El nuestro es un proyecto que se inscribe en la bandera de Simón Rodríguez, donde la educación es un derecho humano fundamental, el nuestro es un proyecto socialista que garantiza educación gratuita, y de calidad para todos" Hugo Chávez. (*)

"El presidente Nicolás Maduro adelantó que su administración tiene contemplado recomenzar las actividades estudiantiles presenciales, en todos los niveles, a partir del próximo mes de marzo. "Dentro de poco, en marzo, vamos a arrancar las clases presenciales y parciales, con medidas de bioseguridad, en todo el sistema educativo venezolano. Vamos controlando la pandemia y con medidas de bioseguridad y la llegada de vacunas, vamos paso a paso". Maduro no especificó qué día exactamente sería ese retorno a las aulas ni si ya su Ministerio de Educación tiene previsto un cronograma de adecuación de escuelas, liceos o universidades, tomando en cuenta que quedan apenas dos semanas para que llegue marzo". https://www.eluniversal.com/politica/90411/presidente-maduro-anuncia-para-marzo-clases-presenciales.

Lo cierto es que luego de un año de declarada la pandemia, las cuarentenas radicales y flexibilizadas, el cierre de todas las instituciones educativas, no será nada fácil retomar las actividades en la llamada "nueva normalidad", por los problemas que se siguen presentando en esta área tan sensible para millones de venezolanos y venezolanas vinculadas directamente a ella (docentes, personal administrativo, obrero, estudiantes y familiares. Este es el enorme reto que tienen ante sí los ministros Aristóbulo Istúriz y César Trompiz, puesto que el reinicio de las actividades presenciales, así sea de manera parcial, va mas allá de las medidas de bio-seguridad que es necesario mantener.

En un breve diagnóstico encontramos que las escuelas, liceos y universidades están en precarias condiciones de infraestructura física, socavadas, semidestruidas por la acción del hampa, el abandono de las mismas, de sus autoridades y del propio gobierno. Su equipamiento tecnológico también ha sido fuertemente afectado tanto por la obsolescencia de las mismas, como por los robos, destrucción, deterioro. Los servicios públicos que las alimentan también brillan por su ausencia (agua potable, electricidad, aguas servidas, aseo urbano, telefonía, transporte) y problemas asociados a los anteriores.

De allí que este tema debe ser abordado de manera integral y que los actores sociales involucrados se abran a un diálogo amplio, profundo y productivo que tenga como centre los estudiantes, a fin de que éstos no sigan perdiendo parte de su valioso tiempo

Ante esto, ya habíamos publicado algunas consideraciones que abordan el tema educativo y las opciones a tomar en cuenta para su reanudación en condiciones mínimas (por ahora, no podemos aspirar a que sean óptimas por la realidad que vivimos en Venezuela). https://www.aporrea.org/educacion/a299002.html.

Por ello hablábamos de que en las instituciones de educación nos encontramos con:

• Problemas graves con el servicio de electricidad, recursos, teléfonos con acceso a internet.

• En la práctica, son los docentes quienes están financiando la educación, en virtud de que son quienes pagan el acceso a Internet, cada vez más costoso y complicado (el caso de ABA-CANTV es patético, de haber abanderado la conexión a mi les de venezolanos. ahora es un atentado a la tranquilidad de la gente) es decir, la conectividad necesaria para generar la comunicación con los estudiantes.

• Las limitaciones del transporte púbico, que se encarece y escasea cada vez más, lo que dificulta la movilidad desde los hogares hasta los centros educativos y viceversa, cuando se hace necesario asistir.

• La agudización de la crisis económica, sobre todo a lo atinente a la precariedad salarial de los trabajadores y trabajadoras de la educación que en promedio, apenas llegan a 3 dólares mensuales para acceder a la adquisición de productos alimenticios, del hogar y personales.

