El Petro, la cultura y demás lavativas…

Nos parecen acertadas las medidas decretadas por el compañero presidente Nicolás Maduro con respecto al uso obligatorio del Petro para transacciones legales, método contable y la posibilidad de pagar con Petros en establecimientos comerciales, hoteles y otros. Sin duda lo que vuelve confiable y útil una cripto moneda es su valor de uso.

Admito no ser un experto en economía, pero como muchos otros venezolanos pienso que es un error que el valor de nuestra cripto moneda este anclado al cambio dicom del día, que lamentablemente sigue rigiéndose por la moneda del imperio y sujeto a las manipulaciones criminales de las mafias financieras. Se debería buscar una forma distinta, ya sea que se ancle realmente el petro al valor del barril de petróleo o al del oro, o que se ajuste a los niveles de inflación para que los que queremos ahorrar en Petros no veamos nuestros ahorros afectados por la implacable guerra contra nuestra moneda nacional el Bolívar Soberano.

En las noticias escuchamos sobre la entrega de créditos millonarios en Petros para las gobernaciones y empresas de todo tipo. Nos parece bien siempre que esos fondos se utilicen verdaderamente para el beneficio del pueblo y que no vayan, como sucede muchas veces, al bolsillo de algunos burócratas de esos que todavía tienen la boca y el corazón a la izquierda pero la cartera bien agarrada con la derecha y llena de billeticos verdes. Quizás la tecnología del block chain pueda volver las cosas más transparentes. Hablemos claro, se le entregan recursos y suministros a los que siembran y a los que empaquetan el café y el azúcar y los precios no dejan de subir escandalosamente, lo mismo pasa con el cacao, hoy en día comerse un chocolate ya sea artesanal o con "sabor venezolano" es un lujo. Se le han entregado divisas y se le entregan Petros a desarrollos turísticos y posadas de todo tipo y pasar un fin de semana en la playa o en la montaña es imposible para un jubilado o para alguien con sueldo mínimo.

Entendemos la necesidad de reactivar la economía e impulsar la producción y el consumo interno. Pero tengamos en cuenta que existen unas elites, viejas y nuevas que se pagan muy bien mientras siguen con la costumbre neoliberal de pagarle menos a todos los demás y además decirles que les están haciendo un favor al darles "trabajo". Este tipo de cosas solo incrementa la desigualdad.

También escuchamos sobre la entrega de un crédito de un millón de Petros para la Patana Cultural. Lo que me lleva a una pequeña reflexión sin ánimo de ofender a nadie. Como siempre dicen algunos de nuestros líderes "con la verdad ni temo ni ofendo"

Antes que nada debo dejar claro como cultor recibo una pensión, algo que no sucede en ningún país del mundo. También he recibido periódicamente un bono especial. Aunque la brutal guerra económica desatada por las elites vuelve estas dos cosas sal y agua, no hay duda que muchas veces me han sacado la pata del barro como decimos por allí. Además también tengo que admitir le duela a quien le duela, que el ministerio de cultura, especialmente la gente de atención al ciudadano del IAEM y de la Casa del artista me han ayudado siempre con mis problemas de salud y por ello les estoy sumamente agradecido, además me consta el esfuerzo de los trabajadores de ambas instancias a la hora de apoyar y ayudar a los cultores y cultoras de la patria.

Como buen parrandero siempre que voy para Caracas, la patana es uno de los puntos de visita obligado, especialmente cuando tienen música en vivo. También visito, cuando cargo algo de plática, otros locales nocturnos algunos de los cuales creo, aunque no me consta, son empresas de producción social o figuras parecidas manejadas por revolucionarios. Personalmente me parece excelente que desde el gobierno se apoye a este tipo de iniciativas culturales así como a teatros y fundaciones culturales de las gobernaciones y alcaldías. Como siempre nos dijo el Comandante Chávez "la revolución o es cultural o no es revolución".

Dicho esto como cultor tengo que expresar algunas inquietudes. Existen varios locales, me refiero a sitios manejados por revolucionarios y me imagino que por ser locales pertenecientes al estado (o sea de todas y todos los venezolanos) los alquileres deben tener algún tipo de subsidio. Además recordemos que los servicios en el país siguen siendo los más baratos del continente, por lo tanto estos sitios de reunión y esparcimiento deben ser un buen negocio. Aunque nunca he sido invitado a tocar en la patana, muchas veces he ido a escuchar música en vivo, en especial en la de Altamira y Personalmente he tocado en otros establecimientos parecidos y en espectáculos organizados y financiados por la revolución. En algunos he recibido pagos, a veces buenos a veces no tanto. En muchas otras ocasiones, he colaborado (léase participar gratis) y seguiré colaborando cuando la revolución lo necesite y las cosas estén duras. Ahora bien en muchos de estos sitios como en la patana de Altamira, así como en otros muchos bares, y por supuesto en la mayoría de los locales en manos de "capitalistas", se acostumbra a que el artista trabaje "por la puerta" o sea por lo que se recaude de la venta de entradas del cobro de lo que algunos llaman muy anglosajonamente un "cover" o sea una entrada para un local al que normalmente se entra gratis. Muchas veces los músicos tienen hasta que pagar sus tragos. Incluso se dan casos en que los empresarios te ofrecen una botella por tus servicios, mientras ellos se quedan con unas muy buenas ganancias. Recordemos que en estos sitios los precios no son casi nunca "solidarios".

