Mañana 7 de
octubre del 2012 serán las elecciones presidenciales en Venezuela. 17
millones de ciudadanos, incluidos en el Registro electoral del CNE,
están convocados durante 11 horas para que decidan el nombre de la
persona que gobernara hasta el 2019. Los nombres mas opcionados son los
de Hugo Chávez y Enrique Capriles. Otros candidatos parecen no tener
mayor incidencia en la disputa.
Muchas
cosas se han dicho a lo largo de la prolongada y crucial contienda
política. Los temas recurrentes tocan asuntos como el socialismo del
Siglo XXI, el neoliberalismo, el paquetazo escuálido, las misiones
sociales, la pobreza, la pandemia/corrupción, la renta petrolera, la
democracia, la influencia cubana, la manipulación gringa y la tenaz
inseguridad urbana.
Hay
un aspecto pasmoso que sobresale en la reyerta. Me refiero a
la connotación geopolítica del proceso. El impacto regional y global del
evento es notorio.
En
los lenguajes de la geopolítica Venezuela es una región cardial, área
pivote con potenciales regionales y globales inocultables. Pero no lo es
tanto por un inexistente poderío militar o una vocación
imperialista intrínseca. Es su descomunal riqueza petrolera y minera la
que la convierte en referente clave y decisorio del ámbito Sudamericano e
internacional. En botín predilecto de los poderes mundiales,
representados en las gigantescas multinacionales de los hidrocarburos y
los estados imperialistas del siglo XX.
Con
el declive de los hidrocarburos (pico de Hubbert) y la explosión
entrópica, que nos coloca en el inicio de un nuevo régimen energético de
la civilización, el valor geoestratégico de la patria de Bolivar es
absoluto. Posee las mayores reservas petroleras de la tierra. Ni mas ni
menos.
Un
solo hecho ilustra lo dicho. El salto, en 130 meses, del precio del
barril en el mercado global, desde 9 hasta 160 dolares, ha sido un
verdadero cataclismo para la economía capitalista neoliberal global.
Todo gracias al pujante liderazgo del Presidente Chávez en la
Organización de Paises Exportadores de Petroleo/OPEP, que desde la
crisis de 1973 era manipulada a su antojo por los conglomerados
petroleros mas poderosos, como Exxon Mobil, Royal Dutch Shell, BP,
Chevron, Total, para imponer precios ridículos y tasas abundantes de
oferta en perjuicio de las naciones productoras y sus sociedades.
La
transferencia global de rentas desde el centro imperial hacia la
periferia subdesarrollada permitió apalancar, en los años recientes, el
liderazgo bolivariano en Sur América, el Caribe y
los países árabes, productores de petroleo. Petrocaribe, Alba, Unasur,
Sucre/moneda, apoyos a Cuba frente al bloqueo yanqui, Banca del Sur,
rechazo a la manipulación e injerencia norteamericana en la región
y estímulos a la movilización popular continental, son efectos
incuestionables de la revolución bolivariana.
Un
dato complementario nos permite entender las dimensiones de dicha
geopolítica. El Estado colombiano y el gobierno neoliberal del señor
J.M. Santos, ha tenido, en sus ya largos 24 meses de gestión, una
importante bonanza económica gracias a las espectaculares transferencias
de Ecopetrol, la empresa estatal de hidrocarburos, a las finanzas
centrales de la hacienda pública. El crecimiento del PIB colombiano,
cercano al 6%, en los 7 trimestres recientes, es resultado del buen
momento de los precios del petroleo en el mercado global, que la
diplomacia chavista ha logrado por su firmeza soberana anti
imperialista. Es lo que hizo al sucesor de Uribe Velez mutar a mejor
amigo de Caracas. Tanto amor es por plata, por físico dinero. Y Aún así,
en Bogota, la élite santanderista dominante, persiste en cocinar
intrigas desestabilizadoras contra el régimen Socialista, en complicidad
con Washington y la ultraderecha universal. Así le paga el diablo a
quien bien le sirve.
La geopolítica
venezolana o, más precisamente, el internacionalismo socialista
bolivariano, se recoge en el programa electoral del Presidente Chávez
al plantear convertir, en los próximos años, la patria del Libertador
Simón Bolívar, en una Potencia mundial para la defensa de los pueblos y
explotados del mundo. Compromiso que descarta el candidato derechista opositor
Capriles, en tajante alianza con la retícula expoliadora mundial que lo
patrocina, con una gigantesca lluvia de dólares, y manipula para
retornar al saqueo de la riqueza petrolera.
Chávez geopolitico/internacionalista. Razón de mas para expresarle nuestro apoyo entusiasta y sin vacilaciones.
La duda, confusión y ambigüedad de ciertas almas ingenuas se agrega al acecho del dominio imperial.
Fuerza al
Presidente Hugo Chávez Su triunfo es el de los pueblos oprimidos de
Latinoamerica y el mundo. Es el triunfo de la paz en Colombia.
horacioduquegiraldo@gmail.com
Cucuta, 6 de octubre de 2012.