Por qué la derrota

Primero por que no entienden ni creerán ni aceptarán que Venezuela y el continente latinoamericano cambiaron.

Luego, por cuanto no admiten que su movimiento de candela y basura quemada, no es un estrategia que halla surgido de alguna forma histórica reconocida lucha social en nuestra sociedad.

Ojalá razonaran que su política del caos y la exacerbación es solo un destilado elitista. Producto de improvisados a quien solo la fortuna o herencia inventaron y luego incrustaron a “billetazo limpio” en la política nacional. Validos de una elite artificial, sin apoyo ni arraigo ni antecedentes políticos y basando su legitimidad en castas que la historia a dejado atrás.

No aceptan, todavía, que la táctica que quieren imponer mediante acciones de calle, que se pretenden ejemplarizantes, es proeza banal. Cuyo objetivo es accionar los núcleos de la emocionalidad de gente con racionalidad tocada por la furia y frustración de quienes mediáticamente los manejan y enferman. Por tanto esto es solo fenómeno que infla emociones, rabia, violencia, pero no suma nuevos militantes, ya que es concebida y dirigida a población de sus habituales iracundos. Al pueblo llano este mensaje y este esquema, no lo conmueve para nada.

Débiles en su manejo estratégico, por cuanto toman como sus actores principalísimos a los estudiantes. Respetables por su mera condición de jóvenes, pero frágiles, por cuanto no poseen idiosincrasia, naturaleza, empatía, calor y fuerza por ahora suficiente para crear nexos afectivos, políticos y asociativos con la gente joven de los extremos Este y Oeste de la ciudad. Este pueblo tiene sus afectos y nexos sociales y culturales y lugar de descanso en un polo geográfico de la ciudad, y en el contrario, su actividad laboral, adonde sienten que por su condición, se les explota, y poco respeta por su origen y domicilio.

Quienes dirigen y canalizan su rabia y furia y fuego diario, poseen su propia biósfera e historia y filiación burguesa. Muy estructuradas con factores y ondas racistas y étnicas que inconscientemente los dominan. De forma qué, buscar acuerdo y acercamiento y asociación con los “diferentes” es peripecia que les debe resultar difícil de concretar; y, eso en política es determinante: se tiene o no se tiene.

Es fácil de observar y medir que debido a sus juramentos de clase es casi imposible y estéril el progreso de esta política que intenta hacerse nacional. Cuando su naturaleza es marca social registrada, por gente de un origen político muy desemejante, a ese mundo que intentan cautivar.

En paralelo al vano esfuerzo, lo que se percibe, es un progresivo decaimiento de esa religión cuya fe en lo colectivo les está negado. Por el tiempo de los tiempos este es camino de cooptación política, para ellos es y será muy árido. De modo que son buenos solo en eso de quemar y hacer humo de basuras detestables.

Todavía no están convencidos, pero el tiempo y solo el tiempo los debe persuadir de que todo ese daño causado por el uso de esta sola vía (plan A y solo A ) es un sacrificio irreparable e insensato para sus mas jóvenes.

Y, mas grave aún, ahora, surge una nueva y extrema y endiablada maniobra: están enrolando sus niños en la locura. Los empujan, en esta campaña que solo le corresponde a los adultos y al ardor de su frustración. Juegan a transferirle a los niños la infausta idea de la emotividad violenta, nacida, al olor de esa monstruosidad llamada Play Statión. Plan de juegos de intimidación para que lo asimilen al “juego” de las guarimbas, un “entretenimiento” a lo Disney, donde hay “buenos” y “malos”. Novedosa reingeniería de la educación familiar adonde las endemoniadas madres tienen la palabra, y apoyo y el transporte y la dotación para que estas criaturas asistan a estas bestialidades a cielo abierto, -eso, si - hasta las cinco de la tarde, hora a la cual pretenden retirarlos al dulce hogar, - a descansar- después de una jornada violenta y odiosa e improductiva en la cual se jugaron a demostrar como se jode a los vecinos y viejos indefensos de Chacao y Altamira, Cafetal y etc..

Su extremismo los ha hecho sumar muchas derrotas electorales; amen de las diarias por huida tonta de los vapores y malos olores que pareciera debe ser el horno en el cual cuajan el pan de su ansiado e imposible triunfo.

Si algo se ha aprendido, -desde la izquierda, inclusive- en estos últimos sesenta años, es que los extremismos en política cuando fijan fechas terminantes (“no nos movemos hasta que renuncie Maduro”; “Esto no dura ni un mes”; “O salen o los sacamos.. es ya”; y, antes RR: “Renuncia Rómulo”, o “Nuestra Guerrilla está a una hora de Caracas.. falta poco”) es babosada y nunca han triunfado, ni antes del 1958 ni después de 1998).

El único camino sensato, racional y político, es que rectifiquen y entiendan que una parte importante de la población, e inclusive muchos de sus lideres y hasta Gobernadores y Alcaldes, no comulgan con la practica de la guarimba y sus sucedáneos, es mas, la declaran ajenas a sus espacios de gobierno.

¿Sabrán que : seguir por este camino del golpismo y el extremismo es lo mas eficaz que pueden hacer para lograr la disolución de sus partidos ?; y, por obvio, nada que decir de ese cascaron vacío que es la MUD, a cuyo entierro, se ha dicho, no van a asistir ni adecos ni copeyanos y menos los estudiantes, ¿quién cargará su catafalco ¿.

Piensen, en este tiempo solo les queda la reflexión y el llamado a la sensatez y el dialogo ……. Y, allí, estamos muchos.


tuliom@cantv.net


Esta nota ha sido leída aproximadamente 2452 veces.



Tulio Monsalve


Visite el perfil de Tulio Monsalve para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Tulio Monsalve

Tulio Monsalve

Más artículos de este autor


Notas relacionadas