Debo dejar en claro que casi todo se mueve ahora en dólares. Pedir un teatro recuperado para una fecha equis, digamos para una graduación de una escuela pública o algo por el estilo tiene siempre unos gastos operativos. En Valencia, por ejemplo, el costo operativo del teatro municipal es de 100 dolarones y más, así como lo escuchan en dólares. Ahora bien es lógico que se tengan que pagar gastos operativos, pero sería justo y mucho más transparente que se pagaran en Petros. Por otro lado muchas veces y creo que muchos compañeros y compañeras habrán pasado por algo parecido, se nos pide colaborar con la cultura. Casi siempre escuchamos algo así como queremos que se presenten… ¡pero no hay real! Al parecer los artistas no tenemos "gastos operativos" para trasladarnos, comer y beber, pagar músicos y una larga lista. Por ejemplo las horas de ensayo en una de la pocas casas de ensayo que se mantienen funcionando se pagan en dólares y a precios casi internacionales, lo mismo pasa con los estudios de grabación. Un juego de cuerdas así sea de cuatro, guitarra clásica o eléctrica fluctúa entre los diez y doce dólares, ni hablar de las cuerdas de bajo. Recordemos que todo es importado, si, oyen bien en Venezuela ni siquiera fabricamos las cuerdas para nuestro instrumento nacional: el cuatro.

Como dije antes no me niego a presentarme gratis para eventos donde por x o z no hay suficientes recursos pero creo que los cultores y cultoras en general deben poder ganar lo suficiente, no solo para cubrir sus " gastos operativos" sino para vivir dignamente de su arte. Es ilógico que en un bar restaurant u otro tipo de local o en cualquier gran espectáculo público financiado por el gobierno o cualquier instancia del estado no se le pague, o se le pague mal a los artistas por sus presentaciones. Los locales y los espectáculos normalmente venden y producen mucho más cuando hay música en vivo, incluso, con ciertos artistas hasta agotan toda su existencia de curda y comida y son, bien lo sabemos, un excelente método de propaganda. Pero tenemos que estar claros, tocar por la puerta de un local o por una cifra como la que se les paga por ejemplo en caracas a un músico del interior, (o a alguien de la capital en otro estado) que quizás todavía no sea muy conocido, sin duda no alcanzará para cubrir ni siquiera sus gastos de traslado y alojamiento. Tengamos en cuenta que los artistas creamos y desarrollamos cultura y que la cultura entonces debería colaborar con los artistas no al revés.

No quiero extenderme mucho, pero tengo que, como comentario final, expresar mi total inconformidad con los grandes festivales y eventos donde lamentablemente la mayor parte del dinero se va en pagar "gastos de producción", proveedores y artistas importados mientras a los artistas nacionales se les paga una miseria. Excepto cuando el artista es un "enchufado" o un "escuálido" con algún tipo de renombre (que terminan siendo la misma lavativa). Que decir cuando la "estrella" importada toca con músicos nacionales, el importado cobra unos cuantos miles de dólares y a los músicos nacionales se los mata con veinte dólares o menos. Otra vez, cultura es lo que crean los artistas, los grandes escenarios, las gigantescas pantallas y sistemas de sonido son para difundir esas creaciones culturales con calidad pero ¿sin artistas de que sirven? Los artistas nacionales en especial las nuevas generaciones no solo necesitan promoción, necesitan poder tocar seguido y con buena paga. La falta de oportunidades de trabajo y la mala remuneración obligan a muchos excelentes artistas a emigrar en busca de una mejor vida y por supuesto son la sentencia de muerte de muchas de las mejores bandas venezolanas. Respaldar a locales como la Patana, organizar espectáculos como la reciente expo Valencia o el suena Caracas me parece excelente, pero ya va, donde está el supuesto socialismo en todo esto preguntaría el comandante Chávez. Como es que bandas totalmente anti revolucionarias cobran miles de dólares, mientras músicos revolucionarios declarados que tienen años echándole bolas y jóvenes con inmenso talento y que son el futuro de nuestro país son obligados a mendigar por unos pocos dólares. ¿Dónde coño esta la supuesta igualdad de condiciones y la justa distribución de la riqueza?

Ora vez no me malinterpreten, todas estas ferias, festivales, expos y demás son una estrategia perfecta para darle esparcimiento y algo de felicidad al pueblo sobre todo en las actuales circunstancias, pero tengamos claro que serán de "entrada libre" pero no son gratis, todos estos espectáculos son financiados con nuestro dinero .Mi única queja, mi única duda está en la forma en que algunos burócratas manejan los fondos de todos los venezolanos.

No me gusta quejarme sin proponer alguna solución, así que como siempre con la poca humildad que me queda dejo aquí algunas ideas: ¿qué tal si se tabularan las presentaciones de los artistas de acuerdo a su trayectoria y la calidad de sus actuaciones? Y que se partiera de un precio base específico para nuevos artistas. Todas las presentaciones se deberían pagar en Petros y el transporte y la estadía de los artistas de diferentes estados deberían siempre correr por los organizadores o encargados de los locales o espectáculos. Estoy seguro que los sitios nocturnos, en especial los manejados por "revolucionarios" no van a tener pérdidas por pagarles a los artistas algo más que lo que se recaude de entradas. De igual forma los espectáculos que el gobierno, las alcaldías y gobernaciones ofrecen "gratis" al pueblo, muchas veces manejan altísimos presupuestos y ese dinero es de todos los venezolanos, o sea que al final pagamos igualito. Lo que quiero dejar claro es que debe haber transparencia, y con el petro y el block chain se impondría la transparencia y el orden necesario. Se trata de que los artistas puedan vivir dignamente de su trabajo y que las riquezas del país se sigan distribuyendo más equitativamente. Dicen que el diablo está en los detalles…



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Gustavo Corma


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