Un candidato con precio

Me parece aceptable que parte de la clase política esté en desacuerdo con la inhabilitación de María Corina, a mi me desagrada también, pero, y es un PERO con mayúscula, pues entiendo que el Estado debe tener mecanismos de defensa frente a aquellos que pretendan destruirlo de malas maneras, a la brava, como pretendió hacerlo la mentada señora al solicitar una invasión extranjera, apoyó el bloqueo financiero, la aplicación de medidas intervencionistas y hasta afirmó tajante, segura y altanera que Maduro no salía con votos. Es cierto, hay que pasar la página, pero al menos un humilde «me equivoqué» no existe hasta este momento del retorno a la vía electoral. El llamado a la salida trajo muertos, heridos, encarcelados, como Daniel Cevallos, quien convencido por ese llamado a una salida ya, rápida, violenta perdió su cargo, varios años de su juventud y mujer por optar por ese mal paso. Hoy, María Corina no es capaz de asumir que cerraron el camino. La ruta por ese mal camino la vieron los hijos de la hija de la oligarquía por los medios, desde lejos, sin amenazas. Ahora, la dama, sin que una disculpa esté por el medio, le pide apoyo para su candidato.

Por otro lado se pide una transición pacífica , se exige una elección con excelentes condiciones para la oposición, pero nadie de esa clase política opositora, ni siquiera los que fueron compañeros de Nicolás Maduro en los gobiernos de Chávez median para que le quiten el precio a la cabeza del candidato bolivariano. Un Caramelito de 15 millones de dólares no le amarga a nadie, es una verdadera tentación para cualquiera, incluso para alguno de los responsables de la seguridad presidencial.

¿Hay amenazas contra María Corina o es una especulación? La amenaza contra Nicolás Maduro es real, bien pagada y palpable. ¿Por qué a los periodistas no les preocupa esta amenaza?



Esta nota ha sido leída aproximadamente 895 veces.



Pedro Salima


Visite el perfil de Pedro Salima para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Pedro Salima

Pedro Salima

Más artículos de este autor