La Columna de Dante

¡La Asamblea no entiende al pueblo!

Al término de mis primeras sesiones como diputado por el glorioso y amado pueblo de Nueva Esparta, y teniendo en cuenta que el artículo 197 de la Constitución establece que los diputados a la Asamblea Nacional están obligados a cumplir sus labores a dedicación exclusiva, en beneficio de los intereses del pueblo y a mantener una vinculación permanente con sus electores, atendiendo sus opiniones y sugerencias y manteniéndolos informados acerca de su gestión y la de la Asamblea, estoy totalmente persuadido de que esto no se está cumpliendo en su totalidad, pues solo los parlamentarios revolucionarios nos estamos desplegando cada semana a trabajar por nuestros estados.

Los ciudadanos ya se han hartado de debates extensos por materias que terminan siendo declaradas inconstitucionales por las fallas en su redacción y perfil. Mientras tanto, los grandes temas que nos preocupan a todos: abastecimiento, precios, seguridad, ambiente, moneda, etc, no entran en la agenda construida por la mayoría opositora.

He reflexionado extensamente y hoy estoy convencido de que la bancada revolucionaria debe aplicar urgentemente las 3R que nos enseñó el gigante. Revisar: ¿No estaremos siendo cómplices del triste espectáculo y la peleadera de cada sesión? ¿Es útil nuestra presencia en las sesiones dándole marco a los insultos y barbaridades de los diputados de la MUD?

Rectificar: ¿No dejaría de ser tiempo perdido si esas jornadas las dedicáramos a ayudar al Presidente desde nuestros estados y avanzar en el desarrollo de los 14 motores productivos y dejarle vacío el escenario grotesco que ellos tanto disfrutan?

Reimpulsar: Es el momento de las grandes decisiones institucionales. Todo dentro del marco constitucional y con las leyes en mano.

Accionemos con precisión. Propongo que los diputados nos dediquemos de manera exclusiva a apoyar a nuestro Presidente y a los gobernadores enfrentando juntos los problemas, legislando con nuestro pueblo. No malgastemos el poco tiempo que tenemos para encontrar y montar las mejores soluciones para superar las dificultades temporales.

Tenemos la condición para ser puentes fértiles con los ministerios capitalinos. Tenemos que combatir y erradicar el burocratismo estructural que domina la administración y genera grandes focos de corrupción.

Inexorablemente oposición y Gobierno, en la Asamblea, deberemos conversar. Sin gritarnos ni insultarnos. Entendernos. Comprendernos. Y sobre todo escuchar y apoyar a los ciudadanos. Si la Asamblea Nacional no se endereza, en breve estaremos frente a un gran fracaso del que no seremos responsables.

Los abrazo esperanzado.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1826 veces.



Dante Rivas


Visite el perfil de Dante Rivas para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: