ellos están acostumbrados a manipular casos y encubrir crímenes, herencia de su padre Armando de Armas. Israel Márquez es director y es periodista colegiado.

Sus inicios fueron en la PM como escribiente, luego pasó a ser escolta de Armando De Armas, quien lo utilizó como enlace de la Disipy ascendido a rango de Comisario General para hacer trabajos sucios y grabar a sus enemigos.

Recientemente fue detenida Milagros De Armas Silva como autora intelectual de la muerte de la estudiante de la UCAB, Andreína Gómez Guevara, estudiante de 24 años de edad y asesinada cuando acudía a la Universidad Católica Andrés Bello. En Gobiernos de la Cuarta República este caso, como otros, hubiera sido silenciado y alterado las pruebas con el poder del dinero y los medios de comunicación.

Los colegas de Tortoza preguntamos dónde esta el Colegio Nacional de Periodistas (CNP), el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), la Comisión de medios de la Asamblea Nacional, los tribunales de justicia y los periodistas que ostentan cargos de poder como ministros y viceministros.

Jorge Tortoza asesinado el 11 de abril de 2002