Indudablemente que el pelotero Miguel Cabrera, es sensacional; que bueno que es venezolano. Los logros en las grandes ligas son indiscutibles y marcan pauta para el ejemplo a seguir por todos gracias al esfuerzo y dedicación propios, por supuesto, sin desmeritar de todo aquel o aquella que lo ha apoyado, aupado y estimulado.
Esta reconocida grandeza de Miguel Cabrera, haciendo una pausa en los candentes temas políticos de hoy, me permite dirigirle estas cortas pero significativas líneas, mediante las cuales quiero hacerle llegar una consideración y propuesta, esperando haya que alguien que se las haga saber, entendiendo sus múltiples ocupaciones y compromisos no deportivos directamente, que seguro tendrá previstas.
Miguel, siendo en la actualidad el mejor pelotero del mundo, no tiene nadie ni nada que le imponga condiciones para jugar con cualquier equipo y por los dólares que Él considere, sumado a esto, las inmensas ganas que tenemos la gran mayoría de los venezolanos, aficionados o no del beisbol, que queremos verlo directo en el terreno y jugando, hace propicia la ocasión para proponerle, cuidando de su merecido descanso y procura de las mejores, necesarias y buenas condiciones físicas para las futuras campañas en el norte, que se uniforme de tigre y aparezca jugando en los distintos estadios de la Patria, aunque sea un juego por rival, donde, con toda seguridad se producirán dos efectos realmente buenos para todos, por una parte recibirá la ovación más entusiasta que deportista haya tenido en Venezuela, por la otra, los presentes en los campos y los desde las casas y otros lugares, igual por merecerlo, gozaremos del privilegio de verlo jugar en la República Bolivariana de Venezuela y en vivo.
Compatriota Miguel Cabrera, usted es un ídolo de los venezolanos, no nos deje sin verlo jugando.