• La base material de los trabajadores de la educación está seriamente afectada, se ha llegado a unos niveles tales que los profesores han debido dedicarse a dos o tres actividades adicionales para apenas sobrevivir a las duras condiciones de vida que en la actualidad tienen y eso para un dirigente de la educación debe ser de alta preocupación y por supuesto, dar lugar a la ocupación, es decir, tomar decisiones para solventar los problemas

• Ante estas situaciones que afectan decisivamente a todos los trabajadores que dependemos de un sueldo y más específicamente a los de la Administración Pública y particularmente a quienes estamos en la esfera educativa planteamos las siguientes opciones al presidente, a los ministros y decisores, si es que tienen VOLUNTAD POLÍTICA de resolver los problemas que confrontamos:

• SE DEBE, ES IMPOSTERGABLE, ES URGENTE REALIZAR UN AUMENTO SUSTANCIAL DEL SUELDO DE LOS TRABAJADORES DE LA EDUCACIÓN. Un ingreso integral que permita al menos recuperar la calidad de vida de quienes se dedican a la hermosa y noble tarea de formar en el presenta a las generaciones del futuro y garantizar la formación de ciudadanos útiles a la Patria, así como evitar que continúe la migración de enormes contingentes de jóvenes y adultos con alto nivel académico hacia el exterior, privando a Venezuela de esos talentos. ES decir, honrar lo establecido en el artículo 91 de la CRBV. El ministro de Educación hace poco declaraba que "Habrá sorpresas para los docentes en esta semana, por ser el próximo viernes 15 el Día del Maestro y que se "trabaja arduamente para mejorar los ingresos y consolidar el salario de todos los trabajadores del sector educación" https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/mas-vida/anuncian-sorpresas-para-maestros-en-su-semana/. Sin embargo pasó el día del Educador y no hubo ningún tipo de anuncio acerca del tema. ¡Otra decepción más generada por Aristóbulo para el sector educativo!

• Se debe realizar una inversión importantísima en materia de infraestructura física para poner al día estas instituciones: Construir, remodelar, restaurar, adecuar, desmalezar, pintar. En fin, todo lo cual requiere la participación entusiasta de todos los sectores que rodean lo educativo: el gobierno, las comunidades educativas, las empresas y demás interesados (as)

• Se debe dotar a los estudiantes y a las familias del acceso a internet, se pueden crear zonas "Wifi" libre y gratuito para los estudiantes, aumentar el ancho de banda, liberar el "Wifi" con fines educativos, tal como se había hecho en la gestión del ministro Manuel Fernández; el Gobierno ha repartido millones de computadoras portátiles y tablets "Canaimas", pero éstas no están automáticamente conectadas a internet.

• Es necesario dotar a los docentes de teléfonos "inteligentes" con conexión a internet para facilitar su labor, sobre todo cuando la inmensa mayoría del magisterio sólo se preparó para la modalidad presencial.

• Subsidiar directamente, o llegar a acuerdo con las empresas proveedoras de servicios comunicacionales para que los docentes tengan acceso gratuito a este importante servicio, vital sobre todo si queremos mantener la educación a distancia, o continuar luego con la bimodalidad.

• Por supuesto, se debe recomponer los servicios estudiantiles que el neoliberalismo había intentado eliminar durante los últimos diez años de gobierno "cuartorrepublicanos" y que el Comandante Hugo Chávez recuperó como el sistema de becas, ayudantías, comedores estudiantiles, el transporte para las instituciones educativas, sobre todo el sector universitario, las políticas de desarrollo estudiantil y sistemas de seguridad social integral para los trabajadores del sector educativo.

Entendemos que es una tarea ciclópea la que se debe acometer, pero nuestra Patria y la juventud que en ella se forma valen la pena. Para eso se hace una Revolución humanista, incluyente y en función primordialmente de nuestro pueblo tan duramente castigado en los últimos años. Sólo de esa manera cumpliremos los postulados bolivarianos y robinsonianos sobre la educación, así como el legado del Comandante Hugo Chávez que tanto soñó, luchó y obró por la educación como herramienta de transformación social y elemento clave para la redención humana.