Diada de Catalunya: Movilización, Confusión e Inestabilidad

Como cada 11 de septiembre desde hace ya ocho años, la Diada nacional de Catalunya es un barómetro de lo que ocurre políticamente en la Sociedad catalana. Este año, 2019, era una Diada especial, marcada por las difíciles circunstancias de represión política de los líderes independentistas y por la espera del resultado de un juicio que todo el independentismo y soberanismo ha considerado como un juicio completamente irregular y político.

Así pues, después de ocho años de "procés" de autodeterminación, en medio de la división de los principales partidos políticos del independentismo -Junts per Catalunya, ERC, CUP- y del propio soberanismo de izquierda –dimisiones destacadas en los Comunes y conformación de nuevos partidos como Soberanistas y Nova- el pueblo catalán ha salido a llenar las calles de Barcelona con 600.000 personas.

Sin duda esta movilización extraordinaria y la más importante y sostenida en Europa, indica que el independentismo y soberanismo no se deshincha. No es ni ha sido un "suflé" como tanto les gusta decir a muchos medios de comunicación del Estado español. Catalunya es una nación y para un Estado centralista incapaz de aceptar el concepto de plurinacionalidad, es un "problema de Estado", algo que tanto el PP, Ciudadanos y el PSOE, siempre han negado. Tratando de ignorar la realidad, y basándose en la única premisa del "imperio de la ley", los hechos tozudos, contrastados año tras año, no solo en manifestaciones sino también en elecciones, demuestran que en el Estado español hay naciones que quieren ejercer su derecho a decidir como pueblo y no cederán en ese derecho.

Este es sin duda el principal motivo, el temor de fondo, del porqué ningún gobierno del Estado español ha accedido hasta ahora a aceptar un referéndum de autodeterminación en Catalunya, algo que, según las encuestas de todo tipo, piden el 80% de catalanes para resolver por la vía democrática el litigio. Es el temor a perder el referéndum, a que "España se rompa". Esa es la diferencia con el Reino Unido que aceptó la celebración del referéndum en Escocia.

Sin embargo, lo cierto es que la movilización ha bajado. El año pasado era de un millón de asistentes y en años anteriores había llegado a ser de millón y medio. Hay pues un cierto grado de enfado, de desencanto y, sobre todo, de confusión. A pesar de que el lema con que ha sido convocada la Diada por la principal entidad soberanista , la ANC, era "Objetivo: la independencia", lo que predominó fueron los gritos a favor de la libertad y, concretamente, de la libertad de los presos políticos independentistas y retorno de los refugiados.

La confusión viene de la falta de acuerdo estratégico entre las fuerzas independentistas y de la división política, cada vez más evidente dentro del propio Govern de la Generalitat y de su parálisis para adoptar cualquier medida legislativa, empezando por no aprobación y congelación del presupuesto desde hace dos años.

Es una división política bastante general, que afecta a las derechas y a las izquierdas. Los partidos de derecha en Catalunya son minoría, teniendo a Ciudadanos como principal partido que surgió de ahí precisamente con un discurso anticatalán, propio del Falangismo del siglo pasado (los iniciadores del fascismo español). Sin embargo, el partido del que fuera gobierno español durante años, el PP, cayó estrepitosamente en estas pasadas elecciones generales, obteniendo en Catalunya un solo diputado, igual que la derecha fascista de Vox. Así pues, la campaña contra los derechos nacionales de los catalanes que fue "la estrella" de las elecciones generales para PSOE, PP, Cs y Vox, pero para recoger votos en territorio español. El "trifachito" –PP-Cs-Vox- no tiene ninguna propuesta para Catalunya, a no ser un permanente "estado de excepción": la aplicación del artículo 155 que elimina la autonomía catalana. El PSOE prometió "diálogo", pero no ha cumplido hasta ahora.

En el lado independentista la derecha que gobernó durante 23 años seguidos con Jordi Pujol al frente –ahora imputado por múltiples casos de corrupción de él y sus hijos- está en un proceso de reconversión independentista, dividiéndose y perdiendo apoyo popular a cada elección.

