La incertidumbre es una característica de lo humano, y como queremos evitarla los países y poderosos se valen de los organismos internacionales para llevar a los países pobres hacia laberintos epistemológicos y caminos sin ninguna salida y nos mantenemos en ellos. Eso es evidente en lo económico donde ningún organismo internacional ha ayudado a salir de la pobreza a país conocido.
En Venezuela bajo ataque constante, en el aspecto monetario se ha tratado de resolver los problemas, pero esos mismos ataques impiden encontrar la salida y cuando puede alcanzarse socavan esa posibilidad, como sucedió con nuestro Banco Central donde un grupo de directores minaban las iniciativas y se oponían a ellas, quitándole por lo tanto efectividad durante muchos años, mientras el pueblo espera. Por suerte en este caso el gobierno sustituyo la totalidad de la directiva y coloco a otra más comprometida con el éxito del país.
En vista que vivimos en ese peligro constante de ser atacado, hasta por respirar, en cualquier sistema, no solo en el socialismo que queremos construir, sino en cualquier opción de avance ya sea económico, político o personal debemos contar con estructuras sistémicas fuertes y con capacidad de regeneración y que además sean de fácil comprensión para todos. En ese sentido presentaremos dos opciones de sistemas monetarios uno más conocido que el otro, con propósitos de divulgación. Nos referimos al control de cambio y la caja de conversión.
La caja de conversión (Currency Board) es un régimen monetario de tipo de cambio fijo muy estricto. En este sistema, la autoridad monetaria (generalmente el Banco Central) se compromete a mantener un tipo de cambio fijo e inmutable entre la moneda local y una moneda de reserva extranjera (como el dólar estadounidense o el euro o el yuan chino).
Se respalda el 100% (o incluso más) de la base monetaria (moneda en circulación y depósitos bancarios) con reservas de esa moneda extranjera emitiéndose moneda local solo si tiene el respaldo equivalente en la moneda de reserva. No se puede imprimir dinero discrecionalmente. Si la gente quiere cambiar moneda local por la moneda de reserva, el Banco Central debe tener esas reservas para entregarlas. Si la gente quiere moneda local, el Banco Central la emite solo contra el ingreso de la moneda de reserva.
La Caja de Conversión permite combatir la inflación eficazmente al eliminar la capacidad del gobierno de imprimir dinero sin respaldo generando o recuperando la credibilidad al garantizar la estabilidad monetaria, por lo que el gobierno no puede financiar su gasto imprimiendo dinero, por lo que se ve forzado a ser más disciplinado.
El control de cambios es una medida de política económica que se implementa para regular y restringir el flujo de divisas (moneda extranjera) dentro y fuera del país. Su objetivo principal es la protección de las reservas internacionales y evitar la fuga de capitales.
Con él se busca estabilizar el tipo de cambio manteniendo el valor de la moneda nacional en un nivel determinado y evitar devaluaciones bruscas. También para priorizar y dirigir las divisas disponibles hacia sectores considerados estratégicos (por ejemplo, importación de alimentos, medicinas, etc.), limitando su uso para otros fines (como viajes al exterior o importaciones de lujo). Con el control de cambio se intenta controlar la inflación, aunque su estructura sistémica no lo permite por lo que a menudo tiene el efecto contrario si llega a generar escasez de divisas.
El control de cambios implica que el gobierno (a través del Banco Central u otra entidad designada) se convierte en el único o principal comprador y vendedor de divisas. Las transacciones en moneda extranjera están sujetas a aprobación y a tipos de cambio oficiales fijados por las autoridades. Esto a menudo lleva a múltiples tipos de cambio, con diferentes tasas para distintas actividades (importación, exportación, remesas, viajes).
Entre sus riesgo se encuentran el mercado negro o paralelo, que surge cuando el tipo de cambio oficial está muy por debajo del valor de mercado. También si la demanda supera la oferta al tipo de cambio oficial, generando dificultades para acceder a la moneda extranjera. Venezuela ha tenido y tiene una larga historia de controles de cambio, lo que ha generado muchas de las distorsiones que se observan en su economía.
Características clave que la diferencian la Caja de Conversión del control de cambios. No hay discrecionalidad: La autoridad monetaria no tiene poder para ajustar el tipo de cambio ni para emitir dinero a su antojo. La política monetaria de la moneda de reserva es la que se "importa" de la moneda ancla. Se recupera la libre convertibilidad: Los ciudadanos y empresas tienen la garantía de que pueden cambiar su moneda local por la moneda de reserva al tipo de cambio fijo, sin restricciones significativas.
La caja de conversión y el control de cambios son dos conceptos muy distintos en materia económica y monetaria, que se relacionan con la gestión de las divisas operando con principios y objetivos diferentes. Su uso depende por lo tanto del diagnóstico monetario que se haga y de los objetivos a alcanzar. Desde mi punto de vista creo que la Caja de Conversión es el instrumento que necesitamos aplicar en Venezuela, por las posibilidades que ofrece. Así que la caja de conversión, es un sistema monetario completo que ata la moneda local a una extranjera con un respaldo total, eliminando la capacidad de las autoridades de manipular la emisión monetaria y el tipo de cambio. El control de cambios es una política de restricción para la compra y venta de divisas, que busca manejar una escasez o una situación de vulnerabilidad. Son estrategias con filosofías y resultados muy diferentes.