Tumbar al Papa Francisco y a Maduro es el sueño de Urosa

Parece ser según noticia en red atribuible a Giordano, que éste habría cantado una verdad molesta para la Conferencia Episcopal Escuálida Venezolana -CEEV-: "El Papa Francisco está listo para visitar a Venezuela".

Ojo, me refiero es al Nuncio vaticano Arzobispo Aldo Giordano, de quien se supone ostenta fidedigna jerarquía para hablar en nombre del Papa Francisco, no obstante, de ipso facto apareció la serpiente, esta vez en boca de Monseñor Lückert: "El Papa no debe venir a Venezuela hasta que no se apruebe la ley de amnistía".

Monseñor Lückert, quien por su aberrante oposición a la "Misión Hijos de Venezuela" destinada a socorrer a las jovencitas embarazadas, y de escasos recursos económicos, denigró de manera anticristiana calificándola de "misión abre las piernas", tuvo efecto bumerang y ahora él es conocido por el pueblo como tal "monseñor abre las piernas"; ese es el sujeto que pretende descalificar al Nuncio papal Aldo Giordano, con lo que asoma a la superficie la brutal guerra intestina en el seno de la Igesia de Francisco, por lo que éste seguramente vendrá efectivamente a recoger los vidrios rotos de esa secta recalcitrante del ultra opus dei encarnada en Monseñor Urosa y en el Cardenal Diego Padrón -da lo mismo uno que otro monseñor o cardenal y viceversa porque son uno al otro uña y sucio-, ah, y por supuesto, el resto de esa cofradía, sin excepción, son tales para cuales, sólo que algunos son demasiado lenguaraces mientras que otros son exquisitamente motolitos.

Excepto Urosa y Padrón, el más viperino y desbocado es Lückert y el más motolito es Monseñor Mario Moronta pero el pueblo dice que debajo de la basurita se oculta la serpiente.

Si Su Santidad no le mete mano a esa gentecita su iglesia va a cosechar tempestades.

Presiento que ya es seguro que Su Santidad va a venir muy pronto a Venezuela y no precisamente bajo las condiciones que sus enconados enemigos -la CEEV- ha dispuesto, pero eso sí, hay que cuidarlo extremamente porque esa gente es carnicera y sanguinaria, recuérdese el 11 de Abril cuando el golpe de Estado que tumbó a Chávez; las reuniones de coordinación de esa sangrienta asonada contra la democracia se efectuaron en la sede de la CEEV y bajo la batuta de un sujeto conocido con el remoquete de "Zamuro negro" quien luego de quitarse la máscara resultó ser el entonces Cardenal Ignacio Velasco, ya desaparecido, pero que entonces firmó sin empacho el decreto de Carmona.

Recordemos también que la mafiocracia eclesial -opus dei y etc- envenenó con una copa de vino al Papa Juan Pablo I -Albino Luciani- y eso fue para los entendidos, un golpe de Estado al estilo Vaticano.

Pero, bienvenido a Venezuela, Papa Francisco, los ateos venezolanos te respetamos muchísimo, lo digo por mí, sempiterno hombre sin religión, pero abrigo la certidumbre de que otros como yo, también te respetan en sumo grado.

No niego que desde el dedo gordo del pie hasta la antena de mi azotea me asalta un escalofrío al pensar que esos carajos -de la CEEV- pudiesen aprovechar el que Francisco y Maduro se reúnan, para matar dos pájaros de una sola pedrada, ¡el Diablo intenta o el Diablo tienta (dice el pueblo)! pero, ateo y todo, yo me encomiendo a un "Dios" particular y que alguna vez inventé para pasar un buen susto del que salí entero afortunadamente, como "Dios de las aguas profundas"; desde entonces no dejo de invocarlo y como otrora, igual, sea cual sea la ocasión, le echo una rezadita hacia mi fuero íntimo, así, "yo pescador / me encomiendo a ti / por mi culpa / por mi gran culpa / no me dejes solito ahora / yo no lo hago más"; y vale, reitero, para toda ocasión personal.

Eso sí, que Su Santidad, no le tome ni un inofensivo café a esos referidos charlatanes porque esos sólo son "empresaurios" que mancillan el esfuerzo de los demás en pro de la paz.



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Guillermo Guzmán


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