Por su parte la izquierda catalana, después que los Comunes lograran un primer triunfo espectacular en las anteriores elecciones municipales de 2015 y generales en 2016, a costa del partido socialista y superando los independentistas de ERC, el "procés" ha creado una división en la formación entre los partidarios de alianzas con este independentismo de izquierdas (ERC y CUP) y los que prefieren las viejas alianzas con el PSC. Este hecho se ha puesto al desnudo en las elecciones municipales de Barcelona, donde la alcaldesa Ada Colau y sus socios de ICV prefirieron aceptar votos de la derecha para desbancar a ERC (que ganó en votos) y formar gobierno con el PSC, antes que con ERC.

Pero el voto principal de izquierdas ahora lo recoge la moderada y republicana ERC. Tanto a nivel general como municipal, siendo también la principal fuerza votada a nivel de Catalunya, seguida por el PSC, Junts per Catalunya y los Comunes. A nivel de Catalunya ERC aspira a que se hagan elecciones inmediatamente tras la sentencia para recoger así las intenciones de voto que las encuestas le señalan como primer partido a nivel de Catalunya. Evidentemente ese es uno de los motivos de mayor confrontación entre los socios de Govern, ERC y Junts per Catalunya.

Sin embargo ERC no puede gobernar sola Catalunya sin tejer lazos con la izquierda soberanista y las izquierdas españolas dispuestas a escuchar a Catalunya. Alianzas de izquierda y republicanas. Esa es la vía que está explorando un sector de la izquierda soberanista y, destacadamente, Soberanistes. ERC lo sabe y cuida la relación con dirigentes y exdirigentes soberanistas, como Xavier Doménech. Mientras tanto la CUP abre un proceso de reflexión sobre los errores y límites del procés, declarando su distanciamiento con respecto al Govern de coalición de la Generalitat formado por Junts per Catalunya y ERC.

Para terminar, el telón de fondo de la sentencia. Tras un juicio de varios meses trufado de irregularidades y amañado, con policías y altos cargos perjuros, con un presidente del Tribunal claramente decantado, se acerca la hora de la sentencia. En Catalunya todos los partidos e Instituciones cívicas esperan una sentencia dura. Y se espera una reacción popular. Esta situación da un clima de inestabilidad política que impregna no solo Catalunya, sino el conjunto del Estado español.

Ese es uno de los motivos por los que Pedro Sánchez no quiere ceder a Unidas Podemos puestos de responsabilidad a nivel de gobierno. Más allá de que la entrada en un cogobierno con el PSOE sea un error, Sánchez está demostrando sus límites antes incluso de formar gobierno: acatamiento del IBEX35, falta de diálogo con Catalunya, mantenimiento de políticas neoliberales.

Pero dar por amortizada la crisis con Catalunya por el hecho de que hay desorientación, bastante desengaño sobre el "procés" y división partidaria, es uno de los principales errores que han tenido los partidos gobernantes en la capital del reino. Los partidos del régimen monárquico del 78 nunca han entendido la reacción del pueblo catalán ni previeron que el "cepillado" del Estatuto de 2006 traería semejantes movilizaciones durante los años siguientes. Porque nunca han aceptado ni entendido la existencia de un pueblo catalán. Ni vasco. Ni gallego. Es decir, la plurinacionalidad. Sólo la España Una e Indivisible…

Así pues, junto a los aires de recesión económica que llegan con las medidas anti recesivas de Dragui y el enfriamiento de las principales economías europeas, la situación de Catalunya contribuye a la inestabilidad ya que no hay una voluntad de resolver el conflicto político por vías políticas democráticas y de diálogo. Unas nuevas elecciones generales-como parece que busca Sánchez- no harán desaparecer este conflicto.

Alfons Bech

13 de septiembre de 2019



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1128 veces.



Alfons Bech

Militante obrero, y revolucionario marxista. Miembro de de la CCOO, la federación sindical más grande de España. Activista político de L?Aurora y EUiA.

 albech12@gmail.com      @alfonsbech

Visite el perfil de Alfons Bech para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: