Venezuela debe ser objeto de estudio para América Latina

"Yo deseo más que otro alguno ver formar en América la más grande nación del mundo, menos por su extensión y riquezas que por su libertad y gloria"

Simón Bolívar, Carta de Jamaica 1815

Finaliza el Diplomado de la Otra Política que comenzó hace cuatro meses. Y así como les relaté de la conferencia inaugural, deseo también relatarles de un extraordinario diálogo, como Sesión de Clausura, que se dio entre el grande filósofo contemporáneo Enrique Dussel y el ex Vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, acompañando los tres gobiernos de Evo Morales (1).

Todo un lujo de programa, de conversación. Entre dos personalidades sumamente inteligentes, preparadas, formadas, sensibles. Un ejemplo para todos los alumnos del Diplomado organizado por el maestro Dussel, por medio del partido Morena en México, donde funge como Secretario de la Secretaría de Formación y Educación.

Ambos personajes revisaron, sentados en medio de un jardín coloreado por tantas flores, la Segunda Ola de los Gobiernos progresistas. Interesante tema de reflexión que, según palabras del mismo Dussel, no ha sido todavía analizado en el conjunto de los países, como un solo bloque de izquierdas, en Latino América.

El maestro Dussel explica que la Primera Ola de gobiernos progresistas en Latino América comenzó con Hugo Chávez en 1999, y es evidente que Chávez impulsó las ideas bolivarianas desde Venezuela hacia toda la región.

Tan es así que la ola progresista fue seguida por Lula da Silva en Brasil, por Rafael Correa en Ecuador, por Evo Morales en Bolivia, por los Kirchner en Argentina, Tabaré Vásquez y Pepe Mujica en Uruguay.

Luego de una serie de gobiernos que representaron la contra oleada conservadora, Argentina con Macri, Brasil con Bolsonaro, Ecuador con Moreno y Lasso, en Bolivia con el golpe de estado de 2019, señala el maestro Dussel que la Segunda Ola se inicia en México, con la toma del poder en 2018 por Andrés López Obrador, seguido por Argentina, la recuperación del poder en Bolivia por Luis Arce y su partido MAS, el nuevo Presidente de Perú Pedro Castillo y, recientemente, en Honduras la victoria de Xiomara Castro, esposa del depuesto ex presidente Mel Zelaya en 2009.

Pero también están esperando ansiosamente, como todos de hecho, las elecciones en Brasil y el retorno de Lula Da Silva en 2022. Brasil, prácticamente un continente él solo, empujaría la región hacia el progresismo, al neutralizar gran parte de la contra oleada de la derecha, en este caso el desastre que representó Jair Bolsonaro.

Me pregunto yo, como siempre inocentemente: ¿dónde queda en toda esta reflexión nuestra Venezuela? ¿Y su Gobierno Bolivariano de índole socialista? Socialismo del siglo XXl, con nuestras propias características, en su concepción, como norte, trabajando para ello cuando le es posible. Nuestro gobierno bolivariano debe ser considerado definitivamente progresista pues persigue el progreso de la población, la igualdad a través de la distribución de las riquezas.

El Gobierno Bolivariano empezó la primera ola en 1999 pero ya estamos en la segunda, tercera, cuarta. Digo yo. Porque nos ha pasado de todo lo que señala García Linera como diferencias con la Primera Ola: los líderes de esta Segunda Ola ya no son tan carismáticos ni efervescentes como en la Primera Ola, sino más bien, son presidentes de corte administrativo, que no pretenden destruir todas las viejas estructuras, sino cambiarlas, transformarlas. Claramente es el caso del Presidente de México.

Otra diferencia que esgrime es que el sector conservador de la derecha, que se oponía a los varios gobiernos durante la Primera Ola, fue sorprendido y desmoralizado por los grandes y rápidos avances de la izquierda.

En esta oportunidad, de la oposición a los gobiernos que se montan cual surfistas en la Segunda Ola, la derecha ya está preparada, anda alerta en las calles, se ha vuelto más agresiva, más autoritaria y ya no oculta sus verdaderas intenciones de recuperar el poder como sea, sin democracia ni miramientos de parecerlo. Esto está ocurriendo aun si estos sectores conservadores, no presentan siquiera un proyecto de trabajo político para reemplazar el existente. Es una oposición en bloque, a ultranza, así no más. A sabiendas de que el neoliberalismo está entrando en una etapa final y que, definitivamente, luego de la pandemia, ya no representa una doctrina hegemónica.

Como tercera diferencia, reflexionan ambos académicos sobre la temporalidad y lo que podrían durar los gobiernos progresistas de la izquierda en esta segunda oleada, recordando que, durante la Primera Ola, existieron quince años de estabilidad política y de "libertad progresista".

Varios factores juegan para la durabilidad de estos gobiernos de izquierda en la región, tales como la resolución de los problemas que quedaron sin resolver desde la Primera Ola, pues si bien se enfocaron en el socialismo y en la redistribución de la riqueza, no fueron capaces, o no tuvieron tiempo, de cambiar el modo de producción de los excedentes, permaneciendo atados, indudablemente, al modelo capitalista.

Apreciados lectores, ¿no les parece una excelente disertación? Yo la disfruté mucho pues necesito, como creo todos, entender las causas y consecuencias de lo que nos estaría ocurriendo.

Por otra parte, continúan ellos, la sostenibilidad de estos gobiernos progresistas de la Segunda Ola, debe obligatoriamente pasar por demostrar que son capaces de realizar una buena gestión administrativa.

