En este país, tu país, mi país, la injerencia extranjera, conspiradora, fabricante de golpes de estados, operadoras del magnicidio, importadora de para-militares, "engrasadora" de palangristas y opinadores de oficio se mueve como "pez en el agua".

Pareciera que no se le da la debida importancia la peligro del intervencionismo descarado de cuanta organización fascista exista en el mundo y que llega Venezuela a "tumbar a Chavez", a "matar al Presidente", a "Desestabilizar, a financiar sicarios, a establecer "Redes Populares" de secuestros y asesinatos de militantes revolucionarios, de sindicalistas revolucionarios, de campesinos revolucionarios, de indígenas revolucionarios, de hijos e hijas de los "chavistas" en los barrios y clases populares "para desprestigiar a Chavez".

Todo orquestado en un plan macabro de sectores ultraderechistas de la oposición venezolana (99% de la misma) que no acepta el triunfo del socialismo, que aun no ha reconocido la legalidad del mandato revolucionario.

La injerencia criminal extranjera en asociación para delinquir con los operadores políticos y mediáticos de la oposición fascista en Venezuela, sido consuetudinariamente denunciada y comprobada por numerosos compatriotas como Eva Golinger, Mario Silva y muchos mas, sin que se observe una reacción verdaderamente contundente de parte de las autoridades competentes en atacar de raíz este gravísimo problema. No observamos una acción mancomunada de los organismos de seguridad del estado en contra de las asociaciones de ganaderas, dirigentes políticos e individualidades complicados en al importación de sicarios y para militares por ejemplo. Estudiantes Sifrinos, periodistas, organizaciones políticas y de manipulación electoral, medios de comunicación agitadores y conspiradores reciben grandes sumas de dinero en divisas extranjeras, actúan descaradamente y no sucede absolutamente nada desde el punto de vista policial o/y judicial.

La asamblea Nacional no toma cartas en el asunto, salvo uno que otro saludo a la bandera y la investigación de algún "asesinato importante". Requerimos que se revisen los códigos de leyes y proceder a la tipificación de delitos como los que estamos aquí denunciando que por aparecer tipificados de manera difusa en las leyes, hace imposible la aplicación de medidas judiciales y la condena de los delincuentes. Muy grave también resulta el echo que los gobernadores y alcaldes fascistas (ya demostraron de lo que son capaces) aun mantengan en su poder y discrecionalidad a los cuerpos de policías regionales. En el Zulia por ejemplo, el fascismo cuenta con un ejercito de mas de 20.000 efctivos sobre las armas, ¿Habrá que esperar que Rosales y Pablo Perez, Vivas, Radonsky, Salas Feo y Cia perpetren otra masacre como la que urdieron los golpistas mediaticos y Alfredo Peña (en que cloaca estará escondida esa rata) en Abril del 2.002? ¡Guerra avisada no mata soldado! y si lo mata es por pendejo.

Mientras tanto, el enemigo penetra nuestros barrios, sigue matando y secuestrando, el paramiltarismo se entroniza en los sectores populares, controla el trafico de drogas, el sicariato, el cobro de vacunas, el hurto y robo de autos y la lenidad ante el delito sigue produciendo escaladas mayores del mismo.

Dejemos el pendejismo a un lado, el triunfo de la enmienda se traduce en la oposición en la vía por la violencia, la desestabilización, el magnicidio, el golpe de estado, como la única opción ante la imposibilidad de derrotar al presidente en democracia

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rafaelurdanet@gmail.com
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