"Sueñan las pulgas con comprarse un perro y sueñan los nadies con salir de pobres, que algún mágico día llueva de pronto la buena suerte, que llueva a cántaros la buena suerte; pero la buena suerte no llueve ayer, ni hoy, ni mañana, ni nunca, ni en lloviznita cae del cielo la buena suerte, por mucho que los nadies la llamen y aunque les pique la mano izquierda, o se levanten con el pie derecho, o empiecen el año cambiando de escoba". (Eduardo Galeano).

El 19/06/2022 será un día para no olvidar. Por lo que pasó y por lo que puede pasar. Ese día los nadies hablaron en Colombia y lo hicieron contundentemente. Diría la vicepresidente electa, Francia Márquez, ese mismo día, al referirse al triunfo logrado en fórmula presidencial con Gustavo Petro, lo siguiente: "Esto es por nuestras abuelas y abuelos, las mujeres, los jóvenes, las personas LGTBIQ+, los indígenas, los campesinos, los trabajadores, las víctimas, mi pueblo negro, los que resistieron y los que ya no están... Por toda Colombia. ¡Hoy empezamos a escribir una nueva historia!".

Los nadie salieron en masa a votar, se dice que algunos lo hicieron en mulas, otros en canoas, otros a pie, pero todos lo hicieron motivados con una palabra mágica que estremece los cimientos más robustos del mundo: la esperanza.

Ojalá esa esperanza se vea coronada con realizaciones concretas y, parafraseando a Eduardo Galeano, se entienda, de una vez por toda, que los nadies sí hablan un idioma, que sí hacen arte, que practican cultura y que son seres humanos de carne y hueso y que tienen, cara, rostros, brazos, son más que números y, sobre todo, que tienen dignidad para repartir.

En su discurso de la victoria, el presidente electo Gustavo Petro, adelantó algunas pinceladas de su gestión gubernamental.

Dijo: "no vamos a utilizar el poder en función de destruir al oponente. La oposición, bajo los liderazgos que quieran, sea Uribe, Federico o Rodolfo, será siempre bienvenida en el Palacio de Nariño"; "No vamos a traicionar a ese electorado que le ha gritado al país que a partir de hoy Colombia cambia. No es un cambio para vengarnos, el cambio consiste en dejar el odio atrás; que será el gobierno de la vida, no será para matarnos los unos a los otros, sino amarnos los unos a los otros". También dijo que "el gobierno de la vida, tiene que ver con la paz, la justicia social y la justicia ambiental". Que va "a desarrollar el capitalismo en Colombia. No porque lo adoremos, sino porque tenemos primero que superar la premodernidad, el feudalismo, los nuevos esclavismos"; que irá hacia una "economía popular que pueda fortalecerse a través de la conectividad, la educación, el crédito barato, y de allí saldrán formas de capitalismo que ojalá sean democráticas, productivas y no especuladoras"; y propuso al "gobierno de EEUU y a todos los gobiernos de América" "dialogar sobre los pasos de una economía descarbonizada, los pasos de una economía de la vida en toda América".

Si algo está claro en la próxima gestión gubernamental en Colombia, que comienza el 07/10/2022, es que tienen una tarea ciclópea por delante.

Veamos:

1. Lo más importante: acordarse siempre del giro histórico protagonizado por los nadies de Colombia y que ellos cuestan "mucho más que la bala que los mata".

2. En el libro Un vida, muchas vida, Gustavo Petro habla del amor como impulsor, como un movedor, como un dinamizador, no sólo de pasiones sino de profundos cambios. Seguro estamos que esas palabras las tendrá muy en cuenta a la hora de respóndele al pueblo que lo respaldó.

2. En lo externo. Rescatar la soberanía de Colombia y que las decisiones de ese país se tomen en el Palacio de Nariño y no en la Casa Blanca o el Pentágono. Basta de ser colonia de EEUU. Que el territorio de Colombia no puede ser el aposento de bases militares cuyos propósitos no son precisamente el vivir en paz con sus vecinos y en particular con Venezuela. Que Colombia deje de seguir siendo el "Israel de América"., prestándose para la inestabilidad de la región. Que Colombia debe ser parte de la integración de los pueblos de América Latina y El Caribe y no un bastión de la división como hasta ahora lo ha sido.

La fórmula presidencial ganadora ha prometido:" No vamos a traicionar a ese electorado". Que así sea y amen.