Es probable que un ser maquiavélico, que haya pasado la vida metido en una burbuja, dónde el conocimiento como valor para lograr la igualdad esté negado, sin importar condición social; no tenga idea lo que representa una guerrera de aviones, bombas y mercenarios paseándose por los escombros, tratando de violar y saquear lo que haya quedado con vida. Y si lo sabe y la invoca para exterminar a su semejante, es un asesino.
Está reflexión viene, porque no es comprensible que monstruos vivientes, tengan la desfachatez por desconocer lo que es vida y no entender la magnitud de un holocausto que pondría en peligro a sus seres más cercanos y si no los sienten en el conflicto porque la sensibilidad humana se perdió: tendríamos que considerar en hermandad; no merecen convivir con seres que buscan la igualdad, independientemente de sus posiciones partidistas y sería preferible para el equilibrio mundial, salir de los enfermos, que son minoría; antes que ellos en su locura exterminen a la mayoría.
Que garantía puede tener un pueblo si se presenta la guerra y estamos rodeados de asesinos que han vivido deseando la muerte a cualquier ser que respire y exterminar solo por el hecho que la ambición le desarrollo odio y quitó toda sensibilidad hacia su semejante.
¿Quien que haya conocido los daños de la guerra? podría imaginar a alguien desvalido sintiendo los efectos, dónde en la mayoría de los casos los llaman daños colaterales y mirar esa acción desde el egoísmo de añorar poder, viendo en su escaso pensamiento, como la sangre llena la patria de una petición, que tal vez mañana no pueda entender como el demonio incito a qué la aceptará.
Cómo va a vivir refugiado en algún lugar escondido, sabiendo que los patriotas de ese lugar que incito para que ataquen, no se rinden y que de suceder, se mantendrán en una guerra de cien años , porque tiene una estirpe de valientes antepasados que dejaron en sus genes a combatientes que seguirán luchando siempre, porque SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.
HAZTE CONCIENCIA
