Considero que la compañera Ruth, como mujer y ciudadana, debería revisar la ligereza con que asume la publicación de 6to Poder donde denigra de mujeres venezolanas que ocupan altos cargos públicos. Percibo en su texto que, aún cuando dice que no está "solidarizada con el semanario", en realidad sí lo está, porque afirmar que "desde hace tiempo debía estar bajo atenta observación sobre el rol que está cumpliendo", no es una frase que represente ni siquiera una mínima muestra de desagrado ante las recurrentes violaciones a la ética que ha cometido este peródico ( y no hablo de la ética periodística sino a la ética como principio humano).

En primer lugar compañera Ruth, las mujeres de las cuales denigra 6to Poder, no son,  como decimos los venezolanos "cualquier mujer", y no lo digo porque sean superiores o mejores que cualquiera de nosotras, sino porque son parte de nuestras AUTORIDADES PÚBLICAS, por lo tanto no están en el anonimato, son harto conocidas porque, entre otras "pequeñeces" que tú no ves, toman deciones de Estado, porque forman parte de instituciones del Estado Venezolano. ¿Es difícil de entender esto?

Ahora bien, compañera Ruht, pregunto, ¿sabes qué valores y virtudes deben tener las personas que ocupan cargos públicos?... imagino que sí debes saberlo... pues esos valores y virtudes deben ser percibidos por la ciudadanía, porque constituyen parte del respeto a la autoridad y del cumplimiento a las normas y leyes de la República. El ciudadano común se muestra satisfecho de cumplir con leyes justas pero también necesita sentir que quienes resguardan ese cumplimiento son personas dignas y cumplidoras del deber.

Parte del problema político que tenemos es que se ha desatado una campaña que banaliza y/o descalifica toda Ley emanada de la Revolución, así como el funcionamiento de las instituciones del Estado, porque lo que buscan es crear caos - o al menos la sensación de que el país está en caos-, y esto pasa por salpicar, en esa banalización/descalificación a las autoridades que velan por el cumplimiento de Leyes o dirigen alguna institución.

Por eso la ofensa es inaceptable compañera Ruth, y no se trata de caer en el juego del semanario o no, de darle propaganda o no. ¿Hasta cuándo nuestras autoridades públicas van a aceptar el vilipendio? Los medios que comenten este delito, en primer lugar deberían ser castigados con una compensación -en dinero- bien alta -que les duela-, y algunos y que periodistas deberían ir presos! Están atentando contra la dignidad de la República y de sus autoridades, por lo tanto atentan contra la ciudadanía. Porque, ¿qué pretenden con este tipo de publicaciones? pues que se genere un irrespeto en la mayoría de la población y que se desconozca a la autoridad! ¿Es eso difícil de entender? Como orientadora debería saberlo!

En segundo lugar compañera Ruth, si bien es cierto que quizás el oficio de cabaretera puede ser ejercido dignamente -no juzgo a quien decida ser cabaretera-, lo cierto es que el paralelismo que hace 6to Poder entre nuestras autoridades públicas femeninas y el oficio de cabaretera es una ofensa porque nuestras instituciones públicas no son lugares "..- donde se bebe y se baila y en el que se ofrecen espectáculos..." (DRAE sobre la palabra cabaré). Es decir, la ofensa no es contra las personas sino contra las instituciones. ¿Acaso no lees ni escuchas el permanente cacareo de la oposición porque aquí y que se está violando la "insticionalidad democrática"? La publicación de 6to Poder es una versión perversa de esa descalificación, es un acto delictivo!