He compartido con mis hijos y mi familia la ecuación que a diario debemos aplicar los seres humanos racionales, que es el ejercicio de encontrarnos con la alegría, la felicidad o el buen vivir. Es el sistema capitalista y su neuro guerra la que roba diariamente al imaginario colectivo el ser feliz, obligándonos a ver lo negativo, pues lo positivo lo invisibiliza una y otra vez con el aparataje mediático, este hecho nos debe recordar que los pensamientos en nuestra mente, nos hace lo que somos y sin darnos cuenta no lo forjan y modelan negativamente. Si elevamos el pensamiento a la paz y el buen vivir, seremos felices; el desarrollo mental está construido por leyes y no por artificios, es decir, "causa y efecto", es tan absolutamente inevitable como el reino oculto de los pensamientos, por esto es indispensable construir un imaginario colectivo armónico, respetando la diversidad.

Pero en medio de una guerra de clases más exaltada que nunca nos hacen aceptar las imposiciones fatídicas, destructivas y fascistas que conlleve a la destrucción de los pueblos, como lo podemos observar en diferentes latitudes, donde la hegemonía se convierte en juez, parte y policía y someten apunta de destrucción e invasión como lo ocurrido en Ciria por mencionar algún referente, producto de un gobiernos decadente, loco y paranoico. Nunca ha tenido carácter noble sino bestial, producto de su mismo proceso histórico derivado de pensamientos viles y dominación.

La iglesia tiene su más alta cuota construyendo por siglos mansiones celestiales de felicidad y paz, con la elección y aplicación de pensamientos que según ellos, conllevan a la perfección divina amenazando con la bestia y el infierno, al final son los rebeldes quienes han demostrado que el ser es su propio maestro y hacedor de su realidad, constructores de su propio imaginario. Es importante recordar que el individuo es el amo y responsable de su pensamiento en torno y destino; evidentemente si se da cuenta, que se da cuenta que es dueño y señor de sus pensamientos o si quiere ser libre o esclavo.

El pensamiento lógicamente es manipulable, y las crisis, la avaricia legalizada por el neoliberalismo, ha llevado a la destrucción donde muchos aceptan lo inmoral, la especulación, como madre propia; lamentablemente es sistemática y global, es el cáncer del siglo XXI y estamos llamados a derrotarlo; el enemigo no duerme pues el capitalismo convierte al ser en zombis cuyo alimento no es el cerebro sino el dinero.

La mente de un ser pudiésemos compararla con un jardín que puede ser, inteligente, cultivado o ser abandonado, o llenarse de hierva; pero sea cultivado o descuidado está destinado a producir, sino, se siembran semillas útiles entonces semillas de hierva mala caerían y crecerían abundantemente, e inclusive se reproducirían, el pensamiento y el carácter son uno solo, mientras el carácter solo se manifiesta y descubre a través de las circunstancias; el entorno de la vida de una persona siempre estará en armonía con su estado interior.

El sufrimiento es siempre el efecto de los pensamientos equivocados un hombre puede ser desgraciado y ser rico, pude ser bendito y pobre; solo pueden juntarse si la riqueza es empleada correctamente y con sabiduría, este también pudiera descender a la miseria cuando considere su destino una carga injustamente infligida. La persistencia es una sucesión dada de pensamientos; y el pensamiento también influye en la salud y el cuerpo y tiene un propósito.

Todo lo que el ser logra o falla es resultado directo de sus pensamientos, si este se gobierna con justicia podrá lograr ser exitoso, su pureza e impureza son suyas, de nadie más sin embargo, pudieran ser causales de todo un sistema, sin darse cuenta de lo que ocurre, su condición es suya de nadie más, su sufrimiento y felicidad emanada de adentro como el piense, como siga pensando, así seguirá siendo.

Hemos nacido con el objetivo de vencer, así el sistema nos encause a lo contrario