¡Respuesta incorrecta!

La que me dieron de la junta directiva del Centro Italiano Venezolano, aquí en Caracas, al evento sucedido en días pasados y sobre el cual les conté (1). Ciertamente no les envié el artículo publicado en aporrea.org. Algo parecido obviando a Diosdado y su "polizzia", al gobierno italiano de Meloni y su comportamiento fascista e indiferente hacia los niños en Gaza, vendiéndoles armas y apoyando a Israel. Nada de eso. Lo esencial, de manera elegante.

Apreciados lectores que me hacen el honor de leerme, para nada quiero abusar de su gentileza al seguir comentando sobre un caso particular. ¡El hecho que no es únicamente mío! Lo que me sucedió debe pasarles a muchas personas en la misma situación en que yo me encontraba. Tan es así, que en algún momento, alguien de la Junta Directiva me confesó que, si mal no recuerdo, aproximadamente el veinticinco por ciento de los socios estaban insolventes, sin capacidad de cancelar las cuotas mensuales y a punto de perder la acción de la que dispone el club para rematarla. Pero, al parecer, tampoco la directiva tiene mucha suerte en ello, visto que el posible adquirente, además de costear la acción supuestamente en remate, debe cancelar un gasto de traspaso altísimo, y, además, pagar todo el año por adelantado. Ahh, pero si en algún momento de ese año, como ha pasado últimamente, se decide incrementar el monto en dólares mensuales (para contrarrestar el efecto entre dólar paralelo y dólar central) no quedará fuera de ese incremento. Por mucho que se haya bajado los pantalones, entregado la cartera y adelantado todo el año.

Los señores de la Junta Directiva, muy lindos ellos con copete de latín lover y comportamiento de guapo napolitano, (anoche me veía la película, siempre italiana, Los Guapos con Claudia Cardinale, Franco Nero y Fabio Testi, 2) "lamentan profundamente el desagradable momento que experimenté al intentar ingresar a las instalaciones del Centro Italiano…Comprendemos su frustración pero los vigilantes están entrenados (¿cual perros de Pávlov?) para impedir el acceso a aquellos socios insolventes por cuanto está en los estatutos del club. Si hubiese pagado a tiempo no le hubiera sucedido, las puertas estarían abiertas. Por cierto, estos son los números de cuenta donde deberá depositar a la brevedad posible.

Recuerde que el centro italiano construyó una caseta especial en la misma entrada del club, donde los socios insolventes podrán pagar", sin darnos el problema de ingresar al edificio central y luego, de escondido, tal vez disfrutar de las instalaciones sin hacer el pago. Claro, tenemos cámaras en varios sitios, que hacen la función de los vigilantes (perros de Pávlov) pero siendo tan extensas las áreas, es posible que se nos escape alguno. Así, si desea pagar directamente en el club, recuerde que no se le permitirá pagar adentro donde realizará sus trámites, sino debe detenerse fuera. ¡Pues por eso se construyó la caseta en el ingreso!

También estimada socia, si necesita ir a Registro y Control, pida una cita a estos números telefónicos… No podrá ser atendida sin este requisito burocrático. No importa que ese personal está siendo pagado por las cuotas de los socios y, además, esté todo el día ahí sin tener mucho trabajo. Pero somos importantes, debemos poner un freno, limitar las iniciativas de los socios, no importa si una madre tiene problema de horario, si tienen hijos pequeños que dejar con alguna vecina para venir hacer el trámite, no importa si lloran por su ausencia. No importa si no tiene vehículo y le están, justo en ese momento, dando una colita. Mas bien, muchas gracias por no traerlos pues en las oficinas administrativas no deben estar infantes llorosos.

