Una expresión cada vez más usada entre los que pateamos las calles.
Hace un tiempito se escuchaba fuertemente, "No saldré…Si salgo gasto mi gasolina y no puedo gastarla" aún seguimos empleándolo, pero con más frecuencia hoy prestamos oído a "No, no saldré…Si salgo gasto y no puedo gastar…ESTOY incóbrita"
Incóbrita, sin cobres, sin dinero; "No tengo cobres", "No tengo ni un cobrito". Durante el siglo pasado hasta mediados de la década de los 80 aproximadamente, en el sistema monetario venezolano del momento se utilizaba la Puya (el famoso cobrito), cuyo valor eran 5 céntimos, fabricada en cobre o en acero-cobre (acero recubierto de cobre); conjuntamente con "la Locha" cuyo valor era de 12 y medio céntimos; "el Medio" de veinticinco céntimos; "el Real" de 50 céntimos; "el bolívar" de cien céntimos y el Fuerte de cinco bolívares, constituían "los cobres" para el común de la gente sobre todo para el zuliano.
Hoy no tenemos cobres para salir, ni para comprar; ya estamos pagando pasajes aumentados y todos los productos igual, ya aumentados y aún no estamos recibiendo el "ingreso integral" actualizado según emisión presidencial del 30-4-2025; no hablo de sueldo, por lo que veo éste según el concepto que esgrimíamos, tiende a desaparecer, asistiremos o mejor dicho, estamos asistiendo a otras conceptualizaciones y a otras formas de hacer las cosas. Qué es lo más bueno o lo más malo, no sé, tenemos que terminar de mostrar las consideradas buenas o malas intenciones.
Ahora, si la gran masa poblacional está tan limitada para adquirir hasta los productos más básicos, no entiendo cómo aspiramos a progresar o tendremos que cambiar el concepto de progreso y hacia qué grupo social va dirigido. Siento que de nuevo estamos repitiendo el ciclo que tanto daño nos ha hecho: primero aumentan todo, luego aumentan un mínimo tu ingreso y más luego, dado a que te aumentaron el ingreso, se producen otros aumentos en los productos,…No creí que volveríamos (la gran masa) a vivir estas experiencias; por otro lado, retornamos al pasaje especial para la tercera edad, más tarde será, al pasaje estudiantil y al pasaje para los discapacitados; también regresa la fiscalización para que esos mandatos se cumplan, por experiencia sabemos que esas normativas tienen muy poca vida.
Entonces… seguiremos sin cobres para comprar y no salimos para no gastar, por lo que los pequeños emprendedores no tendrán a quien vender. Un círculo no virtuoso.
Así las cosas, estamos contando los cobritos.