Reflexiona García Linera: mientras éramos oposición, era importante la fuerza discursiva, al ofrecer los cambios para un nuevo horizonte más cónsono con las necesidades de la población, en cuanto a tener una vida digna con todo lo que esa palabra representa. Una vez en el poder, ya no oposición, esos horizontes ofrecidos, pregonados, no deberán ser una promesa sino una realidad. Para ello los nuevos gobiernos de izquierda deben ejercer una óptima capacidad de gestión y demostrar que pueden hacerlo mejor que los gobiernos de derecha que los precedieron.

Álvaro García Linera continúa señalando que estos gobiernos progresistas de nuestra América, necesitan disponer de una estructura político administrativa íntegra. No sólo se refiere a la integridad moral del Presidente de un país sino a la ética imperante en su equipo de trabajo, a los cuadros gerenciales medios, a aquellos que administran. Y pregona la gran necesidad de tener un Estado de gran altura moral, entiendo yo como condición sine qua non, para asegurar que los varios gobiernos de la Segunda Ola tengan una larga permanencia de tiempo.

¿No estaba hace muy pocos días el Presidente Nicolás Maduro clamando por una depuración en las instituciones? ¿Por cuántos errores, de personajes adscritos al chavismo rojo rojito, hemos pasado?

Apreciados lectores, si sólo una petición pueda yo sugerirles a estos maravillosos expositores de la charla comentada, es que no dejen de observar a Venezuela. Deben tomar en cuenta las proezas que está haciendo el gobierno siempre bolivariano, para resistir a todas las agresiones que llegan tanto de Estados Unidos como de sus lacayos de la Unión Europea.

Entiendo que ya ustedes no quieren saber de sanciones pues nos hemos repetido mucho. Difícil, imposible ignorarlas. Sólo me permito recomendarles en esta oportunidad, el libro de William Castillo, que desde nuestra realidad, analiza cronológicamente de forma cuantitativa y cualitativa el enorme daño al país debido a este bloqueo criminal al que lo tienen sometido (2).

Sugeriría muy respetuosamente a estos ilustres expositores, sobre todo al maestro Dussel para próximos cursos de filosofía política, observar y analizar en profundidad los cambios en la política económica a las que se ha visto obligado el Gobierno de Nicolás Maduro. Todo ello para satisfacer las necesidades de la población.

Es un pueblo que lo acompaña desde los tiempos de Chávez, y continúa prestándole su respaldo como pudimos apreciar en las últimas elecciones de gobernadores y alcaldes, donde el oficialismo ganó 19 de 23 Gobernaciones (aun pendiente la de Barinas) y ganó 205 de 322 Alcaldías. Nicolás Maduro ha sido además reconocido recientemente en la ONU, como Presidente legítimo de la República Bolivariana de Venezuela en la ONU por 193 países. Únicamente Estados Unidos más 15 lo desconocen (3).

Pero como le gusta enfatizar a mi amigo secreto Diogenes, con la próxima instalación del Gobierno de Honduras, serían sólo 14 países lacayos del Imperio que no reconozcan a la legitimidad del Gobierno Bolivariano presidido por Nicolás Maduro.

Les sugeriría como todo respeto, que estudien a nuestro país, y las respuestas que ha habido debido a las tantas y continuas agresiones. Al igual que Cuba que lleva más de sesenta años resistiendo, pero con una gran diferencia: Venezuela tiene inmensas riquezas que necesita Estados Unidos y los países aliados. Nos tienen en la mira particularmente porque nuestro país tiene la principal reserva de petróleo en el mundo. Pero no sólo, minerales y metales de gran aplicabilidad. Nuestro oro, usado desde tiempos inmemorables en el mundo entero (menos en Estados Unidos, por cierto) como respaldo de los papeles que se queman, desaparecen, que no sirven para nada. Tampoco hay que olvidar los grandes depósitos de agua, nuestro oro azul, y la inmensa biodiversidad genética de nuestra región.

No estaría nada mal, más bien si muy necesario, analizar y difundir la información sobre Venezuela, cosa que no se está haciendo en estos cursos de alto nivel de filosofía política, como este Diplomado de indudable valor. Es necesario para que los gobiernos progresistas de la región, estos de la Segunda Ola, y los que estén por sumarse, pongan sus barbas en remojo, pues más vale prevenir que lamentar.

Venezuela es ejemplo actual de gran resistencia y permanencia en la segunda, tercera y hasta cuarta ola. El estudio de nuestro país debería ser contemplado sin lugar a dudas en los próximos cursos, como un tema especial, único.

Apreciados lectores que me leen, por mi parte, me di un gustazo en la tarea de realizar todas las evaluaciones usando el ejemplo de lo que ocurre en Venezuela, aplicando los conceptos adquiridos de la Filosofía de la Liberación.

Y mi amigo secreto Diogenes colaboró mucho conmigo al explicarme los conceptos de filosofía que, por mi formación de científica bióloga, me fueron en su momento, difíciles de entender.

Y cuan agradecida estoy al Maestro Dussel, a los expositores y a los jóvenes organizadores del Diplomado, al habernos brindado generosamente, sin costo alguno, pero si con gran calidad, esa multiplicidad de conocimiento que nos enriquece y nos obliga a continuar, esta vez no solo formándonos, sino aplicándolo donde sea necesario, en nuestra Patria Grande.

  1. https://youtu.be/sSQThzaet5Q

  2. http://www.minci.gob.ve/wp-content/uploads/2021/11/2-Cronologi%CC%81a-de-las-medidas-coercitivas-contra-Venezuela-.pdf

  3. http://www.mppef.gob.ve/onu-reconoce-al-presidente-maduro-como-representante-legitimo-de-venezuela/



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Flavia Riggione

Profesora e investigadora (J) Titular de la UCV.

 flaviariggione@hotmail.com

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