Apreciados lectores, si no pago, así sea un solo mes atrasado, no entro. Simplemente. No importará la situación personal, la jubilación de aproximadamente cincuenta dólares mensuales. Además, habiendo impartido clases de Fisiología a miles de estudiantes de Medicina en la UCV durante veinticuatro años, ahora, este jueves deberé bajarme de la mula con ciento veinte dólares para la consulta con el endocrinólogo, o el equivalente a ciento cincuenta si acaso pago en bolívares al BCV. (En otro momento escribiré sobre "La clase media en decadencia").

En la respuesta de estos exquisitos señores de la Junta Directiva no aparece ningún asomo de acercamiento a nuestra situación personal. A pesar de haber mi sobrina costeado ocho meses de la mensualidad, sin poder usarla, sin yo poder usarla, solo con la finalidad que no rematen mi acción. Este pequeño dato no les importa a ellos. Solo el ingreso monetario es lo que cuenta.

Tal como siempre le respondo a un amigo cuando me aporta la respuesta incorrecta, trataré de considerar para ustedes, y para mí, lo que creo sería la respuesta correcta:

Al lamentar profundamente la situación ocurrida al querer usted ingresar en nuestras instalaciones, queremos conversar personalmente con usted para comprender su situación en este momento. Como hija de un socio fundador, queremos acercarnos a sus necesidades en lo posible, y tomar en cuenta las circunstancias especiales que ahora la afectan.

Precisamente el cobro de vallas publicitarias dentro de las instalaciones de éste su club italiano, es para ayudar y apoyar solidariamente aquellos socios que se encuentren en una situación especial y desean, no obstante, hacer uso de las instalaciones del centro italiano venezolano.

Ciertamente nuestros gastos mensuales de mantenimiento son muy altos pues la misma situación país (la famosa frase) ha pesado sobre los servicios requeridos para que los socios disfruten al máximo, en buenas condiciones, de las instalaciones. A pesar de que se cobra a las familias una cuota para estar en futbol, o en el gimnasio, en el tenis o en las clases de piscina. Pero eso corresponde a entradas menores para cancelar al personal idóneo para esas disciplinas.

Igualmente, nuestra muy alta necesidad de ingresos, más de quinientos mil dólares mensuales, más de seis millones de dólares anuales, sirve para cancelar con sueldos dignos a todo nuestro personal, tanto de servicio y limpieza, como administrativo, de jardinería y obras. No podemos ceñirnos a los sueldos de la administración pública pues si no estaríamos falto de personal.

Quisiéramos invitarla a compartir un delicioso café italiano en nuestro bar (costoso, pero ya sabe, la situación) y conversar estas cosas personalmente "per venirci incontro".

Apreciados lectores, se le ha criticado fuertemente a Giorgia Meloni, actual primer ministro de Italia, sobre la venta del uso de armas que matan niños en Gaza, y responde: tenemos un contrato con Israel antes del siete de octubre del dos mil veintitrés y hasta el 2026 que debemos respetar". Respuesta INCORRECTA.

Nota 1. Por cierto, ¿podría pedir formar parte del centro comunal del Barrio Santa Cruz, aledaño al centro italiano venezolano, para solicitar que asuman mi defensa? ¿O será con el novedoso consejo comunal de Prados del Este?

Nota2: Algo parecido, o hasta más grave, ocurre en el Club Puerto Azul de Naiguatá. Ahí necesitaré del apoyo del gobernador de La Guaira. Participativa y protagónica.

1. https://www.aporrea.org/actualidad/a343625.html

2. https://youtu.be/t7HF3phYo2A?si=rGm_HOIDDZJOAUA9

3. https://www.cubaperiodistas.cu/2025/07/la-complicidad-de-europa-e-italia-en-el-genocidio-palestino/

4. https://www.elconfidencial.com/mundo/2024-10-11/quien-vende-armas-israel-paises-europeos_3975691/


 



Esta nota ha sido leída aproximadamente 942 veces.



Flavia Riggione

Profesora e investigadora (J) Titular de la UCV.

 flaviariggione@hotmail.com

Visite el perfil de Flavia Riggione para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: