BHP RECHAZA AMENAZAS A LA SOBERANÍA Y PRETENSIÓN DE APROPIACIÓN DE LOS RECURSOS DE LA REPÚBLICA.

Hoy 17 de diciembre, día de la muerte de Simón Bolívar, "El Libertador" de 5 naciones, quién dirigiendo un ejército de descalzos y extranjeros sumados a la causa libertadora, independizó a medio continente y siguiendo su ejemplo irreverente, desde el BHP rechazamos de manera categórica las declaraciones y órdenes ejecutivas emitidas por el presidente de EEUU, Donald Trump.

Es inaceptable que conociendo la historia irredenta del pueblo venezolano, se pretenda reclamar "control o propiedad" alguna sobre el petróleo, las tierras y los activos que pertenecen exclusiva e inalienablemente a la nación venezolana.

Insistimos, más allá de nuestro profundo rechazo a las políticas hambreadoras y a su forma de gestionar los recursos públicos y del gobierno autoritario y a la destruccion democrática institucional en que nos ha sumido este gobierno, rechazamos cualquier violación a la soberanía nacional. La soberanía nacional es esencial para la identidad, la comunidad y la libertad.

Venezuela dejó de ser colonia hace más de 200 años, nuestros recursos, territorio y activos son nuestros y nos lo ganamos guerreando y nos pertenecen como parte de una herencia intergeneracional inalienable e irrenunciable.

Es una torpeza que alegando razones de "seguridad nacional" frente a un peligro creíble su país, cómo lo es el consumo, producción, tráfico y legitimación de capitales productos de la droga, se pretenda arrebatar territorios, recursos y activos a país alguno. Es inaceptable desde el punto de vista del derecho internacional y de nuestra Constitución.

Decretar unilateralmente una "zona de exclusión aérea" sin autorización de la ONU es una clara violación del derecho internacional. Su implementación unilateral en la práctica, constituye un acto de agresión prohibido por el Artículo 2 (4) de la Carta de la ONU que, sin ésta base legal, dichas zonas infringen el principio de integridad territorial y autonomía política del Estado intervenido.

Asimismo la declaratoria sobre las costas venezolanas de un "bloqueo naval total" lo que equivale a una operación militar coactiva para impedir el acceso de buques o aeronaves de cualquier país desde o hacia el territorio venezolano, sin cumplir con el derecho internacional consuetudinario, el Manual de San Remo y la Carta de la ONU que establece que sólo el Consejo de Seguridad puede autorizar un bloqueo naval bajo el Artículo 42 y para restaurar la paz internacional, resulta ilegitimo e ilegal.

Ninguna de estas medidas resolverá la crisis de gobernabilidad y legitimidad del gobierno, ni tampoco es una solución efectiva para un "cambio de régimen" en Venezuela, sólo agravará el caos y atornilla al gobierno que pretenden combatir. El gobierno de Maduro no es el pueblo noble de Venezuela.

Todas estas medidas unilaterales y de aplicación extraterritorial, no sólo son ilegales, sino que frente al miedo, el terror y a la incertidumbre sólo han traído la profundización de la crisis, caos y sufrimiento a las familias venezolanas y han servido como incentivo para la migración forzada de millones de compatriotas.

Repetimos: estas acciones sólo han servido para el fortalecimiento del autoritarismo, acrecentando la persecución política y los abusos desde el poder contra la población venezolana en general, sea del signo político que sea.

Reiteramos que la salida a la tragedia nacional no vendrá a través de invasiones, bloqueos navales, ni zonas de exclusión aérea, mucho menos con la entrega de nuestras riquezas a potencia extranjera alguna.

La solución debe lograrse de manera pacífica, constitucional, electoral y, pero sobre todo, debe ser soberana.

Rechazar medidas antisoberanas contra el país es una obligación moral de cualquier venezolano decente.

Éso no significa aprobar al gobierno de Nicolás Maduro. Nos
negamos a normalizar el abuso, la miseria administrada, la mentira institucionalizada y la violación a la CRBV como forma de gobierno. Maduro no es Venezuela.

El gobierno no representa la dignidad, la historia, ni el alma del pueblo venezolano. Y con ello, no estamos justificando ni incitando al odio o al caos. Mucho menos a una invasión, esto no es legítimo. Desde nuestra posición, estamos marcando un límite ético.

Y por ello,
Desde el BHP exigimos respeto al Derecho Internacional y llamamos a la comunidad internacional a apoyar salidas democráticas, sin que esto implique la destrucción de nuestra economía, del país, la apropiación de nuestro territorio, bienes y recursos, y mucho menos la hipoteca de nuestro futuro; futuro, recursos y territorio qué nos pertenecen de manera irrevocable e irrenunciable como derechos intergeneracionales.

En Caracas, hoy 17 de diciembre de 2025