La alta concurrencia de los vecinos en la Consulta de Proyectos Comunales del domingo pasado, resulto un inesperado éxito tanto para el Presidente como para el PSUV, que se movilizó íntegramente para lograr que se contara con la mayor incorporación en este evento. En mi comunidad pudimos observar como acérrimos oponentes a esta gestión hicieron cola para emitir su voto.
Cuando tanto de Maduro como al PSUV se temía que pudieran ir disminuyendo las " pilas y el saldo" entendiéndose a que pudieran tener una disminución en argumentos, recursos, energía, o en la capacidad para continuar con la acción revolucionaria, con estos resultados incrementa notoriamente la capacidad necesaria para seguir adelante o responder a las demandas políticas del proceso en este momento.
Porque no se puede negar que la disminución o la falta de recursos económicos o financieros para llevar a cabo ciertas acciones o proyectos en el país, consecuencia del aislamiento económico al que Estados Unidos quiere someter al país, y elementos de mala gestión de los recursos por parte de innobles y antiguos seguidores han producido una crisis económica que limitan la capacidad de inversión y desarrollo del país.
Se necesitaba por lo tanto tomar medidas que permitieran la consecución de los objetivos del proceso, y una de ellas ha sido la convocatoria a esta consulta popular para reponer las energías, recursos y confianza y para buscar las alternativas que permitan superar los obstáculos, que instala esa dinámica imperialista politico social, tanto en lo nacional como en lo internacional. Resulto efectiva la estrategia como lo demuestra la alta participación de los vecinos en todas las ciudades y pueblos del país.
Estimo que más de un millón de personas que no habían participado en las anteriores consultas, ahora se hicieron presentes con su voto en la que acaba de ocurrir el domingo.
Por eso se puede decir que Nicolás " recargó la pila y el saldo", ya que este evento puede verse como una revitalización, después de una campaña de descrédito bestial de la derecha fascista y no fascista a la que estamos todos sometidos.
Esta revitalización del país, tal como lo dice el propio gobierno, puede observarse en diversas áreas como la economía, la política, la cultura o el desarrollo social, aunque hay muchos sectores populares esperanzados con que les llegue en mayor medida para poder paliar sus difíciles circunstancias. Así, Venezuela, que está pasando por una crisis económica y comienza a experimentar un crecimiento y estabilidad financiera podría empezar a considerarse como "recargada". Para que sea recarga completa es necesario adoptar nuevas políticas o estrategias que mejoren significativamente la calidad de vida de sus ciudadanos, y se pueda decir que estamos "recargados".
El próximo proceso de recarga, además de las elecciones ya programadas, es la Reforma Constitucional, la cual tiene el potencial de revitalizar y renovar revolucionariamente el marco legal y político de Venezuela, adaptándolo a las necesidades y desafíos contemporáneos, frente a las amenazas siempre presentes de los Estados Unidos, que hará lo imposible para frustrar nuestro camino al socialismo.