Yo, Juan Veroes, de 85 años de edad, caraqueño de nacimiento, viviendo en la ciudad de Mérida desde hace 40; quiero dejar constancia escrita de lo que percibo en el ambiente donde vivo desde hace varios años. Si el que lea esto se siente afectado, ese es su problema. Tengo todo el derecho de expresar lo que siento y pienso y corro con las consecuencias que eso acarrea.
Yo no sé si en toda Venezuela sucede lo mismo, pero aquí en Merida, la ciudad que le otorgó el título de "EL LIBERTADOR" al ciudadano caraqueño que llevaba el nombre de Simón Santana Bolívar de la Santísima Trinidad, Palacios Ponte y Blanco, cuando por aquí paso durante La CAMPAÑA ADMIRABLE, la cual culminó con la derrota de El Ejercito Realista y la Formación de la Gran Colombia no es la misma; la gente que aquí ahora vive, no quiere ni nombrarlo. Y eso que estoy afirmando se siente cuando uno trata de pagar algún servicio o mercancía con billetes que llevan su esfinge. La figura de Bolívar está tan devaluada y desprestigiada, que la gran mayoría de los que aquí viven, solo aceptan con agrado los billetes que tienen estampados la esfinge de personas de origen norteamericano. Ningún negocio coloca los precios de sus mercancía o productos en bolívares, todos lo hacen en dólares y colocan la cotización del BCV por obligación o miedo de ser multados. Para más vaina los bancos que funcionan en la ciudad, solamente les dan a sus pocos clientes que van a buscar bolívares, billetes de baja denominación de bolívares 5, 10 y 20; haciendo más tedioso el tener que pagar o comprar cualquier cosa. La cara que ponen las cajeras cuando uno tiene que sacar varias pacas de billetes para pagar mil bolívares es de película. Cuando te preguntan si vas a pagar en EFECTIVO (Dólares), abres la cartera y FLORAN LOS BILLETES VERDES . entonces el rostro se les ilumina y les aflora una sonrisa que no pueden disimular.
Dentro de pocos días (17 de diciembre) se estarán cumpliendo 195 años de haber muerto tuberculoso en Santa Marta, esperando un barco que lo sacara de allí, pues no podía entrar ni a Bogotá ni a Caracas El único Ser Humano, que mereció, se le reconoció y se le dió el título de EL LIBERTADOR y eso lo hizo la municipalidad de la actual capital del ESTADO BOLIVARIANO DE MERIDA, no podía entrar en las Naciones que había liberado. Actualmente, la que le concedió el título de EL LIBERTADOR, no lo quiere ver ni en pinturas. Ese día fue decretado como de duelo nacional y es no laborable. Las autoridades de todo el país tienen la costumbre de llevarle flores a las estatuas levantadas en todos los 335 municipios del país y a sus restos que reposan en El Panteón Nacional ubicado en la capital de la Republica . En Mérida, si este año lo hacen, será porque los obligaran desde Caracas.
A los que seguramente se escandalizaran, por lo que hasta aquí han leído, los reto para que hagan una campaña que pueda desmentirme para hacer que todos los habitantes de Mérida, durante ese día (17 de diciembre) solamente usen los billetes donde aparece la esfinge de Simón Bolívar para hacer todas sus operaciones de pagos, compra y venta y obligar a los comerciantes a que coloquen los precios en bolívares y nó en dólares.
Me imagino que alguno de mis antiguos lectores se extrañará de encontrar este articulo mío en esta página web, pues yo me había despedido como escribidor y a mis 85 años de edad ya era suficiente, pero cada vez que veo mi título colgado en la pared de Politólogo, graduado Cumlaude en la ULA y el de Magister en Pedagogía Alternativa en la UPTM-Kleber Ramírez y saber que soy el único negro venezolano mayor de 85 años que está en capacidad de hacerlo, pienso que a mi estadía en este mundo le falta algo por hacer y por eso eché para atrás mi decisión anterior de no escribir más. Si alguien se siente afectado por eso, que no me lea o proteste. La decisión que tome es respetable.
Ahí les dejo eso y recuerden que la humilde Negra que me parió y hace 49 años me dejó solo en este mundo, no es culpable de lo que yo haga o deje de hacer. Así que por favor les pido no se metan con ella.