En el 2013 a pesar de todo se resistió

Hace un año el más pesimista de los analistas no hubiera pensado siquiera el panorama difícil que tendría que afrontar el pueblo revolucionario venezolano. Cinco pruebas determinantes tuvo que enfrentar el proceso socialista: *La juramentación presidencial del Pueblo en nombre del Presidente Chávez; *La desaparición física del Comandante Chávez; *Las elecciones presidenciales de abril; *La Guerra Económica; y *Las municipales de diciembre. Sin duda, cada uno de estos cinco acontecimientos estuvo acompañado de su respectiva desfiguración y manipulación por la derecha, que con sus medios tarifados dirigieron todo tipo de artimañas comunicacionales para confundir.

*PRIMERA PRUEBA (Pensamiento y Praxis): Un breve recuento pone en evidencia la cadena de bajezas que el fascismo promovió con sus matrices, que igualmente tuvieron una respuesta contundente de la militancia socialista. Cuando la canalla dijo que habría un “vacío de poder” si no se realizaba la juramentación presidencial el 10 de enero, millones salieron y en cientos de plazas Bolívar expresaron con firmeza “Yo Soy Chávez”, haciendo un juramento colectivo en nombre de su Comandante ausente. Aquí se empezó a visibilizar la compenetración entre el pensamiento y la praxis Chavista, que eran conjugados por un Pueblo que interpretaba, razonaba y actuaba conforme a una conciencia desarrollada durante más de una década, esto era un punto de inflexión que fue burdamente subestimado por el oposicionismo.

**SEGUNDA PRUEBA (Estoicismo): La esperanza de una recuperación del líder bolivariano se vieron truncadas y un frío corrió por el espinazo de la Patria un 05 de marzo, al escuchar las palabras del para ese entonces Vicepresidente Maduro “Ha fallecido el presidente Chávez”. El nudo en la garganta y las lágrimas no habían terminado de brotar, y se iniciaba un macabro juego desde las disociadas voces opositoras que intentaban enturbiar el duelo que embargaba a la mayoría de venezolanos con sus irresponsables falacias que sugerían manipulación en la fecha del fallecimiento de nuestro presidente. Esas marramucias periodísticas y provocaciones reaccionarias pretendían causar una ingobernabilidad y actos de violencia generalizados, empero, con estoicismo la población se mantuvo en paz y no sucumbió a las incitaciones.

***TERCERA PRUEBA (Lealtad): En medio de esa pérdida irreparable se tuvo que asumir un proceso electoral que la oposición acompañó de una letrina publicitaria al mejor estilo goebbeliano, buscando infructuosamente inocular el discurso traidor de “Maduro no es Chávez” para confundir a la población. En desmedro de esa guerra psicológica estaba el direccionamiento sabiamente expresado por el Comandante Chávez “Mi opinión firme, plena, como la luna llena, irrevocable, absoluta, total, es que en un escenario que obligaría a convocar de nuevo a elecciones presidenciales, ustedes elijan a Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela. Yo se los pido desde mi corazón”. Fue así como la lealtad se impuso a la mentira, y la derecha empezó a enfrentarse con un nuevo escenario: NO PUDIERON CON CHÁVEZ EL HOMBRE, AHORA ERAN DERROTADOS POR EL LEGADO INMORTAL DE CHÁVEZ. Las típicas pataletas peluconas salieron a relucir desde los sectores oligárquicos, que gritaron fraude, y desconocieron las elecciones, causando muerte y desolación, que no tuvo replica en la masas socialista, que evitaron caer en la trampa de generar enfrentamientos cruzados que desbordaran en una situación descontrolada que justificará intervenciones extranjeras al estilo Libia o Siria.

****CUARTA PRUEBA (Dignidad): Paulatinamente, la situación política se fue enfriando para desespero de la diligencia derechosa, que amargamente observaba como la mayoría de las naciones daban sus felicitaciones y reconocimiento al Presidente Nicolás Maduro. Fue ahí cuando la guerra económica arreció, y el triunvirato conformado por las cúpulas empresariales, dueños de medios y figuras opositoras debía evitar a toda costa que la gestión chavista se consolidara, intentando desangrar con especulación, escasez y burbujas cambiarias. Este plan estaba (y está) dirigido a ocasionar una explosión social como la sucedida el 27 de febrero de 1989. De nuevo, la trama orquestada por los conspiradores chocó con millones de ciudadanos que a pesar de carecer de algunos productos básicos y recibir una incesante cadena de mensajes que alentaban saqueos y violencia, decidieron anteponer su dignidad y no se amilanaron ante estos arrebatos.

*****QUINTA PRUEBA (Resistencia): El punto culminante de esta gesta lo significó las elecciones municipales de diciembre de 2013, que con toda esta carga de situaciones adversas fue afrontada con paciencia, disciplina y fervor revolucionario, derrumbando las pretensiones de los grupos conspiradores que vieron diluida su tesis falaz del “plebiscito”. La derrota municipal reiteró la total carencia de capacidad en la dirigencia opositora que cíclicamente vuelve sobre los mismos derroteros caprichosos, que se caracterizan por desconocimiento del árbitro electoral, uso focalizado de la violencia, y un vacío discurso de superioridad. En contraparte, el 8/D dejó plasmado definitivamente al Chavismo como un movimiento político, un proceso cultural, un proyecto de vida, una convicción de país, un sentir colectivo, y todo esto en síntesis se puede resumir como LA CAPACIDAD DE RESISTIR, hecho que demuestra madurez en nuestra militancia, ya que muchos de los acontecimientos analizados en los párrafos anteriores hubieran significado una implosión en muchos gobiernos en otros países.

******CONCLUSIÓN (La Fórmula): El Comandante Supremo Hugo Chávez era reiterativo al citar a Pitágoras y su pensamiento que refería “Dios habla a través de las matemáticas”, si se extrapolan las ideas disertadas en el presente artículo como fórmula, se podría enunciar algo así: R(RESISTENCIA)=PP(Pensamiento y Praxis)+E(Estoicismo)+L(Lealtad)+D(Dignidad). Ciertamente los hechos sociales son mucho más complejos que una ecuación, y lo anterior era referencial para mostrar como el conjunto de hechos conforman un proceso. Es importante comprender que la RESISTENCIA es dinámica, debiendo enfrentar y vencer los obstáculos que presenta la derecha, y diversificar las formas de resistir, ya que la guerra que libran los grupos oligárquicos y sus amos extranjeros no cesará hasta encontrar la contra fórmula para descalabrar la Revolución Bolivariana. Orgullosamente podemos decir que tras 14 años las tentativas de generar Revoluciones de Colores patentadas por laboratorios de guerra psicológica se han diluido ante el Poder Popular que ha resistido con gallardía, pero depende de nosotros que en los años venideros sigan fracasando quienes anhelan regresar al servilismo y colonialismo del pasado puntofijista. Preparémonos pues para seguir superando las pruebas que nos deparará el futuro.

¡¡Independencia y Patria Socialista!!

¡¡Viviremos y Venceremos!!

¡¡Feliz año 2014!!





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Daniel Quintero


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