Sant Roz, Nitu Pérez Osuna y el miedo escuálido a ser libres

Leyendo  sobre  la decisión del presidente Chávez de construir aviones no
 tripulados  para la seguridad y defensa del país, nos topamos con algunas
 opiniones que reflejan bastante bien el pensamiento de los integrantes de
 los dos mundos que habitan Venezuela.

 José Sant Roz expone que los latinoamericanos, antes decisiones como esa,
 nos  llenamos  de  miedo  porque “el imperio se encargó de inculcarnos, a
 machaca  martillo,  que  somos  unos  pobres  diablos,  débiles, tarados,
 irremediables  infelices,  incapaces,  salvajes y brutos. Poco a poco esa
 fue  convirtiéndose  en  la norma para todos nosotros. De manera que como
 imbéciles  y  sometidos  que  somos, según ellos, según ese patrón moral,
 para  todo  debemos  pedir  permiso; consultar al Departamento de Estado;
 para  todo  debemos  primero  conocer  sus opiniones, sus principios, sus
 valoraciones  éticas  en  cuanto  tenga  que  ver  con  cualquier  cambio
 político, con cual decisión sobre nuestro destino”

 En  la  misma  nota, José reconoce el coraje del Presidente para arrancar
 los  velos  de  pavor,  insuficiencia  moral y cobardía,  sembrados en la
 conciencia de los latinoamericanos y al respecto expone:
 “Ese   miedo   atávico  se  dispara  en  nosotros  (no  se  diga  en  los
 ultra-cagones  escuálidos)  cuando  se  habla de que cualquier nación del
 llamado  “tercer  mundo”  intenta,  sin  el  consentimiento  del  imperio
 euro-americano,  construir  sus  propios  radares,  trenes  o sistemas de
 defensa.  Entonces  esas alarmas nos dicen que tales decisiones son actos
 de  locura,  de  bestialidad,  de  irresponsabilidad,  de  salvajismo, de
 violación  de  cuantos  valores  o  derechos  humanos existan y estén por
 descubrirse sobre la tierra.

 Del  mundo  del  escuálidismo nos llamó la atención la escueta opinión de
 Nitú  Pérez  Osuna  quien  en  una  demostración  de esa incapacidad para
 aceptar  que podemos tomar nuestras propias decisiones dejando de lado el
 tutelaje,  escribió  en  su cuenta twitter lo siguiente: “Chávez, los que
 nos  preocupa  es  el hampa en la calle. ¿Esos aviones van a ubicar a los
 malandros, asesinos y secuestradores?”
 

Ya  sabíamos de la incapacidad de Nitú para ir más allá de comentarios de
 ese  tipo,  cuando  de independencia, dignidad y coraje se habla, pero en
 verdad  no  creemos  que  tenga tan poco cerebro, como para pensar que el
 gobierno  no puede hacer ningún tipo de inversión que no sea la destinada
 a acabar con la delincuencia.
 Bueno  es  entonces  que nos preguntemos a qué se debe la posición de una
 “periodista”  que  es muy buena representante del pensamiento y el sentir
 del escualidismo venezolano.

 Sumidos  en  esta  reflexión  nos  topamos  con  una vieja nota, sobre la
 abolición  de  la  esclavitud  (desconocemos  el autor) que desde nuestro
 humilde  punto  de vista, ratifica el planteamiento de Sant Roz y explica
 la  actitud  de Nitu y de quienes viven añorando un pasado de vejaciones,
 fuera del cual no se sienten cómodos.

 La  nota  se titula Proceso de decadencia, abolición de la esclavitud. En
 ella  se expone lo siguiente:  “En 1886 fue abolida la esclavitud en Cuba
 y  más  de  5000  esclavos  pasaron  a  ser  obreros  agrícolas, otros se
 convirtieron  en  campesinos  pobres  que  trabajaban  pequeños palmos de
 tierra  quedando  la  mayoría  de  ellos  sumidos en un total desamparo y
 viviendo   en   una  profunda  miseria,  muchos  ex  –esclavos  siguieron
 trabajando  en las fincas de sus antiguos amos, la incultura, la sumisión
 y la dependencia en que siempre vivieron los obligó, sobre todo a los más
 viejos,  a no querer saber de otro mundo que no fuese el que sus cansados
 ojos y cuerpos estaban acostumbrados a ver y andar”

 Que cada quien saque sus propias conclusiones

arellanoa@pdvsa.com



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Alexis Arellano


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