LA HUELGA DE HAMBRE es (o fue?) uno de los instrumentos de lucha más serios y de mayor respetabilidad de la historia de la humanidad, es una de las muchas medidas de presión que distintos sectores sociales y/o víctimas de injusticias o impunidad han utilizado a lo largo de la historia, para que sus demandas sean atendidas ya sea por instituciones privadas o estatales.
La Real Academia Española en 1956 define la huelga de hambre como: “Abstinencia total de alimentos que se impone a sí misma una persona mostrando de este modo su decisión incluso de morir si no consigue lo que pretende”.
Desde la primera huelga de hambre, ocurrida en el año 1166 A.C en Egipto cuando los trabajadores del emperador Ramsés III (XX dinastía) traspasaron los muros de la necrópolis (se pusieron en huelga) diciendo: ‘Tenemos hambre, han pasado 18 días de este mes… hemos venido aquí empujados por el hambre y por la sed; no tenemos vestidos, ni grasa, ni pescado, ni legumbres. Escriban esto al faraón, nuestro buen señor y al visir nuestro jefe, que nos den nuestro sustento.
No hay duda de que aquella primera huelga sentó un precedente histórico de enorme importancia en la historia del trabajo y de la organización obrera. Por primera vez en la historia, los trabajadores conseguían hacerse oír por medio de la paralización de sus actividades, haciendo uso de un instrumento empleado innumerables veces sobre todo durante la era industrial (desde el Siglo XIX).
Pasando por la de Mahatma Ganhdi quien ayunó durante largos periodos en diversas ocasiones. En septiembre de 1932, mientras estaba en la cárcel, llevó un ayuno hasta casi la muerte para mejorar la situación de la casta de los intocables. Los británicos, al permitir que los intocables fueran excluidos del electorado indio, estaban, según Gandhi, cometiendo una injusticia. Aunque el mismo era miembro de la casta vaisya (mercaderes), Gandhi se consideraba el gran líder del movimiento indio que tenía como finalidad la erradicación de la injusticia social y económica del sistema de castas. Luego El 13 de enero de 1948, inició otra huelga de hambre en Nueva Delhi para tratar de instaurar la paz. El 30 de enero, doce días después de acabado aquel ayuno, fue asesinado por Vinayak Natura Godse, un miembro de un grupo extremista hindú, mientras se dirigía a su habitual rezo de la tarde.
La de Bobby Sands donde después de 66 días de ayuno le sobrevino la muerte, Sands comenzó su primera huelga de hambre el 27 de octubre de 1980 porque los presos del IRA reclamaban ciertos derechos con respecto al resto de los presos irlandeses, y la terminó el 18 de diciembre de ese mismo año.
De igual manera la huelga de hambre de Domitila Chungara y las cuatro mujeres mineras que encabezaron la medida para conseguir que el entonces presidente de facto, Hugo Banzer Suárez, llamara a elecciones generales en 1978.
En definitiva, es verdaderamente lamentable y reprochable que estos “hijitos de papá”, estos “zagaletones”, estos “Yupies” y/o manipulados sin vergüenzas (según sea el caso) hayan desnaturalizado algo tan serio pues toca (o tocaba?) el derecho más importante de todos, como lo es el derecho a la vida, y de cómo han logrado prostituir por capricho uno de los instrumentos de lucha más antiguos y de mayor honorabilidad como lo es LA HUELGA DE HAMBRE.
Por eso están como están!!!
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