Fue presentado por el Ministro de Economía, Finanzas y Banca Pública, el Presupuesto Nacional 2015. Bien. En sesiones posteriores fue aprobado por la Asamblea Nacional. Sin embargo la actividad de presupuesto no es una actividad financiera, sino de planificación. No tan bien.
La planificación es la columna vertebral en la construcción del socialismo y por lo tanto deben tomarse todas las medidas para ir perfeccionando paulatinamente su funcionamiento y operatividad.
En nuestro país venimos arrastrando en buena parte, no solo la estructura organizativa que heredamos de la Cuarta, sino que mantenemos su manera de funcionar.
Así aunque hemos creado una Vicepresidencia de Planificación, a la cual le correspondería a través del Ministerio del Poder Popular de Planificación (MPPP) encargarse de las actividades de planificación del Estado y conformar el sistema de planificación socialista, se ha mantenido divorciada la actividad de planificación de la presupuestaria, como si ambas fueran distintas cuando en realidad son caras del mismo plan: las actividades a realizar expresadas en metas y expresadas en recursos monetarios.
Un plan sin costos no es plan, sino un listado de buenas intenciones. La planificación se encarga de elaborar objetivos y estimar su costo y finanzas determina sus posibilidades de financiamiento.
Al situar el presupuesto como una actividad de finanzas se disminuye el dominio de la función del ente planificador, se le quita fuerza como coordinador de la gestión pública, búsqueda de objetivos y coordinador de los esfuerzos institucionales, restándole a su control la mitad de la planificación realizada por las instituciones, como es la planificación del gasto.
Por ello la presentación de cuáles son las grandes metas nacionales anuales y el gasto consecuentemente programado en la Asamblea Nacional, lo cual debe ser el resumen de todo el esfuerzo de planificación de actividades y gastos realizado por el Estado, debe corresponderle al Vicepresidente de Planificación o al Ministro respectivo proporcionando una visión integral de logros a alcanzar y no desde el punto de vista del gasto previsto.
Actualmente la formulación del Presupuesto y del Plan Operativo y su seguimiento corresponde a la ONAPRE la cual es una institución adscrita al Ministerio de Economía, Finanzas y Banca Pública. Para disponer de un verdadero mecanismo de planificación socialista es conveniente que a la ONAPRE se le modifique su adscripción ubicándola en el Ministerio del Poder Popular de Planificación, donde pudiera maximizar sus capacidades como organismo de planificación, con lo cual estaríamos colocando la planificación venezolana socialista sobre sus pies y facilitando a su vez el esfuerzo permanente de reorganización del Estado en función de la construcción del socialismo y poniendo en práctica el ideario contenido en el Plan de la Patria.
Por las razones antes expuestas en ninguna institución del estado la formulación del Presupuesto y del Plan Operativo corresponde a la Dirección de Administración de la cual Finanzas es una dependencia, sino que existen unidades especializadas en planificación como son las unidades de Planificación y Presupuesto mientras que Finanzas se encarga del buen uso del dinero y que este se encuentre disponible al momento de ejecutar una actividad programada.
Esta misma especialización para que sea verdaderamente coherente la estructura del Estado, debe existir en sus más altos niveles de decisión.
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