La crisis mundial es una oportunidad para los pueblos

 Mucho se ha hablado y dicho sobre la crisis financiera originaria, de todas las consecuencias en la economía real en los países desarrollados y sus ramificaciones en el espectro total de los países, en unos más en otros menos, es una crisis que envuelve muchas cosas, pero, la más ignorada e importante para quienes vemos el mundo desde una perspectiva progresista de cambios necesarios y cuya alternativa única es el socialismo, es el deterioro en su manifestación más profunda de la ética y el como se ha sobrellevado el mundo de las finanzas y sus derivaciones hasta llegar al imperio impune del narcotráfico. 

En la literatura económica y los dictados de clase en un aula de cualquier universidad de las tradicionales y privadas, poco o nada se toca acerca del comportamiento honesto y razonable en el manejo de la actividad propiamente productiva y comercial, ignorancia ex profeso, deliberada por quienes como adoquines palmarios se encargan de difundir las teorías de desarrollo del capitalismo tal como lo conocemos, haciendo apología sistemática de las “bondades” del liberalismo primero y el neoliberalismo después, precursores según ellos del progreso y el éxito individual que sumados uno a uno, permitirán resolver el problema de la pobreza, semejantes aseveraciones distan mucho de los resultados que a ojos vista encontramos en la conjunción de la economía y el deterioro actual del sistema capitalista, porque de eso se trata, del germen generado en su propio seno que como un cáncer incurable, pulula sin mediar más allá de la conceptualización económica, tocando en profundidad la constitución humana universal en cuanto al desarrollo equívoco de la espiritualidad y el ser que perdimos para el bien común. 

Es de sopesar cuan profunda es esta crisis, que insistimos no es de la humanidad sino del capitalismo envilecedor que ha colocado  la misma al borde de la histeria colectiva, hacer negocios de manera desmedida y en pronto término es exitoso, no importa por encima de quien pase y dejes en el camino, por ejemplo, a un estudiante de odontología se le instruye de manera descarada que el negocio es hacer prótesis aunque dejes sin dientes sanos al paciente. Es por ello, que la crisis va más allá del simple hecho económico porque ha afectado de manera ostensible la conciencia de la gente en todos los niveles, la acción mediática constante, regular, subliminal en muchos casos, ha sobrellevado una carga difícil de erradicar con simples tratamientos sociales de redención, se hace de suma necesidad enfrentarla con decisión y valentía, sin medias tintas ni discursos paliáticos, y solo es posible si los pueblos toman conciencia real y verdadera de lo que representa el engendro capitalista y la promulgación documentada, acertada y sin extremismos de la alternativa socialista. 
 
No es el fin del capitalismo, transmuta, se convierte en si mismo como la única solución, tan solo que cada vez más se le ve la costura y se le hace más difícil engañar y cambiar para que no cambie, es una tarea, solo que el indio poco a poco entiende otra forma de lucha y es esa la que deben desarrollar los pueblos con buenos gobiernos que le tracen el camino de la libertad económica y social. En nuestro país, ese esfuerzo debe ser de todos los días, afortunadamente contamos con un gobierno honesto que sabe hacia donde debemos ir y que no le tiene miedo al enemigo capitalista representado no solo por el imperio norteamericano, sino además por países europeos y asiáticos, es por ello, que la lucha es de los pueblos, no hay opción, pero la lucha es ya y ahora, lo que impera en la necesidad de reforzar lo ideológico en la creación de un hombre y mujer de nueva estirpe terrenal.   

Repetimos, la crisis es del sistema capitalista que ha envuelto en una vorágine casi interminable al ser humano, que ha afectado a la familia y por ende y por osmosis quizás natural a la sociedad en su conjunto, de tal manera que los pueblos, no la llamada sociedad civil, entelequia creada por los hijos confundidos de esta tierra, para hacer creer que el termino material es la vida, el yo quiero alcanzar lo que tu alcanzaste, el arrastrar el consabido germen del consumismo como régimen superior de vida, cuan ha sido la equivocación que ha conspirado en contra del ser mismo, convirtiendo en sumo social la conciencia individual, la conducta societal y que grupos etarios actúan de manera casi imperceptible bajo la consigna del tener, es el mayor daño infundido a la humanidad, en razón de ello, se hace necesario establecer nuevas pautas de vida, de rescate en la construcción de un nuevo mundo que aliente la honestidad, el trabajo creador y humanista, es por ello, la única instancia que puede revertir toda la madeja de deformaciones de vida, de ilustraciones propias en su conveniencia es el pueblo unido que dados los conceptos de gobierno legítimo en función de tales fines, marche adelante en conjunción de patria.  

De igual manera que, debemos apoyar en el caso nuestro a la Revolución Bolivariana que impulsa la participación de la gente, no solo en voluntad política sino contemplado en la Constitución Nacional y leyes pertinentes, pero al fin y al cabo es el pueblo el que se debe garantizar la continuidad del proceso rumbo al socialismo creador, generando en su propio seno e impulsado por la instancia organizada de la revolución el suficiente contenido ideológico y la formación política. 

rafaelfebles@yahoo.com 



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Rafael Febles Fajardo

Economista. Msc. Seguridad Social. U.C.V.. Militante revolucionario. Locutor. Articulista Correo del Orinoco. Poeta y escritor de la revolución bolivariana

 rafaelfebles@yahoo.com      @rafael_febles

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