El Gordo y su circo

E l asunto del hombre del maletín demostró que el poder de los medios sigue siendo avasallante en el mundo entero, ya que la guerra de Irak, la crisis energética que se avecina y el recalentamiento global se convirtieron en noticias insignificantes frente al susodicho. La tragedia que sufrió Perú fue lo único que apartó por algunas horas a los mass media de su acometida. El hecho de Guido con su platica me dejó unas cuantas reflexiones.

1) En la comitiva de Pdvsa, Antonini Wilson viajaba cargando una maletica con la insignificante suma de casi ochocientos mil dólares. Él no trató de ocultarla. Además –difícilmente– él pasa desapercibido tanto por su contextura como por su vestimenta. Aunque –según parece– se negó a que su paquete fuera revisado, parecía dispuesto a que lo agarraran. Una vez descubierto –sin inmutarse– continuó camino a Montevideo como Pedro por su casa.

2) Antonini con sus dólares aparece justo cuando el Presidente Chávez visita Argentina para tratar importantes acuerdos con el mandatario Néstor Kirchner. Entonces, luce como infiltrado para sabotear la gestión del gobernante venezolano, colocado ahí como la guinda de un pastel. La pretensión es que se deduzca que el Gordo acompaña a Chávez con un dinero que tenía por destino apoyar la campaña electoral de Cristina Kirchner.

3) La captura de Wilson se dio a conocer en plena visita de Chávez a la tierra del tango.

Cualquiera que tenga más de dos neuronas activas en el cerebro deduce que es algo montado ya que, unos días antes, Hugo Chávez había ratificado al ministro Rafael Ramírez.

4) Globovisión, junto a unos cuantos fósiles de la política, aprovechó el incidente del empresario para decir que si Ramírez continuaba en su cargo Chávez amparaba la corrupción. ¿No es sospechoso? Antes el tópico a tratar incansablemente era la delincuencia. Ahora es el supuesto guiso en Pdvsa.

4) Antonini reúne todas las condiciones para ser el dueño del circo. Se le señala de haber vendido armas al Ministerio de la Defensa, entre otras cosillas.

Por lo tanto, se presume que si hace negocios turbios con el Gobierno, seguirá cometiendo robos junto a funcionarios de la petrolera venezolana, pero en Argentina. Luego, que tales asaltos se han venido dando sin que nos diéramos cuenta.

El aprendizaje que deja el acontecimiento es que Chávez y Ramírez deben ser los primeros en combatir cualquier irregularidad en Pdvsa, que habrá de sobra. Aquel que –contra la nación– cometa abusos, por más chavista que aparente ser, deberá pagar por los mismos.

Así, de paso, que muchos oportunistas –que de la boca para afuera apoyan al proceso, pero sólo están aprovechando la situación de bonanza– paguen por sus deslices.

Para curarse en salud, Chávez deberá combatir el mal de la corrupción más que ningún otro flagelo. El mismo ha estado incrustado por décadas. Lo diferente es que en la actualidad no se puede ocultar. Anteriormente –salvo circunstancialmente, como los dólares de Recadi que salieron a la luz pública– unos pocos se enteraban de los chanchullos, mas nunca de sus actores.

isabelrivero70@hotmail.com


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Isabel Rivero De Armas

Licenciada en Letras de la UCV. Estudios en Lingüística y Análisis del discurso. Articulista de opinión de UN de 2002 hasta 2013. En la actualidad, artìculista del Cuatro F, Ciudad Ccs y VEA .

 @isabelrivero70

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