El trabajador en las crisis capitalistas

Vivimos un tiempo de grandes problemas económicos, sociales y ecológicos. Problemas de una magnitud tal, que amenazan seriamente la vida en la tierra, aunque su epicentro se halla en los países capitalistas más desarrollados. Las múltiples y multitudinarias demostraciones de los INDIGNADOS DEL MUNDO son una prueba de las crisis capitalistas y del peso que ejerce sobre la gente y sobre todo tipo de vida en la tierra. 

El ser humano consciente, ese que  ama sus hijos, a  su familia, su entorno, su patria;  necesariamente se hace preguntas, cuyas respuestas no son nada fáciles: ¿Será esto el fin de la economía capitalista? ¿Será una crisis pasajera o será el fin de este Sistema? ¿Me afectará siempre ésta crisis?

Dudar, hacerse preguntas es propio del ser humano, sea hombre o mujer. Las respuestas también son   diversas. En esta oportunidad, desde nuestro punto de referencia intentaremos humildemente arrojar luces sobre estas angustias que el hombre y la mujer de hoy viven y confrontan. Lo primero que hay que decir y demostrar, es que El Capitalismo vivirá y será capaz de encontrar en cada escollo su salvavidas que le permitirá sobreponerse.

Las consecuencias de este movimiento crítico del sistema se cargan siempre sobre los hombros de los pueblos y de la clase trabajadora, incluyendo por supuesto a la clase media, que tan ciega y acríticamente se pliega a los valores del sistema capitalista como su referencia esencial. No requiere este hecho de mayor esfuerzo de análisis, simplemente necesitamos ponerle atención a las medidas que están tomando los gobiernos donde la crisis se torna aguda.

El Capitalismo vivirá de crisis en crisis PORQUE EN LOS BALANCES ECONÓMICOS DE LAS EMPRESAS CAPITALISTAS, las cuales son el soporte del sistema, NO HAY LUGAR PARA PÉRDIDAS. Cuando llegan las perdidas, llegan los ahorros, cuando llegan los ahorros llega la pérdida de puestos de trabajo, cuando se reducen los puestos de trabajo no hay quien compre (disminuye la demanda según el lenguaje Capitalista), cuando no hay quien compre no se produce (nadie produce para no vender). Cuando esto ocurre, se estanca la economía y se entra en las crisis.

 En el pasado, el capitalismo resolvía sus crisis con guerras, las guerras generaban grandes mercados, se generaba empleo y se reactivaba la economía. En países como Inglaterra, que era un país muy conservador, las mujeres llegaron a salir de sus hogares, a ser trabajadoras. Las mujeres durante la guerra tuvieron que asumir puestos en el correaje acelerado de producción que exigía la guerra y al terminar ésta, simplemente no volvieron a ser piezas de adornos en los hogares británicos.

La guerra dejó de ser un instrumento generador de empleo. Las guerras de hoy son de alta tecnología, en especial las guerras imperialistas, y no demandan el correaje de producción de las guerras tradicionales, eso sí, cada cohete que se lanza, hay que pagárselo a los fabricantes y eso sale del bolsillo de los contribuyentes. Esto implica, que la guerra es un negocio para unos pocos, muerte para muchos, y pobreza generalizada aún para los pueblos que “ganan” la guerra.

Lo que ocurre en el complejo Industrial-Militar, ocurre en la banca y la política. Es decir, la acumulación de capital lleva al poder político y de allí que en las sociedades capitalistas EN TIEMPOS DE CRISIS LAS DECISIONES POLÍTICAS HACEN CAER EL PESO DE LAS CRISIS SOBRE EL TRABAJADOR Y LA CLASE MEDIA. El recorte de pensiones, aumento de la edad para recibirla, aumento de impuestos, pérdida de los puestos de trabajo. Esto básicamente cae sobre los hombros de los trabajadores y la clase media.

 Los políticos capitalistas siempre actuaran así, LA OPOSICIÓN VENEZOLANA INCLUIDA. Durante el gobierno CAPITALISTA de Rafael Caldera (Julio Borges era su secretario privado) hubo una crisis bancaria y el gobierno le dio el dinero a los banqueros, quienes, sencillamente usaron ese dinero como les dio la gana. En este proceso, el gobierno SOCIALISTA de HUGO CHÀVEZ hubo una mini crisis bancaria y para resolverla, el gobierno SOCIALISTA le dio el dinero a los ahorristas, es decir, al PUEBLO.

En resumen: El Capitalismo lleva en sí el germen de sus crisis: SIEMPRE DEBE HABER GANANCIAS. SI NO HAY GANANCIAS RECÓRTO Y GÈNERO POBREZA A LOS DE ABAJO, NUNCA A LOS DE ARRIBA.

Los políticos capitalistas, LA OPOSICIÓN VENEZOLANA incluida, en las CRISIS del sistema capitalista hacen de todo, MENOS AFECTAR LOS INTERESES DE SUS AMOS. Por fortuna ¡NO VOLVERAN!

Sabio es el PUEBLO, cuando usa EL REFRÁN que dice: PERRO NO MUERDE A SU AMO.

jmacanao@gmail.com



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Jesús (Macanao) Gil


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