MARÍA ALEJANDRA MONAGAS M.
Caracas. Funcionarios policiales que investigan el atentado terrorista contra el fiscal Danilo Anderson allanaron ayer las residencias y las empresas de los hermanos Rolando y Otoniel Guevara, ambos con rango de comisarios y de quienes se afirma (aunque el Gobierno lo niega) ya están detenidos con relación al caso.
Los allanamientos se iniciaron a las 5 am de ayer. Participaron agentes de la Disip y del Cicpc.Alas 9:30 am, los funcionarios realizaron una visita a la empresa Python 357, ubicada en la avenida Venezuela de Bello Monte, propiedad del ex jefe de la División contra Homicidios del Cicpc, Rolando Guevara, y de Juan Carlos Sánchez, quien laboró en en la Policía Judicial. En el lugar localizaron un mapa con la ruta que solía realizar Anderson, así como equipos antimotines, armas de uso deportivo, carnets, documentos, un fusil FN 30, una chaqueta de la Disip, y otra de una escuela norteamericana de explosivistas, parecida a la hallada en la residencia del abogado Antonio López.
Previamente el Cicpc allanó el apartamento de Rolando Guevara en las residencias Morichal, situadas en la calle B de La Alameda. Su esposa, la fiscal Jackeline Sandoval, señaló que en el apartamento no incautaron nada de interés. Dijo que su esposo, de acuerdo a una información, se encuentra detenido y que López le había comprado unas armas.
También allanaron la quinta Mi Tanoa, en El Cafetal, donde residen los padres de Guevara.
De allí se llevaron dos fusiles supuestamente de colección, y una bolsa con balas.
Finalmente, en la tarde se allanó la empresa Galerías Magnum, propiedad de Otoniel Guevara, donde los funcionarios colectaron todos los CPU de las computadoras y algunos otros documentos.
También hubo un procedimiento en la Notaría 39, ubicada en la torre Credicar, Chacaíto.
No se dijo la causa.
Una millonada. La policía investiga una versión, según la cual desde el exterior se canceló la suma de 1 millón 200 mil dólares por el asesinato del fiscal Anderson y otros atentados que tenían previsto realizar.
Se habría hecho un adelanto de dinero por 600 mil dólares.
Trascendió que se interceptó un e-mail que decía: “El árbol está bien plantado, hay que tener fuerza, están deteniendo gente pero no están investigando a un grupo específico”.
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