Ser chavista en el estado Anzoátegui

No es nada fácil llamarse seguidor del comandante Hugo Rafael Chávez Frías, en esta entidad federal. El buen trato y consideración hacia la militancia son apenas los días de campaña electoral. Después los dirigentes cambian en cuanto a la relación con sus camaradas. Ni porque tengan un programa radial los gobernantes contestan el teléfono para oír las quejas de los residentes, así se expresa Samuel Martínez chavista reconocido, en su programa de opinión.

La cuestión es tan difícil que ni siquiera el hecho de ser el padre del gobernador, merece un mínimo de respeto por parte de las autoridades policiales. Y no estamos hablando de un indigente o alcohólico, él señor es una persona bastante apreciada en la ciudad capital del estado Anzoátegui, un hombre muy humilde popularmente conocido como "Perico".

Resulta que en el aniversario de Barcelona, los policías le negaron la entrada a la Plaza Bolívar, por más que gritaba ser el papa de Luis José, el gobernador del estado, los oficiales hicieron caso omiso. Los presentes sintieron rabia y dolor, al popular Perico no le quedaron más ganas de decir que era el progenitor del primer mandatario regional, sobre todo si ya era la segunda vez que pasaba por esta misma experiencia.

Con el actual gobernador es una odisea conseguir trabajo si eres nativo del estado o resides allí. Su preferencia para nombrar a funcionarios en cargos importantes siempre tiene una tendencia hacia profesionales de otras regiones, especialmente de Carcas. Y si no eres del sexo femenino peor aún.

La presidenta del parlamento regional, es una dama, la presidenta de la cámara Municipal de Barcelona, es otra mujer, la directora general de la alcaldía es su propia esposa, la primera dama del estado. La directora de salud es una doctora. La alcaldesa de Barcelona también es una señora, al igual que las alcaldesas de Guanta, Clarines, Cantaura y muchos funcionarias más

Los restos del general José Antonio Anzoátegui por poco se salen de la tumba del revolcón tan grande, y en pleno verano por poco se desbordan los ríos Orinoco, Neverí y el Rincón ante las detenciones efectuadas en esta entidad. La raya colocada a los habitantes no se va a quitar tan fácilmente.

Lo del alcalde de Soledad no tiene nombre, según cuentan, rompieron las paredes de la residencia, encontrando grandes sumas de dinero, habían muchísimas bolsas del Clap, medicinas vencidas, regalos navideños guardados como bicicletas y otros juguetes costosos. El exalcalde Cantaura se había mudado a El Tigre, ahora no nombran protectores sino responsables políticos. Así como para que no se quedara desprotegidos.

Un chavista colocó en su grupo, hace falta Aristobulo. Pues el profe manejaba la idea que tenia que controlar todo lo que sucediera en la entidad, estando al tanto de cualquier reunión. Con él en este mundo nada de esto habría pasado. El dirigente no tuvo suerte murió políticamente en vida, el corazón no aguanto más, la traición de Nelson Moreno lo perturbó y la desesperación de exalcalde Guillermo Martínez, por hacerse líder sin ser dirigente, le hicieron andar nervioso.



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Claudio Schiveci

Exdirigente juvenil en el Liceo Cajigal de Barcelona, Cofundador de la revista Horizonte, redactor de la revista cultural Candilejas. Columnista en los diarios El Metropolitano, La Nueva Prensa de Oriente y Diario Impacto en Anzoátegui.

 claudioschiveci@gmail.com

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